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Cupra catapulta las ventas de Seat y ya suponen casi la mitad de sus matriculaciones

Las cifras de ventas de la unidad de negocio española de Volkswagen parecen estar saliendo mejor de lo esperado

Cupra catapulta las ventas de Seat y ya suponen casi la mitad de sus matriculaciones

Cupra Formentor.

No cabe duda: Cupra ha sido un gran acierto. La firma comenzó como una suerte de spin-off con series limitadas de sus coches más deportivos, pero desde que se instauró como marca con una personalidad propia, no hace más que dar alegrías a la firma de Martorell.

Seat no está en la electrificación, en la hibridación de forma limitada, y, sin embargo, vende —casi— más coches que nunca. Este 2023 ha sido su segundo año récord de ventas y el milagro se lo debe a Cupra, su marca filial de alma deportiva, que está creciendo como muy pocas firmas y ninguna europea.

Una firma, dos marcas

Con un catálogo limitado a dos modelos propios, Formentor y Born, otros en camino como el Tavascan y el DarkRebel, se está mostrando como una de las sorpresas del grupo Volkswagen. También venden como Cupra tres interpretaciones de modelos de Seat: el León, León Sportourer —no esconden la tilde— y el Ateca, pero siguen siendo modelos de su marca matriz con retoques estéticos, un nivel superior de acabados, y motorizaciones más ambiciosas. Pocos dudan de que Cupra acabe superando a Seat este mismo 2024, y será debido a la llegada de nuevos modelos como el Terramar y el ‘sustituto’ eléctrico del Ibiza, el prometedor Cupra Raval.

Wayne Griffiths, el británico responsable de ambas marcas, tuvo que salir a la palestra cuando surgió el rumor de la posible liquidación de la marca en un futuro cercano. Aclaró que no estaba en el horizonte, al menos mientras fuera rentable y los planes saliesen. Las cifras de ventas de la unidad de negocio española del Grupo Volkswagen parecen estar saliendo mejor incluso de lo esperado, así que los fantasmas pueden quedar alejados, al menos de momento.

Lo que no es incierto es que Cupra está fagocitando espacio en concesionarios, concentra los intereses de la firma, y está a punto de adelantar a su hermana mayor, con cifras de ventas que comienzan a ser parejas. Si en 2023 Seat colocó 288.400 vehículos, un 24,0 % más que en 2022, Cupra le pisa los talones 230.700 unidades vendidas en 2023, y un espectacular aumento del 50,9 % con respecto al año anterior. El crecimiento global de las dos marcas ha sido del 35 %, con un total combinado de 519.200 coches vendidos, unas cifras de expansión que ya las quisiera para sí muchas marcas de mayor predicamento. Si había dudas, deberían haberse disipado de manera radical.

Mejora el escenario

La estabilización en la cadena de suministro ha otorgado a la firma la posibilidad de ofrecer vehículos de forma casi instantánea a los que pasen por sus concesionarios. Tienen existencias de la mayoría de sus modelos para entrega inmediata y solo hay que esperar, y poco más de un mes, puede que dos, en modelos concretos y con especificaciones muy personalizadas. Gracias a la fluidez ganada con los proveedores, la planta de Martorell, con el Audi A1 como invitado, incrementó su producción un 20,9 % hasta los 443.443 vehículos. Entre su producción se encuentra la de los Cupra, que se han convertido en el ojito derecho de la directiva.

Cupra raya el espacio de lo prémium. Se aleja en calidades de la Seat originaria, iguala cuando no supera a Volkswagen en acabados, y aunque con alma revolucionaria y deportiva se acerca a Audi. Con coches de superior calidad, hay una factura mayor, lo que conduce a mayores beneficios. Con cada Cupra vendido, se gana más que con cada Seat, y si las estrellas del catálogo de esta firma son los Arona e Ibiza, el que mayores ingresos está procurando es un Cupra con nombre de origen balear.

