Almudena de la Mata, la gran visionaria del blockchain en España

Almudena de la Mata es una de esas personas de perfil brillante y poliédrico. Licenciada en Derecho y formación empresarial por Icade y doctora por la Universidad de Hamburgo, la socia directora del Blockchain Intelligence Center of Excellence (BICoE) hunde pierna y media en la esfera tecnológica. 

El BICoE es un «strange animal», tal y como lo define De la Mata. Con sede en Madrid, presencia en 17 países, fuertes lazos con la Comisión Europea, membresía en el consejo científico de la Asociación Europea de Blockchain (INATBA) y convenios firmados con la Federación Latinoamericana de Bancos y el Consejo General de la Abogacía Española, dispone además de una «cohorte de profesionales y profesores» alineados con una triple misión. 

Por una parte, el centro se dedica a dialogar con los agentes más tradicionales de la economía y la empresa «para que entiendan y apliquen el blockchain más allá de la especulación asociada a las criptomonedas». Por otra, la institución que lidera De la Mata ejerce de think and action tank para divulgar, formar y publicar en torno a esta materia. 

Y, en tercer lugar, existe una pata de consultoría y desarrollo de proyectos, legal e impacto social. En esta última categoría se enmarca, por ejemplo, la iniciativa DivAirCity, una app para que cinco ciudades europeas (Castellón, Bucarest, Aarhus, Potsdam y Orvieto) mejoren la calidad del aire y sus condiciones de salud. 

Qué es y cómo se usa

La pedagogía es vital cuando se trata de cantarle al blockchain sus virtudes más allá de la criptosospecha a la que aludía De la Mata. «En internet trasladas datos pero no valor, porque el dato original se lo queda quien lo envía. Si lo tiene una parte no lo tiene la otra. En cambio, con el blockchain, si tengo una foto y te la envío, pierdo el acceso a esa imagen y convierto el dato en valor».

«Los tokens -ahonda- son como fichas, es decir, el continente que relleno con el contenido que yo elija, representando un valor y viajando digitalmente. Puedo tokenizar las acciones de una empresa con seguridad y sin intermediarios, de modo que pasen de quien las vende a quien las compra rápidamente y con toda la trazabilidad del mundo».  

Cualquier proceso multiparte resulta ideal para el blockchain. Es una herramienta óptima para reducir fallos durante un proceso y mejorar la ejecución de decisiones. La logística, el arte digital vía NFTs o la posibilidad de materializar negocios jurídicos en tiempo real son sólo algunas de las opciones sobre la mesa.

Lo que de verdad importa

Entre enero y diciembre de 2017, el valor de las criptomonedas creció un 1.500%. Al año siguiente quebraron 751 divisas digitales. De la Mata argumenta que nada tiene que ver el ánimo excesivo de lucro con la solidez de la tecnología que soporta conceptos como el blockchain, web3 o el mismo metaverso, donde el BICoE ha creado un prometedor entorno educativo que ya ha sido reconocido a nivel europeo.

«Como con cualquier otra inversión, la gente que apuesta por el blockchain debe evaluar los riesgos con cabeza, más allá del hype. Miren quién respalda el proyecto y cuál es su propósito», sugiere. Firme creyente en el metaverso, De la Mata asegura que «generará mucho mercado porque fomenta las relaciones de manera más versátil, flexible y completa». Es como Zoom elevado a la enésima potencia.

Trama geopolítica

Europa, EEUU, China e India despliegan sus propias estrategias de blockchain conscientes de que esta herramienta moldeará, junto con la IA, el futuro económico y social.

A través de la EBP, Bruselas trabaja desde 2018 en levantar tres pilares bastante novedosos: el reglamento MICA; la infraestructura que integrarán la red EBSI, la identidad digital europea y el euro digital; y el respaldo a proyectos privados y pymes. «Esto supone entrar en una nueva dimensión y Europa avanza hacia ella a pasos agigantados, igual que EEUU con su criptodólar».