«Pinker ha sido purgado por poner esa libertad individual por encima del colectivo y atreverse a expresar su opinión, y no será el último»
«La fiesta del progreso necesita sus rehenes, y son siempre los mismos»
«España está llena de trayectorias como la mía, sin épica pero de un progreso incuestionable que solo fue posible por la democracia»
Le propongo al lector cierto ejercicio ascético que al final le proporcionará gustoso beneficio: lea este verano solo las obras que Hans-Georg Gadamer leería
A Pablo Casado le asombraría saber que en España es tradición matar a los cerdos en casa, y que sólo desde principios de los noventa del siglo pasado rige una normativa sanitaria y de bienestar animal (aturdimiento previo) que no pocos aldeanos incumplen orgullosamente. Sacrifici, el documental de Santi Trullenque coprotagonizado por el cocinero Nandu Jubany y un amoroso ejemplar de puerco catalán, no se puede abrochar precisamente con la certificación pacmática de que la bestezuela no-sufrió-daño-alguno.
Uno de los debates más recurrentes tras la crisis es el que gira alrededor de si los jóvenes viven o vivirán peor que sus padres. Es una pregunta muy amplia y difícil de contestar, entre otras cosas porque no hay un modelo exclusivo de vida buena. Pero si sobreentendemos que juzgamos en función de variables económicas relacionadas con la calidad del empleo, los salarios o la certidumbre vital y laboral, parece fácil concluir que vivimos y viviremos peor que nuestros padres.
La posguerra europea se caracterizó por la guerra fría con la URSS y el descubrimiento de la necesidad inevitable del consenso para fortalecer la paz y la democracia. La Europa de la segunda mitad del siglo XX se construyó precisamente sobre esta búsqueda del consenso que dirimía conflictos de clase, entre naciones y también identitarios.
Las aventuras de François Hollande en África, rememorando el pasado colonialista francés le puede costar muy caro al líder de los socialistas galos.
Hollande ha sido el siguiente. Se veía venir. Cada vez que ha intentado desarrollar alguna medida progresista se le han tirado a la yugular, llegando incluso a airear su vida privada.