Si el éxito tiene un apellido, Cupra, posee un nombre, Formentor. Uno de cada cuatro coches que salen de sus factorías es uno de estos modelos, y puede decirse que el Seat más vendido no es un Seat, sino un Cupra. Le avalan sus 120.100 unidades colocadas, por los 89.000 Aronas matriculados en el mismo periodo, el más popular de Seat.

Elevando el nivel

El crossover con denominación mediterránea está siendo una fuente de alegrías para la marca. Con cuerpo de SUV y alma de deportivo, se ha hecho un hueco entre los coches familiares de ciertas prestaciones, espaciosos, con algo más de altura que las berlinas, pero no demasiada como la de los todocaminos al uso. Sus acabados son excelentes, y su personalidad contestataria y original gusta a todos por sus combinaciones de colores, con acabados mate y aspecto dinámico general.

Sus precios arrancan en los 33.800 euros, con motorizaciones de gasolina, diesel e híbridas enchufables. Las hay desde los 150 CV y hasta los espectaculares 390 de la serie VZ5. Equipa una amplia gama de opciones, con propulsores de gasolina, diésel e híbridos-enchufables, y los hay con tracción a dos ruedas y cuatro ruedas.

El Formentor, buque insignia de la nueva marca, deriva en los fundamentos muy básicos del León y el Ateca, utiliza la plataforma MQB Evo y se fabrica íntegramente en Martorell. Su precio es competitivo, su calidad muy apreciada, y pelea de tú a tú contra duros rivales como el Audi Q3 Sportback, el BMW X4, el Mercedes GLC y el Alfa Romeo Stelvio. Todos ellos son coches con el pedigrí de marcas señeras ante los que no se achica; su estampa deportiva parece más moderna que la de muchos de sus contrincantes, y llama la atención entre todos ellos.

Aspecto impactante

Sus modelos más populares destacan por la citada pintura mate, que hace contraste con las llantas opcionales bronce de 18 pulgadas, con opción de 19. La mayoría de los que salen por las puertas de sus concesionarios lo hacen con la excelente caja de cambios DSG del grupo, presente en casi toda la gama. Su versión enchufable permite unos 55 kilómetros de marcha en modo eléctrico, según ciclo WLTP.

El interior no desentona con el exterior. Rezuma originalidad, y deja atrás a cualquier diseño de la marca filial. Los Formentores disponen de un cuadro de mandos digital con pantalla panorámica para el conductor, y otra para el sistema de infoentretenimiento. Esta segunda, situada en el centro del salpicadero, es de 10 pulgadas de serie, y crece hasta las 12,3 en las versiones altas de la gama. Sus asientos delanteros son de diseño deportivo, tipo baquet en los acabados superiores, junto a un nuevo volante. Sigue la moda de prescindir de botonería, y concede el mando de muchas de sus funciones a la pantalla principal.

Las plazas traseras dejan un buen espacio con respecto a las delanteras, y a pesar de ser relativamente bajo, el techo no molesta a los pasajeros más altos que se sienten detrás. Su maletero es mutante, y cambia según versiones. Por defecto tiene 450 litros, encoge hasta los 420 en las versiones de tracción total, y se queda en 345 si te compras un híbrido. Es el precio a pagar por la etiqueta más ecológica más ambiciosa de la gama.

El mejor de todos los Seat

Podría decirse que el Formentor es el mejor Seat de la historia y la prueba del algodón es que ha sido un enorme éxito en el siempre complicado mercado alemán. Cupra ha colocado allí 72.300 unidades en 2023, y la mayoría han sido de este modelo. Curiosamente, esas cifras de venta casi cuadruplican a las españolas (19.600), triplican las británicas, (25.700), y han disfrutado de una buena aceptación en destinos como Francia, Polonia, Austria, Turquía, México y Australia.

Los que más contentos parecen estar son los agentes de La Benemérita, la Guardia Civil española, que al igual que muchas patrullas Zeta de la Policía Nacional, también conducen Cupras.

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