Tecnología 3D para reconstruir los cuerpos mutilados por la guerra
Leemar es una joven siria de 8 años. Hace casi dos años, ella y su familia estaban en su casa en Dara’a, en el sudoeste del país, cuando la ciudad fue bombardeada. Resultó gravemente herida en ambas piernas y fue tratada inicialmente en Siria. Seis meses después del bombardeo, su familia huyó de la guerra. A su llegada al campamento de refugiados de Azraq en el norte de Jordania, la red médica desarrollada por Médicos Sin Fronteras (MSF) permitió que fuera derivada al Hospital Al-Mowasah de cirugía reconstructiva de la ONG en Amán, el primer centro médico de Oriente Próximo que imprime prótesis en 3D para víctimas de la guerra.