El verano más tórrido de Albert Rivera: besa a una rubia que no es Aysha Daraaui
El expolítico catalán ha sido victo con una joven desconocida de la que solo se conoce su nombre: Carla
Albert Rivera. | Alejandra Svriz
Albert Rivera es, sin duda, uno de los nombres propios de la crónica rosa este verano. Tras confirmarse en junio su separación de Malú tras cuatro años de amor y una hija en común, el expolítico no pierde el tiempo y está exprimiendo al máximo su primer verano de soltero.
Después de semanas especulándose con una posible relación con la actriz Aysha Daraaui tras sus imágenes en actitud cariñosa y cómplice en Ibiza durante una escapada con amigos a principios de agosto –un romance que tanto ella como él negaron rotundamente a pesar de su innegable complicidad– ahora es la revista Semana quien descubre la identidad de la verdadera novia del abogado.
Una chica llamada Carla con la que Albert ha sido pillado en la isla pitiusa derrochando besos, abrazos, caricias y miradas de amor que no dejan lugar a dudas y que evidencian que el ex de Malú vuelve a estar ilusionado, pero no de quien pensábamos -Aysa Daraaui- sino de esta misteriosa joven de la que apenas conocemos ningún dato por el momento y cuyo apellido todavía no ha trascendido públicamente.
Rubia, atractiva y con un físico envidiable, la que Semana asegura que es la nueva novia de Rivera se dedica al mundo de la moda; es diseñadora e influencer y de ahí su estilo y elegancia en su cita con el expolítico en un barco llamado ‘Felicidad’ en aguas de Ibiza, en la que lució un escueto bikini verde caqui, una camisa oversize de lino blanca, un sombrero de fieltro gris y un maxi capazo de rafia con detalles de piel.
Y, aunque Albert no se ha pronunciado públicamente sobre esta incipiente relación, las instantáneas no dejan lugar a dudas y el despliegue de amor y pasión con Carla hablan por sí mismas. ¿Está de nuevo enamorado?
A quién le importa lo que yo haga
Tras la publicación de las fotos de Albert Rivera junto a Aysha Daraaui el expolítico quiso salir al paso de las fotos que publicó la revista Semana contestando con una canción: A quien le importa.
El entorno cercano al catalán había deslizado que este estaría muy enfadado por la publicación de esas imágenes. Hay que recordar que Rivera nunca se ha sentido cómodo siendo objeto de noticia por su vida privada. No lo hizo con Beatriz Tajuelo, mucho menos con Malú ni tampoco ahora durante su nueva soltería.
Lejos de mostrar un cabreo mayúsculo, Albert Rivera ha tirado de humor en redes sociales. El que fuera número 1 de la formación naranja ha publicado un par de stories mientras se encontraba disfrutando de una jornada marítima en barco.
Y lo ha hecho parafraseando uno de los temas más conocidos de Fangoria, ergo Alaska. El español escribe: «A quién le importa lo que yo haga» y a continuación continúa con la letra de la mítica canción: «Nunca cambiaré». A buen entendedor, pocas palabras bastan.
Desmentidos a medias
Hay que recordar que antes de la aparición de las explícitas instantáneas, ambos protagonistas del asunto se habían manifestado para desmentir los rumores.
La más frontal fue Aysha Daraaui, quien, mediante su representante, Santiago Fernández, mandó un contundente comunicado a un programa de televisión de Telecinco: «Lamento comunicarle que no es necesario entrevistar a mi cliente puesto que no existe ninguna relación. Es una noticia basada en especulaciones e imágenes malintencionadas sacadas fuera de contexto».
Otro que también negó la mayor fue Aldo Comas, marido de Macarena Gómez, y que compartió jornadas de playa en Ibiza con ellos: «Es que no hay nada, solo somos amigos y salen fotos de ellos y es una tontería porque estábamos todos juntos», decía.
Por su parte, Albert Rivera se mostraba muy cabreado, hace unos días, a su llegada al aeropuerto Adolfo Suárez–Madrid Barajas, Albert Rivera mostró su cara más seria al ser abordado por los compañeros de los medios de comunicación que buscaban su primera reacción a la noticia: «¿Pero qué pregunta es esa? Yo es que nunca hablo con la prensa del corazón, ni de mi vida. Nunca lo he hecho ni lo voy a hacer».
