A la hora de examinar la calidad del aceite de oliva, se tienen en cuenta cuatro parámetros fundamentales: el tacto durante el proceso, el aroma, el sabor y la calidad. A partir de ellos existen guías internacionales —la más respetada es Flos Olei— que, a tenor de lo dicho, realizan una valoración sobre 99 puntos y una clasificación entre los mejores de todo el mundo. Entre los privilegiados se encuentra Primer día de cosecha, un producto limitado de Castillo de Canena y producido en Jaén que, en su decimotercera edición, ha obtenido la puntuación máxima: 99 de 99. Por séptimo año consecutivo. Tanto para su versión Primer día de cosecha picual como para su Primer día de cosecha Arbequina.