THE OBJECTIVE
Pilar Marcos

Pedro, el «audaz», aplaudido por Hamás

«Sánchez ha desmentido a quienes le acusan de pactar con amigos y herederos del terrorismo sólo por un puñado de votos. No necesitaba ni un solo voto de Hamás y ahí le tienen»

Opinión
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Pedro, el «audaz», aplaudido por Hamás

El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez. | Ilustración: Alejandra Svriz

Estamos de enhorabuena. No todos los días una organización terrorista, considerada y vigilada como tal por la Unión Europea y por Estados Unidos, y que acaba de acreditar la vileza de sus métodos con la sanguinaria matanza de 1.400 personas en la noche del 7 de octubre y el secuestro de centenares de personas como rehenes, felicita al primer ministro de un país europeo por su «postura clara y audaz» en su favor. La condecoración que este sábado, justo siete semanas después de la masacre del 7-O, concedieron los terroristas de Hamás al presidente del Gobierno de España, es un extraordinario hito en la trayectoria política de Pedro Sánchez. Sin necesitar ni un voto de Hamás para su investidura, se ha alineado con una de las organizaciones más crueles, sanguinarias, misóginas, antifeministas y LGTBI-fóbicas que siembran el terror yihadista allí donde tienen oportunidad. Sánchez ha desmentido así a quienes le acusan de pactar con amigos y herederos del terrorismo sólo por un puñado de votos. No necesitaba ni un solo voto de Hamás (que se sepa), y ahí le tienen. 

La declaración de Hamás a favor del presidente Sánchez merece ser tallada en mármol a las puertas de Ferraz: «Apreciamos la postura clara y audaz […] del español Pedro Sánchez, que condenó las matanzas indiscriminadas del Estado ocupante contra civiles en la Franja [de Gaza], y apuntó la posibilidad de que su país reconozca unilateralmente el Estado palestino si la Unión Europea no da este paso». 

Hamás, en su declaración del 25 de noviembre, no inventa nada que no hubiera dicho antes el presidente Sánchez el viernes 24. Así, desde Rafah, la ciudad fronteriza de Egipto con la Franja de Gaza donde los mediadores (entre los que él nunca pudo estar) habían acordado el canje de rehenes judíos por presos palestinos, el líder socialista español proclamó: «La matanza indiscriminada de civiles inocentes, incluidos miles de niños y niñas, es completamente inaceptable». ¿Se refería a la matanza indiscriminada –y extremadamente cruel- que protagonizó Hamás en la noche del 7 de octubre para provocar un conflicto armado con Israel? Evidentemente, no. Ahí fueron menos de 2.000 judíos, y están contados y acreditados, no los «miles de niños y niñas» palestinos que cuenta Hamás utilizándolos como escudos humanos en los ataques aéreos de Israel.

De los que se olvida la declaración del premier español fueron víctimas inocentes de un ataque terrorista múltiple. De los que se duele son víctimas inocentes de la respuesta militar de un país democrático contra una potente organización terrorista que tiene como objetivo declarado su total aniquilación. Al menos, nuestro audaz presidente podría haber intentado un poco de compasión (eso que ahora llaman empatía): unos y otros son víctimas inocentes. Lo hizo al día siguiente, ya de mitin en Madrid, y tras el escándalo por los elogios recibidos de los terroristas de Hamás.  

Tampoco Hamás inventa el anuncio por el que felicita a Sánchez. Fue él quien dijo: «Ha llegado el momento para que la comunidad internacional, y especialmente la UE, tomen una decisión sobre el reconocimiento del Estado palestino. Valdría la pena, sería importante que muchos miembros de la UE lo hiciéramos Juntos. Pero si eso no ocurre, por supuesto, España tomará sus propias decisiones». Pedro, el audaz unilateral, anuncia al mundo que España reconocerá al Estado Palestino, aunque no lo haga la Unión Europea. Y lo hace en un viaje que realizaba en calidad de presidente de turno de la Unión Europea.

«Pedro, el audaz unilateral, anuncia al mundo que España reconocerá al Estado Palestino, aunque no lo haga la Unión Europea»

Llevan razón los terroristas de Hamás, nuestro Pedro es un hombre «audaz». Pero, ¿por qué lo hace? Por principios, no, pues los suyos son cambiantes. Así como sus ministros de Más Madrid (antes Podemos) son fervientemente anti-judíos (como Franco, por cierto) y pro-palestinos, él ha podido ser una cosa y su contraria, según soplara el viento de sus cambios de opinión, que no mentiras. Por europeísmo, tampoco. Todas las conjeturas sobre su presunta voluntad de dejar pronto el Gobierno para ocupar un vistoso puesto internacional en la UE o incluso en la OTAN quedan más que comprometidas con su declaración de Rafah. Hasta la ministra Calviño tendrá más difícil conjugar sus ambiciones internacionales con su destacada pertenencia a un audaz Gobierno aplaudido por Hamás. 

Entonces, ¿por qué? Pues, al menos, por tres motivos. El más evidente es el de reforzar su liderazgo dentro de la coalición: Pedro Sánchez no es sólo el líder socialista, es el líder indiscutible de la coalición del Frankenstein reforzado (Bildu, ERC y Junts, incluidos). A ver quién es el guapo que puede exhibir, en su cuaderno de bitácora, una felicitación de Hamás como la que a él le adorna. Qué más hubiera querido la exministra Belarra, musa televisiva de Al Jazeera en sus últimas semanas en el cargo. El segundo, y no menos importante, es el de elevar la apuesta: ¿Creíais que la amnistía era la meta? ¡Incautos! La amnistía es sólo la línea de salida hacia la nueva normalidad. Además, el sistema de tapar un escándalo con otro aún mayor es una conocida táctica de trileros. Hasta tiene nombre: el ‘método pasticho’, que es como en Venezuela llaman a su lasaña. Y el tercer motivo, ¡quién sabe!, podría ser para exhibirse en el mundo anti-occidental como «audaz» líder alternativo, con un pie en las democracias europeas y otro en el pasticho que vaya haciendo falta para destruirlas… Aquí hemos empezado por la destrucción propia, por aquello de dar ejemplo.

Podría, incluso, haber un cuarto motivo. Ahora que celebramos el 20º aniversario del Pacto del Tinell, tan importante para entender cómo hemos llegado hasta aquí, nuestro Pedro, el audaz, podría haber decidido emular con Hamás a Carod-Rovira en Perpiñán. ¿Se acuerdan? Aquel inefable pacto de ERC con ETA para que la banda amnistiara a Cataluña en sus objetivos terroristas. Será por audacia.

En sus propias palabras: Let me be clear, Mr. Audaz, pobre España, en manos de este rapaz. 

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