La falta de acuerdo entre los sectores del CGPJ aboca a Lesmes a la dimisión
Los vocales progresistas se abren a negociar con algunos conservadores tras otra reunión fallida para renovar el Tribunal Constitucional
Se confirman los presagios. Los sectores del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) siguen sin llegar a un acuerdo para nombrar a los dos magistrados del Tribunal Constitucional que les corresponde. Sus representantes se han vuelto a reunir este miércoles sin alcanzar un consenso. Un escenario que llevará a los vocales progresistas a explorar «vías alternativas» para acabar con el bloqueo «en el plazo más breve posible». La intención es negociar con algunos de los representantes conservadores para terminar con la parálisis.
El CGPJ acordó la semana pasada que los interlocutores conservadores (José Antonio Ballestero y Carmen Llombart) y progresistas (Álvaro Cuesta, Rafael Mozo y Roser Bach) se viesen este miércoles para intentar llevar dos candidatos al Pleno del día siguiente, que ya no se celebrará. Este escenario aboca a Carlos Lesmes, presidente del Consejo, a una dimisión inminente. El asunto se abordará en un pleno extraordinario el día 13, donde los miembros de la comisión negociadora deben dar cuenta de las gestiones realizadas. Es la fecha límite para Lesmes.
«Se ha puesto de manifiesto la intensa búsqueda de candidatos llevaba a cabo por nuestro grupo entre miembros del Tribunal Supremo que, no obstante, ha resultado infructuosa, de momento hasta en tres ocasiones», reconocen los representantes conservadores en una nota. El texto sostiene que la visita del comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, es tan reciente que «hay que dar tiempo para que rinda los efectos que todos esperamos».
No habrá Pleno del CGPJ
El ala progresista culpa del bloqueo a los vocales conservadores. Anta la falta de «horizonte temporal y concreto» han decidido explorar «otras vías alternativas de acuerdo inmediato» para cumplir «en el plazo más breve posible» con las obligaciones constitucionales. Así se lo han hecho saber al propio Lesmes. Las vacantes del tribunal de garantías deberían haberse resuelto el 13 de septiembre, día en el que se agotó el plazo impuesto por el Gobierno.
Los contactos entre ambas corrientes del CGPJ llevan produciéndose semanas sin que se haya producido la tan ansiada fumata blanca. Las conversaciones también se han sucedido en el seno de los bloques. El pasado martes, los conservadores celebraron una reunión que se prolongó hasta altas horas de la noche para fijar posiciones de cara a la cita del día siguiente. El cónclave interno terminó con un acuerdo «unánime» sobre cómo afrontar las conversaciones con sus colegas progresistas.
Estos ya presentaron el 16 de septiembre una propuesta con los nombres de nueve magistrados del Tribunal Supremo para que ocuparan una de las dos plazas a renovar del Constitucional. Los representantes conservadores les instaron a reducir esa relación a un único candidato. Las fuentes judiciales consultadas por THE OBJECTIVE indican que han seleccionado tres nombres, cuya identidad no ha trascendido. Entre los favoritos, Pablo Lucas y José Manuel Bandrés. Los conservadores aún no han seleccionado a ninguno. No obstante estarían en condiciones de hacerlo «previa deliberación interna».
Los dos bloques del CGPJ han reiterado en el encuentro las posiciones mantenidas en reuniones anteriores sobre la «precaria situación» del Tribunal Supremo, donde faltan 14 de los 80 magistrados. En los próximos meses la situación se agravará, ya que está previsto que se jubilen media docena de jueces. Para nombrar a otros es necesario renovar a los vocales del Consejo, cuyo mandato caducó hace cuatro años.
La renovación de los vocales camina en paralelo a la del Constitucional y está detrás de la posible renuncia de Lesmes. El presidente del CGPJ ya amenazó con ello si los partidos políticos no desbloqueaban la situación. El Gobierno aprobó el año pasado una ley para prohibir nombramientos hasta que no se renovara el Consejo.
«Retomar la normalidad»
La normativa establece que las Cortes Generales son las encargadas de designar, por mayoría de tres quintos, a los 20 vocales del Consejo. Cada Cámara elige a 10 vocales, cuatro entre juristas de reconocido prestigio y otros seis jueces de los 5.300 en servicio. Estos últimos son seleccionados de una lista cerrada con nombres que eligen los propios profesionales, avalados por sus colegas.
«Lo fundamental para retomar la normalidad es renovar los vocales de manera inmediata. La gente no conoce la magnitud de la catástrofe que supone no hacerlo», reconoce Sergio Oliva, de la Asociación Judicial Francisco de Vitoria, la segunda con más miembros pero sin representación en el Consejo. Las organizaciones profesionales lo ven prioritario y reconocen que la marcha de Lesmes podría desbloquear la situación, especialmente si le siguen otros miembros del CGPJ.