Agua y hamburguesa
El alto consumo de bebidas azucaradas es una de las principales causas que propician altos índices de obesidad en Estados Unidos y uno de los grupos que más la consumen, y al que se dirige la publicidad de estas corporaciones, son los hispanos.
El alto consumo de bebidas azucaradas es una de las principales causas que propician altos índices de obesidad en Estados Unidos y uno de los grupos que más la consumen, y al que se dirige la publicidad de estas corporaciones, son los hispanos.
Burger King deja a los pequeños sin refrescos. La segunda mayor cadena de hamburgueserías del mundo, elimina estas bebidas de los menús infantiles siguiendo pasos similares de algunos de sus competidores. «La medida ayudará a los niños a comer sano, informó este miércoles la prensa local.La empresa ha decidido introducir los nuevos cambios como parte de sus “esfuerzos para ofrecer a los consumidores opciones que coincidan con las necesidades de su estilo de vida”, dijo Alex Macedo, presidente de Burger King North America, al periódico USA Today.
Después de que McDonald’s introdujera cambios similares, Burger King sustituyó los refrescos de los menús infantiles por leche desnatada, zumo de manzana o batido de chocolate eso si semidesnatado.“Esto ayudará a los niños a comer mejor, porque el refresco es la principal fuente de calorías en la dieta de muchos de ellos”, dijo tras el anuncio la directora del grupo Center for Science in the Public Interest, Margo Wootan.
El alto consumo de bebidas azucaradas es una de las principales causas que propician altos índices de obesidad en Estados Unidos y uno de los grupos que más la consumen, y al que se dirige la publicidad de estas corporaciones, son los hispanos.
Según datos de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC), el porcentaje de niños de entre seis y once años con problemas de obesidad pasó de 7 % en 1980 a 18 % en 2012 y gran parte de la culpa la tienen estas bebidas azucaradas, Fanta, Pepsi, Coca-Cola, Seven Up y demás refrescos.Agua, que se nos ha olvidado con tanto té, café,bebidas energéticas, yogures líquidos, refrescos y zumos de frutas que lo que hay que beber es agua. Nunca ha habido tanta obesidad ni tanta obsesión con la delgadez, un antagonismo peligroso que mata la salud y el espíritu.
