Sánchez llamará a Feijóo antes de Navidad con una oferta concreta para desbloquear el CGPJ

El Gobierno ha decidido reactivar la ofensiva contra el PP sobre el bloqueo del Consejo General del Poder Judicial (CGPJ), con la intención de minar su credibilidad y armarse de razones y argumentos a escala europea ante su nuevo intento de desbloquear la renovación del órgano de gobierno de los jueces. Según adelantan fuentes gubernamentales a THE OBJECTIVE, el presidente del Ejecutivo, Pedro Sánchez, llamará a Alberto Núñez Feijóo para poner fin a los cinco años de bloqueo del CGPJ y lo hará antes de las vacaciones navideñas. Moncloa no concreta si será la semana que viene o la siguiente, pero sí confirma que la intención del presidente Sánchez es procurar nuevamente un acuerdo que ponga fin a la interinidad y a la «parálisis de la administración de Justicia». 

Sin embargo, las fuentes gubernamentales consultadas manifiestan pocas esperanzas de que el intento tenga éxito, a juzgar por las exigencias que han anticipado los populares sobre el cambio en el sistema de elección de los portavoces. Desde el núcleo duro del presidente creen que «al PP ya no le interesa renovar», sino «alimentar la guerra judicial» que, a juicio del Gobierno, ya ha empezado a dar sus primeros pasos, desde la declaración «preventiva» del CGPJ sobre la amnistía, el informe del mismo órgano contra la idoneidad del nombramiento del fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz, o la decisión del Tribunal Supremo del anular el nombramiento de la presidenta del Consejo de Estado, Magdalena Valerio. 

Un pacto «imposible»

Entienden en Moncloa que los populares ya no son sólo «rehenes de Vox», por sus pactos de gobernabilidad en varias comunidades autónomas, sino también del poder judicial, con el que pretenden colaborar para estirar su oposición a la ley de amnistía hasta la aprobación de la norma en la primavera de 2024. Por ello, la llamada del presidente del Gobierno en los próximos días al líder de la oposición no persigue tanto un pacto «imposible», a juicio de fuentes del Ejecutivo, como preparar el terreno ante las instituciones comunitarias que están examinando a España por la amnistía, mientras muestran su preocupación la falta de renovación de los órganos judiciales.

Así se explica que, en el mismo día, el presidente Sánchez haya acusado al PP de ejecutar el «paradigma del lawfare» -como ha llamado él mismo al bloqueo del CGPJ-, y su ministro de Presidencia y Justicia, Félix Bolaños, haya elevado la denuncia contra el PP a los organismos comunitarios, aprovechando su asistencia al Consejo de Justicia y Asuntos de Interior en Bruselas.

Si hace una semana Sánchez se refirió a la operación Kitchen y la utilización de la policía patriótica por parte del PP, este lunes el jefe del Ejecutivo aseguró en la Cadena SER que «no hay caso más paradigmático de lawfare que el bloqueo del Consejo», porque implica un «sentimiento patrimonialista de la democracia, el poder y las instituciones». 

El riesgo de un «colapso total»

Sánchez confirmó que llamará a Feijóo. No confirmó cuándo, y evidenció su poco optimismo sobre la conversación: «Vox dice que soy un dictador y Feijóo que soy un enfermo mental».  Una acusación al mismo PP a quien tendió la mano para lograr la renovación y a quien exigió «que cumpla con la Constitución y, por tanto, que podamos desbloquearlo cuando antes, porque no sólo afecta al correcto funcionamiento de la justicia sino que se deriva en consecuencias para la ciudadanía». La coincidencia del mensaje del jefe del Ejecutivo con el de su ministro de Justicia y presidencia, Félix Bolaños, evidenció la claridad del argumentario gubernamental. 

A su llegada a Bruselas, Bolaños solemnizó que «hoy es un día triste para la democracia española porque hoy se consuman cinco años de bloqueo del PP del gobierno de los jueces y, por tanto, de cinco años de incumplimiento de la ley y de la Constitución. Es una auténtica pena, un comportamiento muy grave que está empezando a dañar a la propia justicia y a los ciudadanos que quieren tutela judicial efectiva. Espero que comprendan en el PP que no puede mantenerse ni un día más en el bloqueo porque cuatro años más en esta situación serían el colapso total de la Justicia».

Bolaños hizo también un llamamiento al PP para «que cumplan la ley, que se pactó cuando el PP estaba en el Gobierno, en el 2001, y el PSOE en la oposición, y es un modelo equilibrado, que ha funcionado bien y ha dado estabilidad a la justicia. Que cumplan la Constitución y que lo hagan por el buen nombre de España, porque esto sí que es una preocupación de la Comisión Europea».

La preocupación comunitaria será lo que utilice el Gobierno como palanca para intentar persuadir al PP y el cebo será una oferta concreta y global de pactos que, según fuentes de Moncloa, no se circunscribirá sólo a la renovación del órgano de gobierno de los jueces, sino también a otras instituciones y órganos constitucionales que deben renovarse en el 2024 y que podrían servir de acicate para sentarse a negociar.