La DGT pone el foco en el catadióptrico para evitar accidentes por baja visibilidad
Estos elementos son clave para garantizar la seguridad vial durante las horas con menos luz del día
Al conducir, más del 90% de la información que recibimos sobre lo que ocurre en la vía nos llega a través de los ojos. La mayor parte de las maniobras que se realizan se llevan a cabo confiando en nuestra vista.
Tan importante es ver como ser vistos. Y es aquí donde entran en juego los sistemas de iluminación del coche que permiten una mejora en la visión especialmente en las horas con menos luz del día.
A la hora de conducir, es necesario y obligatorio que todos los elementos del vehículo se encuentren en buen estado. La mayoría de los conductores conocen los elementos básicos a tener en cuenta cuando pasamos la ITV: frenos en buen estado, neumáticos con una buena presión, una dirección adecuada, etc. Sin embargo, hay componentes que a veces podemos pasar por alto y su importancia es igual o mayor que los anteriores.
¿Qué son los catadióptricos?
El catadióptrico es un elemento del vehículo cuya función es reflejar la luz procedente de una fuente luminosa. Es decir, son esos elementos de los vehículos que hacen rebotar las luces de los otros coches, lo que les hace visibles, especialmente durante la noche.
Su función, según la Dirección General de Tráfico, es indicar la presencia del coche además de ayudar a distinguir y a reconocer sus dimensiones mediante esa reflexión de la luz que procede de una fuente independiente.
¿Es obligatorio llevar catadióptricos?
Sí. Los coches deben llevar, en la parte trasera, cuatro de color rojo. No obstante, algunos modelos los complementan con otros ubicados en el frontal o en el lateral.
Hay que tener en cuenta que las matrículas reflectantes, la señalización extra (como el marcado del contorno) o las balizas luminosas como la V-16 no se consideran catadióptricos.
Pero no solo es exclusivo de los turismos, los catadióptricos son obligatorios en todos los tipos de vehículos. Las motocicletas y ciclomotores deben llevar uno no triangular de color rojo en la parte trasera: si es un solo debe estar situado en el centro y si son dos, tienen que ser simétricos. Opcionalmente pueden llevar uno o dos por cada lado.
El 29% de los accidentes ocurren en las horas con menos luz
Según publica As y explica Juan Ignacio Serena, jefe de sección de Formación Vial de la DGT, para ser vistos es fundamental “la utilización adecuada de las luces del vehículo, acorde a lo establecido reglamentariamente”, entre lo que destaca “cuidar que los sistemas de señalización óptica y los catadióptricos estén en buen estado”.
Siempre hay que tener precaución al volante, en especial durante las horas menos luminosas del día. Según la DGT, durante “la noche, el atardecer o el amanecer” ocurrieron en España, en 2019, casi 30.000 accidentes con víctimas (el 29%). Esos accidentes reunieron casi el 40% de los fallecidos (700), lo que confirma la mayor gravedad de los siniestros registrados durante la conducción nocturna.