Una china recuperará la nariz y boca con varias cirugías que utilizarán impresión 3D
Jin Qi, una mujer china de 27 años que ha vivido toda la vida sin nariz ni boca los recuperará gracias a una serie de cirugías que utilizarán tecnología de impresión 3D para reconstruir su rostro, según ha publicado el diario independiente South China Morning Post. Qi perdió la nariz y el labio superior en su primer año de vida por una infección causada por su propio sistema autoinmune que atacó a sus tejidos y órganos.
Jin Qi, una mujer china de 27 años que ha vivido toda la vida sin nariz ni boca los recuperará gracias a una serie de cirugías que utilizarán tecnología de impresión 3D para reconstruir su rostro, según ha publicado el diario independiente South China Morning Post. Qi perdió la nariz y el labio superior en su primer año de vida por una infección causada por su propio sistema autoinmune que atacó a sus tejidos y órganos.
Este pasado lunes la mujer se ha sometido a la primera cirugía de reconstrucción facial en un hospital de Shanghái, un tratamiento en el que también se cultivarán tejidos para la nariz y el labio superior en el pecho. La primera cirugía duró más de diez horas, implicando una remodelación inicial de sus rasgos faciales perdidos. El tratamiento competo requerirá al menos seis meses y otras tres intervenciones quirúrgicas más.
La operación pudo llevarse a cabo gracias al apoyo económico que la joven logró a través de internet, ya que su familia no tenía acceso a recursos médicos adecuados en el pueblo donde nació, en la provincia de Hubei. Qi publicó su historia en redes sociales y los usuarios contribuyeron para financiar algunos de los costes médicos. “Si la cirugía tiene éxito, tendré más seguridad en mí misma cuando esté delante de otras personas”, ha asegurado antes de entrar en el quirófano.
A pesar del positivismo de Qi, los médicos le han explicado que el proceso de reconstrucción facial es difícil ya que no sólo deben hacer crecer nuevos tejidos para su rostro, sino que también deben asegurarse de que los nuevos órganos faciales no afecten a la capacidad de comer, hablar y respirar. En China ya se han realizado 42 trasplantes faciales exitosos de este tipo.