Con la 'dieta del bocadillo' puedes adelgazar un kilo por semana (aun comiendo pan)
En pleno apogeo de las proteínas y las grasas para adelgazar, este régimen propone justo lo contrario
En los últimos años, todos los que queremos adelgazar huimos de los hidratos, sobre todo de los simples, como el pan, el arroz, los cereales o la pasta. En su lugar, aumentamos nuestro consumo de proteínas y grasas para perder peso. Pero ¿y si lo estamos haciendo al revés? ¿Y si son precisamente estos hidratos, como el pan, los que nos ayudan a deshacernos de los kilos de más?
Esta es la premisa que lleva más de 22 años defendiendo Terica Uriol, quien aboga por un método para adelgazar que no pone en riesgo la salud y que se basa en la conocida pirámide nutricional. Uriol, licenciada en Farmacia y en Ciencia y Tecnología de los alimentos, es famosa en nuestro país por su ‘dieta del bocadillo’ y por el libro La dieta Anti Dukan (Ediciones B) publicado junto a Ana María Pascual en 2012.
Aunque el régimen que propone Uriol lleva años siendo conocido, es ahora, en pleno apogeo de todo lo proteico y lo graso, cuando está viviendo un renacer en lo que a fama se refiere.
La ‘dieta del bocadillo’ para adelgazar: sí al pan pero no al aceite de olica
El objetivo primordial de la ‘dieta del bocadillo’ es enseñar a comer para llevar una vida sana, tomando la cantidad necesaria de hidratos de carbono, reduciendo el consumo de grasas e ingiriendo la cantidad justa de proteínas.
Una apuesta de sentido común pero que muchos no relacionaríamos con el hecho de adelgazar, ya que tenemos interiorizado que los hidratos simples, como el pan, engordan; y que las grasas buenas, como el aceite de oliva, el pescado graso o los frutos secos nos ayudan a perder peso.
Uriol defiende que es justamente lo contrario: que el pan no engorda, pero sí las grasas. «Las grasas son necesarias para alcanzar una alimentación equilibrada. Entre un 15 y un 20% del total de los nutrientes esenciales diarios deben ser grasas; mejor si son grasas buenas (las vegetales)que grasas malas (animales o saturadas). Dicho esto, no hay que olvidar que ambos tipos son grasas por igual. Y aunque parezca una aberración, un trozo de tocino equivale calóricamente a dos o tres cucharadas de aceite de oliva», asegura Uriol en su libro.
Un trozo de tocino equivale calóricamente a dos o tres cucharadas de aceite de oliva
«El consumo excesivo de grasa, ya sea de aceite de oliva o de manteca de cerdo, se va a acumular en el tejido adiposo y nos va a hacer engordar. Es indudable que el aceite de oliva, nuestro oro líquido, es sanísimo. Sin embargo, una persona con sobrepeso tiene que reducir la ingesta de este aceite y de cualquier grasa si quiere perder peso. Una vez alcanzado el peso saludable o peso ideal, podrá consumir aceite de oliva diariamente, en la proporción adecuada», afirma.
«Al reducir de la alimentación diaria la cantidad de grasa, el organismo simplemente la va a tomar de donde hay: de los depósitos adiposos. En esta operación, el cuerpo no sufre. No tiene nada que ver con la cetosis que provoca la dieta Dukan», asegura la experta, detallando que al no consumir nada de grasa, o una cantidad muy poca, nuestro cuerpo usará como energía la que tenemos almacenada, lo que nos hará adelgazar.
Cómo reducir nuestro consumo de grasa
Así, los aliados básicos de la ‘dieta del bocadillo’, con los que reducir al máximo la cantidad de grasa, son dos:
- En primer lugar, usar una buena sartén antiadherente; así necesitaremos apenas unas gotas deaceite para freír o simplemente cocinar los alimentos en su propio jugo. Esto último dependerá del tipo de carne o pescado.
- En segundo lugar, utilizar papel de cocina para secar el exceso de grasa de algunos alimentos, por ejemplo, las sardinas enlatadas. «Es una operación rápida que, al finalizar la dieta, se nos habrá fijado en la rutina diaria».
