Condenado a más de 27 años de cárcel el descuartizador de Majadahonda

La Audiencia Nacional de Madrid ha condenado este lunes a 27 años, tres meses y un día de prisión a Bruno Hernández Vega, conocido como el descuartizador de Majadahonda, por matar a su tía y a su inquilina y deshacerse de sus cuerpos en una picadora industrial.

El Tribunal Superior de Justicia de Madrid ha informado de que se ha descartado que la esquizofrenia que padece el acusado anule sus facultades mentales, informa EFE.

Por cada uno de los crímenes, ha sido condenado a 12 años de cárcel y, además, se le han impuesto 21 meses y un día de cárcel por estafa, seis meses por un delito de falsedad documental y un año de cárcel por tenencia ilícita de armas, informa Europa Press.

La sentencia considera probado que el acusado obtuvo beneficio económico de la muerte de su tía, pues tras asesinarla construyó una empresa de construcción y emitió recibos desde la cuenta de la fallecida por importe de más de 33.000 euros. Además, simuló la firma de su tía en un contrato de arrendamiento en el que la fallecida le cedía el uso de su vivienda durante 15 años por 18.000 euros, un importe que nunca pagó, aunque sí alquiló la casa a otras personas.

La Fiscalía Provincial de Madrid había pedido más de 26 años de cárcel para el descuartizador de Majadahonda. Además, pidió que el acusado cumpliera su condena en un centro especializado para someterle a un “tratamiento adecuado a la patología psíquica que padece durante 30 años”.

El primer asesinato, el de su tía, tuvo lugar “en una fecha no determinada pero posterior al 13 de abril de 2010”. El segundo, el de la mujer argentina que vivía alquilada en una habitación de la vivienda, ocurrió el 1 de abril de 2015. Tras su asesinato, Bruno Hernández Vega trató de hacer creer a su entorno que seguía con vida, hasta que uno de los hermanos de la víctima denunció su desaparición.