El líquido del yogurt: qué contiene y cuáles son sus beneficios
El suero de la leche puede aparecer por el movimiento durante el transporte o por la ruptura de la cadena de frío
Yogurt con fresas y copos de avena
Es habitual que, al destapar un yogurt, encontremos un líquido blanquecino en la capa más superior. Lo más común, por inercia, es tirarlo por el fregadero antes de consumirlo.
Existe la creencia de que la presencia de ese líquido en el vaso de yogurt significa que no está en condiciones óptimas para su ingesta. Ya sea porque está caducado o por un mal proceso de elaboración. Lo cierto es que este fluido es totalmente natural y realmente beneficioso. Nunca deberíamos deshacernos de él.
¿Qué es ese líquido?
El líquido que vemos no es más que el suero de la leche con el que se ha elaborado el yogur. Es totalmente seguro de consumir y es donde se encuentra la mayor parte de las proteínas y nutrientes del producto. Si lo tiramos estamos desperdiciando grandes beneficios para el organismo.
¿Por qué no aparece en todos los yogures?
El desuerado (o liberación del suero) se produce, principalmente, por el movimiento durante el transporte, tanto desde el lugar de producción, como dentro de los comercios o del trayecto del supermercado a casa. Pero no solo se debe a eso, sino también a la temperatura a la que se conservan. Los yogures deben mantenerse refrigerados a una temperatura uniforme y romper la cadena de frío provoca la aparición del suero. De ahí, que no todos los yogures que se consuman lo tengan.
¿Qué contiene el líquido del yogurt?
Los expertos recomiendan consumir este suero ya que forma parte del alimento y es beneficioso para el cuerpo.
En caso de no gustar su sabor o su aspecto, aconsejan mezclarlo con el resto del yogur, removiéndolo con la cuchara hasta homogeneizar el producto antes de tomarlo. Obviamente, no es obligatorio su consumo, pero al tirarlo no solo se tira agua, sino también proteínas lácteas, calcio, potasio y fósforo.
Este suero está formado mayoritariamente por agua y es uno de los dos principales grupos de proteínas de la leche -la otra es la caseína, que está en la cuajada-. Pero no todo es H2O en el suero. También contiene nutrientes que resultan beneficiosos para nuestra salud:
–Potasio: este mineral es necesario para que el cuerpo “funcione normalmente”, indica la Biblioteca Nacional de Medicina de EE.UU. Su trabajo consiste en ayudar a la función de los nervios, a la contracción de los músculos, a que el ritmo cardiaco se mantenga constante, a que los nutrientes lleguen correctamente a las células y a expulsar los desechos de estas.
– Calcio: otro mineral, el más abundante en nuestro cuerpo y uno de los más importantes. Entre sus tareas está la de ayudar a formar y mantener los dientes y huesos sanos. Además previene la osteoporosis. Pero los huesos no son su único trabajo. También forma parte de la coagulación de la sangre, del envío y recepción de señales nerviosas y de la contracción y relajación muscular, entre otras.
¿Qué hacer con este líquido?
Si no nos apetece consumir este líquido en el mismo yogurt, tenemos la opción de guardarlo para utilizarlo después en otras preparaciones. Por ejemplo, para hacer queso de yogurt casero. Además, puede servir como base líquida de smoothies o batidos. E incluso, puede ser muy interesante añadirlo a recetas dulces como a las mezclas de magdalenas caseras o bizcochos.
Uno de los subproductos de la industria láctea son los suplementos de proteína en polvo, en concreto el whey. Se trata de proteínas del suero de leche, el mismo que del yogur, y sirven como sustitutos para obtener proteínas naturales para nuestro organismo y cuentan con una gran biodisponibilidad.
