ERC y Junts logran la abstención de la CUP para sacar adelante su órdago a Sánchez

Los grupos parlamentarios de ERC y Junts en el Parlament de Cataluña han conseguido que la CUP acepte abstenerse en el texto que condiciona la investidura de Pedro Sánchez a que este último acepte avances en la celebración de un referéndum de autodeterminación, por lo que el órdago al líder del PSOE saldrá adelante en la Cámara autonómica a dos días del sexto aniversario de la consulta ilegal del 1-O.

Esta mañana han desfilado los portavoces parlamentarios por el estrado para posicionarse sobre una propuesta de resolución impulsada por el independentismo para el Debate de Política General (DPG), en el que se insta al Parlament a dar su aval a que las formaciones catalanas no apoyen la investidura del candidato socialista si «no se compromete a trabajar para hacer efectivas las condiciones» para celebrar la ansiada consulta.

Desde la CUP, Dolors Sabater ha acusado a los socialistas de preferir una España «antes facha que rota«, después de que el líder del PSC, Salvador Illa, ha reiterado su ‘no’ al referéndum aunque sea a costa de repetir las elecciones, y ha advertido que la defensa de la amnistía debe ser inseparable de la autodeterminación.

Junts pide a Aragonès que salga de «la casilla de salida»

Mònica Sales (Junts) ha acusado al Govern de falta de credibilidad para liderar la hoja de ruta hacia la independencia, aunque ha celebrado que ERC y Junts haya pactado una resolución para condicionar la investidura de Sánchez al referéndum: «Muévase de la casilla de salida, presidente. Hay mucho que hacer«, le ha dicho a Aragonès.

«Amnistía y referéndum. Estas son las condiciones de la negociación», ha insistido Marta Vilalta (ERC), que ha celebrado que el acuerdo entre independentistas sobre la amnistía y ha negado, como han sostenido los socialistas, que votar sobre la independencia suponga dividir a la sociedad catalana.

La portavoz de los socialistas, Alícia Romero, ha apelado a la prudencia y la discreción en las negociaciones: «Sabemos que es más difícil callar que hablar. Si queremos llegar a buen puerto, hay que ser prudentes, hay que ser discretos«, y también ha defendido el diálogo para garantizar la convivencia, tras lo que ha añadido que la gesticulación no puede ganar.

Las portavoces de PSC y Junts también han alertado de la debilidad que, a su juicio, tiene el Govern de ERC, al que han reprochado falta de iniciativa, en la línea de las tres propuestas de resolución que han presentado para constatar la minoría parlamentaria que sostiene el Ejecutivo catalán, de 33 diputados.

Ante ello, Vilalta ha criticado que los grupos señalen al Govern por estar en minoría y no lo hagan, en cambio, con el gobierno del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, y ha sostenido que no hay ninguna mayoría alternativa en el Parlament al Govern de ERC que no pase por «impedir, frenar o no construir«.

Por su parte, Vox, Cs y PP han cargado este viernes contra una eventual amnistía. El portavoz de Vox en el Parlament, Joan Garriga, ha criticado que se plantee «con la ayuda inestimable del PSC una amnistía para golpistas» y ha advertido de que la unidad de España no se negocia, se defiende, según él.

Desde Ciudadanos, Anna Grau ha acusado de mentir a «los que usan en vano la palabra amnistía» y se reservan, en sus palabras, la opción de mercadear la impunidad por una investidura. Por su parte, Lorena Roldán (PP) ha cargado contra los socialistas por, según ella, «blanquear todo lo ocurrido en 2017» y ha lamentado que habrá amnistía y lo que sea que quiera el expresidente de la Generalitat Carles Puigdemont, en sus palabras.

El portavoz de los comuns, David Cid, ha sostenido que la clave es no dar «una segunda oportunidad a un gobierno de PP y Vox» y ha apelado a la responsabilidad y a la altura de miras. «El catalán en el Congreso es una victoria. El catalán en Europa será una victoria. Y la amnistía será una victoria. Así de claro se lo digo», ha concluido Cid.