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Las cinco claves de Marian Rojas para «protegernos de las personas tóxicas»

Todos tenemos cerca alguna persona, cuyo comportamiento, presencia o forma de relacionarse nos altera y nos quita la paz

Las cinco claves de Marian Rojas para «protegernos de las personas tóxicas»

Marian Rojas Estapé

Marian Rojas, médico psiquiatra de gran prestigio en nuestro país, ha estudiado en profundidad a las personas «vitamina» y a las personas tóxicas.

Según la experta, convivimos con individuos inestables, celosos, paranoicos, inmaduros y neuróticos. Son personas que tienen la capacidad de perturbarnos profundamente, a veces en cuestión de segundos.

En ocasiones, permitimos que estas personas tóxicas entren en nuestro círculo más íntimo. Se instalan en nuestras vidas para juzgar y evaluar constantemente nuestras acciones y palabras. Se convierten en observadores con derecho a opinar sobre todos nuestros actos, lo que dificulta establecer vínculos sanos con ellos.

Rojas asegura que son hábiles manipuladores y pueden detectar con gran precisión los puntos débiles de sus víctimas. Poseen una astucia mental excepcional. Debemos recordar que, por definición, las personas tóxicas asfixian constantemente a aquellos a quienes eligen para tal fin.

Cómo identificar a una persona tóxica según Enrique Rojas

Lo difícil de esta situación es que, estas personas son muy díficiles de identificar y a veces nos autoconvencemos de que no alteran nuestro equilibrio interior y persistimos en mantener relaciones tóxicas por miedo a la soledad, soportando situaciones que no deberíamos. De ahí que sea de vital importancia saber reconocer a estas personas y poder actuar para protegernos de ellas.

Estas son algunas de las claves para identificar a una persona de este tipo:

  • Las personas tóxicas hacen juicios de valor negativos. Tienden a enjuiciar de forma rápida, inmediata, sobre la marcha y con gran rotundidad. En ocasiones, con agresiones o malos tratos verbales y no verbales.
  • Manifiestan una clara inclinación al drama. Describen hechos, personas y relaciones de forma virulenta. Todo tiene unos ribetes terribles y todo es como sin salida, repleto de malos presagios.
  • Suelen tener un ego muy grande. Hablan de ellos constantemente. Es un relato grandilocuente de uno mismo para sorprender al otro. Con frecuencia, esto suele pasar desapercibido.
  • Presentan tendencia al victimismo. Sienten que no tienen la culpa de sus problemas o reveses e interpretan que son otros los responsables de lo negativo que les sucede.

Claves para gestionar a una persona tóxica

Rojas insiste en impedir que estas personas invadan nuestro mundo interno y que socaven nuestra capacidad para tomar decisiones. Se requiere un esfuerzo constante para evitar ser dominados por su toxicidad. Para protegernos de estas personas, la psiquiatra ha compartido estas claves:

  1. Mantén discreción con esas personas, ya que en cualquier momento pueden usar la información en tu contra o para causarte daño. Las personas que te quieren celebrarán tus éxitos y te brindarán apoyo en momentos difíciles.
  2. Ignora las opiniones de las personas tóxicas para liberarte de sus palabras y comportamientos. No les des demasiada importancia y aprende a relativizar sus acciones. Tú tienes el poder de decidir si les permites influenciarte. Desarrolla una barrera psicológica que te proteja de sus comentarios y críticas. Pregúntate si realmente quieres que esa persona tenga un papel significativo en tu vida.
  3. Siguiendo las palabras del Dalai Lama, deja ir a las personas que solo traen quejas, problemas, miedo y críticas hacia otros. Intenta alejarte de esas personas tóxicas, ya sea gradualmente o de manera directa. Reconoce que algunas personas mejoran nuestras vidas al partir, y no todas las relaciones son beneficiosas.
  4. Si no puedes evitar estar cerca de estas personas tóxicas, aprende a convivir con ellas. Analiza qué aspectos de tu relación con esa persona te causan malestar. Determina si la toxicidad es generalizada o si solo te afecta a ti. Intenta comprender la raíz de su comportamiento tóxico y sé tu propio terapeuta al explorar tus emociones. Comprender la situación de la persona tóxica y practicar el perdón puede ser beneficioso para tu bienestar emocional.
  5. Rodéate de «personas vitamina» que tienen un efecto positivo en tu mente y cuerpo. Estas personas son capaces de alegrarte el corazón en poco tiempo y enriquecer tu equilibrio interior. Es importante tener cerca a individuos con intenciones sanas que promuevan tu crecimiento personal.

Marian Rojas dice: Cuando consigas que las personas tóxicas no te hagan vulnerable habrás ganado la batalla y conseguirás la paz interior que deseas».

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