Al respecto, la Sociedad Española para el Estudio de la Obesidad alerta sobre el consumo de grasas en nuestro país: ‘La ingesta de grasa en España cubre aproximadamente el 40% de la energía de la dieta, cifra que está un 35% por encima del límite máximo establecido por la Autoridad Europea deSeguridad Alimentaria’».
Sí al pan
«Cualquier cultura que se precie tiene en su alimentación un producto estrella, un alimento base. (…) Para los españoles ese producto esencial es el pan. El mejor pan es el básico, el de toda la vida, el corriente y natural. Sus ingredientes son: agua, harina, levadura y sal. El pan blanco y el pan integral engordan lo mismo. El integral, al contener fibra, ayuda en el tránsito intestinal, por eso se suele decir que es más sano. Pero hay que tener cuidado con la composición de los panes y otros productos integrales, porque a veces esconden muchas más calorías de las que creemos», afirma Uriol en su libro.
Entre una galleta integral, una sin azúcar y una galleta normal, yo elegiría la última. Seguramente es la que menos grasa tiene. En cambio, la integral llevará una mayor cantidad de grasa para enmascarar el sabor de la fibra
«Entre una galleta integral, una sin azúcar y una galleta normal, yo elegiría la última. Seguramente es la que menos grasa tiene. En cambio, la integral llevará una mayor cantidad de grasa para enmascarar el aabor de la fibra. La que no tiene azúcar también tendrá algo más de grasa para disimular el amargor, pues el edulcorante artificial no tiene exactamente el mismo sabor que el azúcar», añade.
No se deben sobrepasar los 15 o 20 centímetros diarios de pan en el caso de las mujeres, y entre 25y 40 centímetros en el caso de los hombres
Durante la ‘dieta del bocadillo’, se reserva el pan diario para la cena: «Se puede comer de todo con el pan, incluso una buena tapa de morcilla de Burgos, siempre y cuando se cocine sin aceite y se seque, con papel absorbente, el exceso de la propia grasa de la morcilla. No se deben sobrepasar los 15 o 20 centímetros diarios de pan en el caso de las mujeres, y entre 25y 40 centímetros en el caso de los hombres. Si se opta por el pan de molde, las mujeres no deberían comer más de cuatro rebanadas al día, y los hombres, siete».
Además del pan, ¿qué se come en esta dieta?
En esta dieta hay tres grupos, detallados por la revista Clara:
- Alimentos livres, que se pueden comer los que se quiera cuando se quiera: lechugas, tomates, cebollas, zanahorias, pepinos, cebolletas, pepinillos, espárragos, apio, setas, alcaparras, ajetes, pimientos, puerros, endibias, champiñones, limones, kiwis, sal, vinagres, especias, condimentos, ajos, perejil, vino para cocinar, caramelos y chicles sin azúcar, infusiones, café, edulcorantes…
- Alimentos no libres, que se especifican en función de cada paciente.
- Alimentos prohibidos: todos los que tenga alto aporte de grasas (aceites, mantequillas, margarinas, natas), así como azúcar, bollería, frutos secos, embutidos, la carne roja y el pescado azul.
Menú de ejemplo de la ‘dieta del bocadillo’
A continuación, recogemos un menú típico de este régimen. Recuerda que la cantidad de pan te la puedes reservar para cuando quieras:
Desayuno
- Para beber: té o infusión, o zumo de frutas natural.
- Para comer: tostada de pan con pavo o cereales.
Media mañana y media tarde
- Fruta de temporada o yogur desnatado.
Comida y cena
- De primero: ensalada de lechuga o caldo de verduras o espinacas hervidas o huevos…
- De segundo: bocadillo de huevo, rúcula y pollo o merluza al horno, o bocadillo de atún, o pescado blanco al horno, o tortilla francesa…
Si se hace bien esta dieta, se puede adelgazar hasta 2 kilos en dos semanas. Así que ya sabes…