El sorpasso, que ya se perfilaba en las encuestas de estos comicios, constituye todo un hito en la historia reciente alemana, y sobre todo un duro revés para la CDU y para la propia canciller. La CDU, con un 23% de votos en las elecciones de 2011, ha pasado al 19,4%. Tras la CDU han quedado los partidos La Izquierda, con el 12,1 %, y los Verdes con un raspado 5%. Aunque el nazi NPD, el Partido Nacional de Alemania, no ha logrado el 5% necesario para entrar en el parlamento regional, el AfD ha recogido el voto xenófobo y lo ha elevado a su máxima expresión. La AfD, además, ha subido al 10% por ciento en intención de voto en las próximas elecciones federales, que se celebrarán en 2017, lo que le convertiría en la tercera fuerza política de Alemania.