El rey Carlos III reaparece tras anunciar que padece cáncer (pero sin Kate Middleton)
Acompañado por la reina Camila, ha asistido al servicio religioso de Pascua en la iglesia de San Jorge, en el castillo de Windsor
El rey Carlos III y la reina Camila | Gtres
El rey Carlos III del Reino Unido ha reaparecido este domingo en el peor momento, al menos en lo que a salud se refiere, que está atravesando la Casa Real británica en los últimos meses. Así, tras la muerte de la reina Isabel II, la Familia Real inglesa está viviendo un 2024 convulso, por el el cáncer del rey Carlos, el de Sarah Ferguson, el de la princesa de Gales, Kate Middleton y el «cansancio extremo» de la reina Camila.
Ante todas estas malas noticias, el rey Carlos III ha querido mandar un mensaje de tranquilidad y esperanza con su primera aparición pública desde que se anunció, el pasado 5 de febrero, su lucha contra el cáncer. Acompañado por la reina Camila, ha asistido al servicio religioso de Pascua en la iglesia de San Jorge, ubicada en el castillo de Windsor.
Carlos III, muy sonriente en su primera aparición pública
El monarca, de 75 años, ha estado muy agradable este domingo y no ha dudado en saludar a la multitud congregada a las puertas del templo al llegar con su esposa, Camila. La presencia del rey Carlos III en este tradicional evento refleja una vez más su compromiso a pesar de su batalla contra la enfermedad.
Muchas personas allí congregadas le han deseado al rey unas felices Pascuas, y él ha correspondido: «Para vosotros también», ha dicho, con una amplia sonrisa.
Esta, como decíamos, es la primera vez que el Jefe de Estado británico acude a un acto público tras anunciar su enfermedad el pasado mes de febrero, aunque durante este tiempo, en el que ha estado centrado en su recuperación, sí que ha seguido trabajando, aunque sin asistir a grandes eventos. Además, está previsto que su agenda pública se amplíe después del verano, si su salud lo permite, evidentemente.
La presencia de la reina Camila en la celebración también ha sido destacada, ya que la hemos podido ver luciendo deslumbrante y con una gran sonrisa. Para la ocasión, ha vestido un elegante vestido entre verde y azul turquesa de falda midi, con un discreto escote en V y cuello elevado. Además, ha complementado su atuendo con un tocado a juego y otros accesorios en negro, como una capa corta y botas de ante con tacón cuadrado, demostrando estilo y esperanza en un momento desafiante para la Familia Real inglesa.
Grandes ausencias
Además de la reaparición de Carlos III, lo que también ha marcado este día ha sido la ausencia de los príncipes de Gales, Guillermo y Kate Middleton, y sus tres hijos (George, Charlotte y Louis), algo que era de esperar, ya que se encuentran en su refugio de Anmher Hall, la casa de campo que Isabel II les regaló tras su boda. La princesa anunció recientemente que está en tratamiento oncológico, un tema que ha generado preocupación y ha acaparado la atención de todos los medios. Por ello, lo más probable es que se mantenga alejada de la esfera pública unos meses.
Quienes sí han acudido han sido los hermanos de Carlos III: la princesa Ana y el príncipe Eduardo, que son Consejeros de Estado, personan que sustituyen al rey en caso de enfermedad o viaje, y el príncipe Andrés; así como sus parejas, Sir Tim Laurence, Sophie de Edimburgo y Sarah Ferguson.
Tras el servicio religioso encabezado por Arzobispo de Canterbury, Justin Welby, toda la familia ha regresado andando, entre vítores y aplausos, al castillo de Windsor para comer cordero asado, como todos los años.
Como vemos, a pesar de los desafíos de salud que enfrentan algunos miembros de la realeza británica, la tradición y el compromiso con los deberes públicos se mantienen firmes, lo que ha trasladado al pueblo inglés un mensaje de esperanza y fe.
