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Las cinco claves para combatir la dispersión mental

Estar distraído impide enfocarse en las tareas diarias, lo que puede tener consecuencias negativas a corto y largo plazo

Las cinco claves para combatir la dispersión mental

Ilustración | Pixabay

En la época actual, caracterizada por la búsqueda de la eficiencia y el uso extendido de las tecnologías sociales, la dispersión mental se presenta como un desafío significativo. En numerosos contextos, se requiere la capacidad de concentrarse en una tarea sin distracciones, pero ¿qué sucede con los otros procesos que compiten por la atención?

Las estadísticas varían dependiendo de los estudios, pero la frecuencia con la que se consulta el teléfono al día es preocupante, oscilando entre 80 y 110 veces. En la mayoría de los casos, no se está buscando información específica, sino más bien un anhelo de gratificación instantánea.

Este comportamiento compulsivo es inducido por la expectativa de recibir notificaciones, la rapidez del timeline en las redes sociales o la búsqueda de validación a través de «me gusta», alimentando así el deseo constante de atención. Los expertos lo atribuyen a lo que llaman «reforzamiento aleatorio del comportamiento».

¿Cuándo hay dispersión mental?

Es real que el uso excesivo de las nuevas tecnologías está provocando una disminución en el enfoque de las tareas, según los expertos, lo cual afecta negativamente la productividad y habilidades cognitivas. La dispersión mental es básicamente el efecto contrario a la concentración.

Esto sucede cuando la mente maneja múltiples pensamientos simultáneamente, integrando información de diversas fuentes. En este estado, se pierde el control, permitiendo que estímulos externos dirijan el comportamiento, en lugar de enfocarse en lo que realmente importa. Aunque la dispersión mental puede ser beneficiosa para procesar información de manera rápida y fomentar la creatividad, no es tan útil cuando se trata de analizar la información de forma profunda y reflexiva.

En la época actual, caracterizada por la búsqueda de la eficiencia y el uso extendido de las tecnologías sociales, la dispersión mental se presenta como un desafío significativo

Estrategias para que la dispersión no sea un lastre

En esta lucha constante por satisfacer los deseos momentáneos, es evidente que el entorno tecnológico actual está generando un fenómeno de dispersión mental. La mente se encuentra saltando de una cosa a otra, incapaz de concentrarse en una tarea durante un período prolongado.

Rafael Guerrero, doctor en Educación y director del centro Darwin Psicólogos, identifica la hiperestimulación como la raíz de este problema. Señala que el constante flujo de información que se recibe a lo largo del día, desde las notificaciones de WhatsApp hasta las redes sociales y los anuncios, hace que vivir en este estado sea todo un desafío. La Mente es Maravillosa ha destacado estas estrategias para evitar la dispersión mental.

1. Usa una agenda y haz programaciones

Tanto si se prefiere una agenda física como una digital, ambas son herramientas muy útiles para combatir la dispersión mental. Cuando la mente está llena de tareas y pensamientos, escribirlos en un lugar designado permite liberar espacio mental y enfocarse en el momento presente, posponiendo esas preocupaciones hasta que sea el momento adecuado para abordarlas. Esto ayuda a concentrarse en lo que realmente importa y a resolver las tareas más urgentes.

2. Crea rutinas

Crear rutinas específicas para momentos de distracción puede ayudar a diferenciar entre la realidad física y los pensamientos dispersos, lo que facilita concentrarse en lo que está sucediendo en el entorno real. Gestos simples como golpear la mesa, darse una palmada o realizar un pequeño ritual pueden entrenarse como señales para indicar que es hora de enfocarse y concentrarse.

3. Haz pausas para permitirte un poco de dispersión mental

Incluso las personas con una gran capacidad de concentración tienen sus límites. No hay necesidad de sentirse mal si necesitan tomarse un momento para dejar que su mente divague y se relaje. De hecho, hacerlo puede ser beneficioso, ya que les permitirá volver a concentrarse con mayor claridad después.

4. Reduce los estímulos distractores

Cuando alguien se encuentre en un momento que requiera concentración, debería asegurarse de eliminar cualquier distracción de su entorno. Debería evitar las redes sociales, los ruidos ambientales y cualquier otra tarea que pueda desviar su atención lejos de su objetivo principal.

5. Duerme bien

La calidad del sueño tiene un impacto significativo en la capacidad de las personas para filtrar la información. Durante el sueño, el cerebro procesa y almacena la información relevante mientras elimina lo que no es necesario. Esto significa que una buena noche de sueño puede ayudar a reducir la distracción al despejar la mente de datos innecesarios.

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