¿Tienes insomnio? Toma estos alimentos durante la cena
La mayoría de los adultos necesita por lo menos siete horas de sueño cada noche para poder afrontar el día siguiente
El cuerpo humano está diseñado de forma impecable, con un mecanismo de autorreparación asombroso que lo protege. Uno de estos mecanismos, aparentemente trivial, es el sueño.
Durante este período de descanso, el cuerpo humano lleva a cabo una serie de reparaciones esenciales para su bienestar. Y es que si no se prioriza el descanso adecuado, se pueden desencadenar riesgos que, aunque no sean evidentes de inmediato, a largo plazo afectan a las hormonas, metabolismo, memoria, almacenamiento de energía e incluso al estado de ánimo.
Cuida lo que comes antes de dormir
No es ningún secreto que dormir y descansar adecuadamente trae consigo una serie de beneficios. Pero tanto la falta como el exceso de sueño pueden ser perjudiciales.
Cuando alguien no descansa lo suficiente, suele experimentar cansancio, mal humor, irritabilidad o distracción al día siguiente, además de afectar negativamente su sistema inmunológico y nervioso.
Es crucial descansar correctamente, pero también lo es cuidar lo que se come antes de dormir. Estudios científicos demuestran que la alimentación antes de acostarse puede afectar la calidad del sueño y la salud en general.
Cuando el cuerpo no descansa lo suficiente o lo hace de manera inadecuada, se produce un desequilibrio hormonal que no solo afecta el apetito, sino también la sensación de saciedad. Esto puede aumentar el riesgo de sobrepeso y obesidad.
Los problemas de insomnio y otros trastornos del sueño afectan a una gran parte de la población, más de lo que muchos imaginan, y esta tendencia va en aumento. Y es que dormir bien y tener un descanso de calidad es esencial tanto desde el punto de vista psicológico como fisiológico.
¿Qué alimentos ayudan a un buen descanso?
Cuando se busca mejorar la calidad del sueño, la alimentación juega un papel crucial. El cuerpo necesita ciertos nutrientes que actúan como neurotransmisores para favorecer un descanso óptimo.
Por lo tanto, es importante evitar alimentos como azúcares refinados, grasas saturadas y productos altamente procesados, y en su lugar, aumentar el consumo de alimentos ricos en nutrientes esenciales y triptófano.
- Lácteos: conocidos por su aporte nutricional, son ricos en triptófano, especialmente el queso, y contienen zinc y magnesio, que mejoran su absorción y la del triptófano, favoreciendo un sueño más completo.
- Plátano o banana: además de ser una buena fuente de fibra y carbohidratos, el plátano ofrece una sensación de saciedad rápida. Su contenido destacado de magnesio y potasio ayuda a relajar los músculos, y su aporte de triptófano promueve tanto el sueño como la regulación de los ciclos.
- Almendras: son una excelente fuente de proteínas, grasas saludables, calcio, vitamina B y melatonina. Consumir pequeñas cantidades proporciona saciedad rápidamente y contribuye a una dieta saludable.
- Cereales integrales: el trigo, el maíz, la avena y el arroz son fuentes naturales de triptófano y carbohidratos que facilitan su absorción. También contienen una variedad de vitaminas del grupo B que mantienen el equilibrio en el sistema nervioso, promoviendo el bienestar y la calma.
- Dátiles: aunque dulces, los dátiles son beneficiosos para el sistema nervioso debido a su contenido mineral, vitaminas del grupo B y aminoácidos, que promueven la relajación y ayudan a combatir el estrés y la ansiedad.
- Semillas de sésamo y chía: además de ser ricas en proteínas, grasas saludables, magnesio y calcio, tienen un alto contenido de triptófano, lo que las hace ideales para promover un sueño reparador.
- Cerezas: reconocidas por su uso en repostería, las cerezas son especialmente ricas en melatonina, sobre todo la variedad Montmorency. Incluso cuando están secas, mantienen sus beneficios si no contienen azúcar añadido, aunque es mejor consumirlas frescas.
- Pescados: el omega 3 presente en los pescados ayuda a reducir la ansiedad y los trastornos del sueño. Se recomienda aumentar su consumo, especialmente de pescados azules como la trucha, el salmón, el atún, las sardinas y las anchoas.
- Infusiones: son excelentes para inducir el sueño. Algunas opciones recomendadas incluyen valeriana, tila, flor de azahar, melisa o pasiflora, ya que tienen propiedades relajantes y ayudan a conciliar el sueño durante toda la noche.
- Piña: esta fruta, junto con las cerezas, es conocida por sus beneficios para el sueño. Y es que es rica en minerales, vitaminas y compuestos que estimulan la producción de serotonina y ayudan a calmar la ansiedad, lo que la convierte en una opción recomendada para la noche.