La plantilla de Vodafone España opta por prorrogar un año más su convenio colectivo
Los trabajadores esperan negociar el nuevo convenio para 2025 con Zegona, el nuevo dueño de la operadora
La plantilla de Vodafone España se ha decantado por mantener un año más las condiciones del II Convenio colectivo del grupo en vigor desde enero de 2021, según ha podido confirmar THE OBJECTIVE. De esta manera, tanto la dirección como los sindicatos de la operadora de telecomunicaciones han decidido no impugnar el convenio -con lo que hubiese dado comienzo a la negación de un nuevo acuerdo- y buscarán seguir con el mismo marco laboral de los últimos tres años durante todo 2024.
Este diario había informado de que la idea inicial de los sindicatos era poder cerrar un nuevo convenio colectivo para tres años y así poder blindarse ante los eventuales recortes de Zegona, el nuevo dueño de Vodafone España. No obstante, las consultas realizadas a sus afiliados arrojaron un abrumador porcentaje -superior al 90%- a favor de prorrogar un año más el actual marco laboral. La razón, indican fuentes de los trabajadores, es el temor de que un nuevo convenio les recorte más derechos.
La plantilla actual de Vodafone es de 3.900 personas aunque se ha reducido de manera importante en las dos últimas décadas. Al comenzar el milenio tenía por lo menos 10.000 empleados y tras sucesivos procesos de recortes de plantilla (en 2002, 2008, 2013, 2015, 2019 y 2021) ha perdido un 60% de su fuerza laboral.
Resultados de Vodafone
El problema es que la situación actual de Vodafone en España no es la óptima. Los últimos resultados comunicados indican que la operadora perdió 383 millones de euros en el año fiscal 2022-2023 que terminó en marzo, datos que se suman a las pérdidas de 463 millones el curso 2021-2022 y los 432 millones del año 2020-2021.
En total, 1.278 millones de pérdidas en los tres años de vigencia del actual convenio que no dan pie a muchas mejoras en este acuerdo, al contrario invitan a pensar de que los ajustes pueden ser importantes. De hecho, las cifras del primer semestre del actual curso tampoco auguran subidas: una caída del 11,5% en su beneficio operativo (EbitdaAl) hasta los 394 millones y del 1,8% en sis ingresos hasta los 1.965 millones
Este diario también advirtió de que el objetivo de la representación de los trabajadores era que la plantilla tuviese las mejores condiciones posibles de cara a los recortes que Zegona pondrá en marcha cuando tome el control de la operadora. El fondo ya advirtió en el documento de su reciente ampliación de capital que realizaría recortes «selectivos» y que el principal problema de Vodafone en el último lustro eran sus excesivos costes laborales y la rigidez de una plantilla fuertemente sindicalizada.
Nuevo convenio colectivo
También han indicado que sus planes pasan por el cierre de los puntos físicos de venta con «bajo rendimiento» y el impulso de los canales digitales para la relación con los usuarios, un movimiento que también implicaría recortes de personal. Del mismo modo, se ha publicado su interés en vender su red de fibra óptica lo que inevitablemente llevará a la reducción de plantilla. Si bien no se han puesto sobre la mesa el número probable de despidos que se realizarían, Zegona ha situado como ejemplo a MásMóvil, que con la mitad de trabajadores (1.900) ha logrado ser mucho más eficiente que Vodafone.
En este escenario, la plantilla coincidió mayoritariamente en que la mejor opción ante el nuevo escenario es mantener las actuales condiciones que garantizan unas salidas en mejores condiciones que las que se hubiesen podido producir con un nuevo y mermado convenio colectivo. Respecto de plazos, Zegona indicó en la presentación de su proyecto que esperaba tomar el control de Vodafone antes de que finalizara el primer trimestre de 2024 aunque otras fuentes creen que no se producirá antes del primer semestre.
En cualquiera de los dos escenarios, Zegona entrará en la compañía con un marco laboral estable y con un convenio que estará vigente al menos hasta diciembre de 2024. A partir de ahí, la idea de los sindicatos es sentarse a negociar con los nuevos dueños el III Convenio colectivo del grupo Vodafone y en lo posible intentar unirlo a unas eventuales negociaciones para recortar plantilla. En esta línea, existe la esperanza de que para esas fechas comiencen a mejorar los indicadores comerciales de la operadora por lo que tendrían mejores armas para negociar sus nuevas condiciones.