Urtasun pone como ejemplo de cultura colonial el arte romano y la pintura virreinal
El ministro indulta al Prado, el Reina Sofía, el Archivo de Indias, la RAE y el Museo Naval de la revisión de sus fondos
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun. | Ilustración: Alejandra Svriz
El ministro de Cultura, Ernest Urtasun, ha puesto como ejemplo de cultura colonial el arte romano surgido en España tras la etapa de los íberos y la pintura virreinal fruto de la presencia española en Iberoamérica, según se indica en una respuesta parlamentaria a la que ha tenido acceso THE OBJECTIVE. En ella se indulta a los dos principales museos pictóricos del país -el Prado y el Reina Sofía-, así como a la Real Academia Española (RAE), el Museo de Arte de Cataluña y el Museo Naval, de la revisión de sus fondos que su departamento quiere llevar a cabo en esta legislatura.
Los diputados del PP Pablo Hispán y Soledad Cruz-Guzmán preguntaron el pasado 8 de enero si existen casos de cultura colonial en el Museo del Prado, el Reina Sofía, el Museo de Arte de Cataluña, el Museo de América, el Archivo de Indias, el Museo Arqueológico o el Museo Naval a raíz de las primeras manifestaciones del titular de Cultura. También inquirieron si el Instituto Cervantes, la RAE o la Acción Cultural Española «han promovido la cultura colonial» en el pasado.
El departamento de Urtasun replica en su respuesta que, en el caso del Museo Naval, y tras consultar al Ministerio de Defensa, «no existe ningún tipo de catalogación que coincida con cultura colonial» en este sitio que atesora restos de las principales batallas navales del pasado y que está ubicado junto al cuartel general de la Armada.
Cultura también preguntó al Ministerio de Ciencia, Innovación y Universidades por la RAE, institución que respondió «que no está entre los objetivos de la misma promover la cultura colonial». No obstante, según puntualiza Urtasun, «las obras de la RAE, como el Diccionario de la Lengua Española, el Diccionario Panhispánico del Español Jurídico y tantas otras, incorporan, de manera especial, las aportaciones de todas las Academias de los Estados americanos».
El equipo de Urtasun no se moja en los casos del Museo del Prado y el Reina Sofía, con un marco jurídico distinto al del resto de museos controlados por el Ejecutivo. Tampoco alude al Museo Nacional de Arte de Cataluña, que cuenta con una personalidad jurídica propia e independiente, fruto de un consorcio en el que están la Generalitat, el Ayuntamiento de Barcelona y el Estado, por lo que esos centros museísticos quedan indultados en la respuesta parlamentaria.
Cultura sí que teoriza sobre qué entiende por cultura colonial: «El conjunto de manifestaciones culturales que se producen en una comunidad bajo la presencia de otro grupo humano foráneo que ejerce una posición dominante». En este sentido, menciona las «sucesivas colonizaciones» que se han producido desde la antigüedad, en el que «la cultura colonial se desarrolla tras la introducción de las formas culturales del colonizador, que vienen a modificar las manifestaciones que hasta ese momento eran características de las comunidades originarias».
Un fenómeno que afecta, «de manera sustancial», a procesos económicos, sociales y culturales «más allá del término que cada Estado colonial utiliza al denominar la estructura administrativa de los territorios colonizados», esgrime el departamento de Urtasun.
En el caso de España, son «numerosos los ejemplos de cultura colonial» que se conservan en las colecciones de los museos que están ahora en el punto de mira, a juicio de Cultura. «En la Edad Antigua destacan los ejemplos artísticos del arte íbero que tuvo una importante influencia de pueblos colonizadores del Mediterráneo Occidental, hasta la llegada del Imperio Romano y la total imposición de sus formas culturales». Los «importantes» restos arqueológicos ibéricos se conservan en el Museo Arqueológico Nacional (MAN), donde existe un departamento de Protohistoria y Colonizaciones.
El departamento de Urtasun obvia la presencia musulmana de siete siglos en España para dar un salto a la Edad Moderna, concretamente al período que se abre tras la conquista de América en 1492, cuando se inicia «un proceso de colonización que se prolonga hasta finales del siglo XIX» con la pérdida de las últimas posesiones españolas de ultramar y «que dará lugar a la imposición de las formas culturales europeas frente a las manifestaciones artísticas que venían produciendo las diferentes comunidades que poblaban los territorios que se fueron conquistando», refiriéndose a los mayas, aztecas y del resto de culturas indígenas que habitaban el continente hermano.
Cultura pone en solfa «los lenguajes artísticos europeos» que se fueron «imponiendo» durante esos siglos de dominio español en las diferentes disciplinas artísticas que había en el continente americano, «sucediéndose en el tiempo los estilos que se iban imponiendo en la metrópoli: Renacimiento, Barroco, Rococó, etc..».
Una «manifestación» de este tipo de cultura colonial española es «la pintura virreinal que se conserva en museos e iglesias españolas y americanas, siendo un ejemplo destacado la colección de pintura del Museo de América de Madrid», también bajo la lupa del ministerio que dirige Urtasun por el Tesoro de los Quimbayas, un colección de 122 piezas precolombinas de oro y cobre con las que Colombia obsequió a la Corona española a finales del siglo XIX tras interceder en una disputa fronteriza con Venezuela. El Gobierno de Gustavo Petro ya ha expresado su intención de recuperar los bienes culturales del Museo de América, donde recientemente estuvo su viceministra de Asuntos Multilaterales, Elizabeth Taylor.
«Hay un debate internacional acerca de las piezas y obras de arte del periodo colonial que se encuentran fuera de sus países de origen»
Ministerio de Cultura
Cultura también se detiene en su respuesta parlamentaria «en los ejemplos de cultura material» producida durante la presencia española en África entre el siglo XIX y la primera mitad del siglo XX. En 1925, se creó la Dirección General de Marruecos y Colonias, que pasó a denominarse Dirección General de Plazas y Provincias Africanas tras la declaración de independencia de Marruecos en 1956. Ese organismo promovió la creación del Museo de África en 1946, donde se comenzó a reunir una colección de objetos arqueológicos y etnográficos del continente vecino.
Dicho museo se mantuvo abierto entre 1961 y 1973. Tras su clausura, «algo más de 1.000 piezas» pasaron a formar parte de las
colecciones del actual Museo Nacional de Antropología y el mencionado MAN, por lo que el ministerio sugiere que estos objetos están bajo la lupa de su revisión colonial.
«En la actualidad, hay abierto un debate internacional acerca de las piezas y obras de arte del periodo colonial que se encuentran fuera de sus países de origen, debate que el Ministerio de Cultura seguirá muy de cerca, atendiendo a los compromisos internacionales asumidos por España» en la última cumbre de Mondiacult en México y en el décimo encuentro iberoamericano de museos del año 2022, avisa el departamento de Urtasun.
