Joseph Oughourlian, al consejo de administración de Prisa: «El editor ahora soy yo»
El presidente del grupo hace encaje de bolillos para conseguir la salvación financiera del editor de ‘El País’ y Cadena Ser
El presidente de Prisa, Josep Oughourlian, ha empezado a comunicar de manera informal pero directa a varios miembros de su consejo de administración el deseo de actuar a partir de ahora como máximo responsable editorial de la empresa. El principal accionista del grupo mediático quiere transmitir a los accionistas que él será el responsable de la pauta de los contenidos, tanto en el diario El País, integrado con el periódico económico Cinco Días, como de la Cadena Ser.
Tras el reciente fallecimiento de Miguel Barroso el inversor armenio que, a través de su fondo de inversión Amber Capital controla cerca del 30% de Prisa, dice que quiere prescindir de la figura del consejero editorial que era la que ejercía el antiguo secretario de Estado de Comunicación con Zapatero y hombre de confianza de Pedro Sánchez. «El editor ahora soy yo», ha dicho a los principales accionistas de la compañía.
Un movimiento con el que busca bajar el perfil al nombramiento de José Miguel Contreras como director de contenidos y nuevo número tres de la compañía. Una figura que –como ha contado este diario– será el verdadero responsable de la línea ideológica en sustitución del fallecido Miguel Barroso. Además de El País, Contreras tendrá influencia en los contenidos de Cadena Ser y su llegada incluso podría provocar cambios en los equipos de dirección de los medios del grupo.
La versión de Oughourlian
La versión de Oughourlian está en la línea de la oficial de la compañía que indican que las responsabilidades del fundador de Globomedia «no son de carácter editorial» y que se refieren exclusivamente a la transversalización de contenidos de audio y vídeo. Sin embargo, la productora Global Alconaba, encabezada por Andrés Varela (socios afines al Gobierno que entraron en el accionariado de Prisa comprando un 7% a Telefónica a instancias del propio Barroso) se ha convertido ahora en el principal interlocutor cotidiano de Oughourlian con Moncloa.
El presidente de Prisa mantiene contactos recurrentes con Pedro Sánchez, pero en el día a día la relación política se establece a través de esta firma y de su valedor en Prisa, que no es otro que José Miguel Contreras que fue junto a Varela fundador de Globomedia.
Por otro lado, Oughourlian trabaja para asegurar la viabilidad financiera de Prisa. El inversor armenio controla mayoritariamente las decisiones del consejo y trabaja directamente con la vicepresidenta, Pilar Gil, en un plan de refinanciación que obligará a todos los accionistas a rascarse el bolsillo para sanear el castigado balance de la empresa.
Levantar el veto a Vivendi
Los responsables de Global Alconaba podrán mantener su papel accionarial en sintonía con los postulados del Gobierno pero antes de nada deberán poner de manifiesto su apuesta decidida por el grupo asegurando la aportación de fondos frescos que requiere Prisa y que Oughourlian demanda. De hecho, este diario ha publicado que su intención es seguir subiendo en el capital.
La primera llamada a filas fue aprobada la semana pasada en forma de una emisión de obligaciones convertibles de 100 millones de euros, pero no se descarta que en el futuro más inmediato sean necesarias nuevas inyecciones para afrontar la renegociación de los casi 900 millones de euros que todavía debe el grupo.
En la bocamanga con que Oughourlian maneja todo este proceso de saneamiento existe la alternativa de dar pista a Vivendi para que asuma una participación superior al 11,8% que posee actualmente en Prisa. El Gobierno rechazó esta iniciativa pero las circunstancias cambiantes pueden facilitar ahora un vuelco de la situación y permitir que puedan subir hasta el 15%, porcentaje que se podría alcanzar tras suscribir el segundo convertible en menos de un año.