Conejos cómicos
En la Vida de Gnaeus Robertulus Gravesa, ese ligerísimo divertimento en el que Robert Graves recrea su vida como la de un poeta romano, aparece un epigrama sobre un artista que descubre el éxito con una fórmula para pintar “conejos cómicos”. En esta vida es importante descubrir tu fórmula para pintar conejos cómicos. ¡Que me lo digan a mí, que me he hecho columnista a los cuarenta después de intentar que me tomasen en serio! A cierta edad, preferiblemente antes, conviene darse cuenta de que no se puede crear cada día de la nada y que, si miras bien en las carpetas del ordenador del curro, seguramente alguien ha hecho ese trabajo antes y se puede cortar y pegar.