“Hay, pues, anteriores a la fecha del siniestro, hechos que habrían permitido a la Administración ponderar el especial riesgo concurrente en el transporte de tropas en que se produjo el accidente. Dicho con otras palabras, pudieron ser advertidas circunstancias que habrían llamado a la adopción por los órganos competentes de medidas que pudieran haber despejado el riesgo que se corría”, concluye el dictamen, que obra ya en manos de la ministra de Defensa, Cospedal, y que será quien tenga la última palabra al respecto.
En mayo de 2013, 62 militares regresaban a España desde Afganistán cuando el avión Yakolev se estrelló en una zona montañosa de Turquía. El Gobierno presidido por José María Aznar, a través de su ministro de Defensa, Federico Trillo, achacó el siniestro a un error humano y a las malas condiciones climatológicas. Los familiares de los fallecidos se negaron a aceptar esa versión y llevaron el caso a los tribunales. Además, la rapidez con la que se repatriaron los cuerpos provocó errores en 30 de las identificaciones. Por ese error, la Audiencia Nacional condenó en mayo de 2009 a tres altos mandos del ejército a penas de cárcel por un delito de falsedad en documentos oficial. Ninguno cumplió condena porque, unos de ellos, el general médico Vicente Navarro, falleció poco después, y los otros dos comandantes fueron indultados en 2012 por el Gobierno del PP.
La Sala de lo Penal de la Audiencia Nacional confirmó en 2012 el archivo de la causa por considerar que no había delito de imprudencia con resultado de muerte por la contratación del avión de los seis altos mandos militares encausados, aunque en el auto no se excluía la posibilidad de “otra responsabilidad de naturaleza diversa”. A esta otra responsabilidad es a la que se refiere ahora el Consejo de Estado, en cuanto a que el accidente podría haberse evitado si Defensa no se hubiera desentendido de su obligación de garantizar la seguridad de los militares. La Asociación de Familiares del Yak 42, a través de su portavoz Curra Ripollés, ha destacado la importancia que tiene el dictamen y el hecho de que se haya aprobado por unanimidad, y ha exigido el cese de Trillo. “Mintió al Congreso, mintió a las familias y no puede ejercer un cargo como el de embajador porque es un puesto que representa a España con honor y el señor Trillo no lo tiene”, ha declarado Ripollés en declaraciones a la Sexta. El entonces ministro de Defensa aseguró en el Congreso que “según todos los datos técnicos” el Yakolev “era un buen avión”, y achacó el accidente a “un error humano» y al mal tiempo. Sí admitió errores en la identificación por los que, aseguró, había pedido perdón a las familias. Pero eso fue todo. El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, ante la noticia del dictamen se ha limitado a comentar que “eso ya está sustanciado judicialmente y además pasó hace muchísimos años”, unas manifestaciones que para Ripollés no son de recibo ya que “tenemos derecho a la verdad y a la justicia”.