La UCO busca qué otras 'apps' de mensajería tenía instaladas García Ortiz en su móvil
El juez autoriza a la Guardia Civil a realizar «un volcado completo» del teléfono del fiscal general

El fiscal general del Estado, Álvaro García Ortiz. | Ilustración de Alejandra Svriz
El juez manda desnudar el móvil de Álvaro García Ortiz. El magistrado Ángel Hurtado ha autorizado a la Unidad Central Operativa (UCO) de la Guardia Civil a realizar un «volcado completo» del teléfono del fiscal general. Los investigadores habían solicitado esa diligencia para conocer «el número exacto» de aplicaciones de mensajería instantánea que tenía instaladas en su terminal. El jefe del Ministerio Público está siendo investigado por el Tribunal Supremo por un delito de revelación de secretos tras la denuncia que interpuso el novio de la presidenta madrileña, Isabel Díaz Ayuso.
Los investigadores reconocen que las actuaciones de la causa contra García Ortiz se basan en los mensajes de WhatsApp, aunque no descartan que puedan existir conversaciones con sus subordinados en otros programas similares. Existen al menos una decena, entre ellos Telegram, Signal, Line, Discord, Skype, Facebook Messenger, Google Chat y Shazlle Chat. El juez también ha pedido a WhatsApp y Google que aporten datos de las cuentas de usuario del fiscal general, tal y como reclamaba la UCO.
En un oficio al que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, la Guardia Civil sostiene que la recuperación de conversaciones o mensajes borrados vinculados con aplicaciones de mensajería depende de muchos factores, pero no descarta que se puedan rescatar las conversaciones que mantuvo García Ortiz entre el 8 y el 14 de marzo del año pasado, los días clave en los que habría tenido lugar la filtración de datos reservados del novio de Ayuso, Alberto González Amador.
Los mensajes de García Ortiz
Entre las variables para recuperar los mensajes eliminados, los investigadores destacan el funcionamiento de la app, el tipo de almacenamiento utilizado, el tiempo transcurrido desde que fueron borrados y la existencia de copias de respaldo de la información. El volcado del móvil de García Ortiz tras el registro de su despacho el pasado 30 de octubre reveló que su teléfono albergaba «cero mensajes» durante los días de la filtración.
Otro informe de la Guardia Civil demostró que los mensajes se borraron, ya que el análisis de otros terminales constata que existieron conversaciones con diferentes subordinados, entre ellos la fiscal jefe de Madrid, Pilar Rodríguez, también imputada. Sin embargo, ninguno de esos informes citaba el uso de otras apps de mensajería instantánea, aunque muchas mejoran el cifrado de datos de WhatsApp, lo que haría más difícil el acceso a las conversaciones mantenidas.
«Para poder determinar la viabilidad de esta actuación es imprescindible, en primer lugar, el acceso íntegro al conjunto de datos contenidos en el dispositivo. Por ello, una vez se haya accedido a esos datos, es necesario localizar el número exacto de aplicaciones de mensajería instantánea instaladas en el dispositivo», precisa el oficio de la UCO. E insiste: «Tras este paso, se deberá valorar individualmente las opciones de recuperado disponibles para cada una de las mencionadas aplicaciones».
La Guardia Civil solicitó el pasado 17 de enero al juez una serie de diligencias para recuperar la información del teléfono de García Ortiz. Entre otras cosas, los investigadores reclamaron al magistrado un «volcado de información completo» del móvil del fiscal general para analizar «las aplicaciones de mensajería instantánea y conseguir información que permita acceso a ellas». Hurtado admite en su último auto que accede a la reclamación al considerar que la solicitud es «razonable» y «coherente».
WhatsApp y Google
El magistrado también ha pedido a WhatsApp y Google que intenten recuperar la información a través de sendas comisiones rogatorias. Para ello solicita los mensajes recibidos y/o enviados por los usuarios, indicando los detalles básicos asociados a estas comunicaciones (emisor, receptor, día, hora, etc.). También reclama las copias de seguridad de los chats y/o archivos multimedia disponibles y asociados a los usuarios y el log o registro de las comunicaciones realizadas por los usuarios, incluyendo la fecha, hora, origen, destino y tipo de comunicación.
Hurtado también autoriza a la UCO a conectarse a las bases de datos donde pudieran encontrarse archivos susceptibles de contener la información de interés al objeto de proceder a su descarga, procesado y posterior análisis. Sobre este extremo, incide en que se tenga en cuenta que, de lo actuado hasta ahora, la información que se ha obtenido de interés para la causa ha sido extraída de la aplicación de mensajería instantánea WhatsApp.
El análisis de la UCO señaló que en el móvil de García Ortiz había «cero mensajes», aunque otro informe previo del terminal de la fiscal jefe de Madrid ya había arrojado conversaciones entre ellos. Una de las hipótesis es que se habrían borrado. La Fiscalía le excusó afirmando que los datos se eliminan de forma periódica.
Desde el Ministerio Público se apuntó a que se hace un borrado cíclico del contenido de los dispositivos por razones de seguridad, tal y como aconsejarían las normas internas. Sin embargo, los fiscales que declararon la semana pasada como testigos en el Supremo, Almudena Lastra y Julián Salto, negaron al juez que existiera un protocolo para eliminar mensajes.
Contacto con Telefónica
En un informe posterior, la UCO determinó que García Ortiz habría cambiado de teléfono el pasado 23 de octubre. Esa fecha coincide con la semana en la que el Supremo imputó al fiscal general por una presunta revelación de secretos. No fue el único movimiento que realizó el fiscal general, que recientemente también ha cambiado el número de su móvil personal. Como avanzó este diario, el jefe del Ministerio Público envió hace días un mensaje tipo a sus contactos para informarles.
Las acciones de García Ortiz no se detuvieron ahí. Tal y como pudo comprobar THE OBJECTIVE, el fiscal general contactó con la cúpula de Telefónica para lograr el listado de sus llamadas antes que el juez. Hurtado solicitó el pasado 7 de enero a la UCO que intentara recuperar el contenido de los mensajes eliminados. El magistrado también solicitó a las operadoras Movistar y Vodafone «los datos de tráfico de llamadas emitidas y recibidas» en dos teléfonos diferentes.