Mónica García (Más Madrid): «El 4M nos jugamos cómo se reconstruye Madrid después de 25 años de Gobierno del PP»

El adelanto electoral decretado por la presidenta madrileña Isabel Díaz Ayuso pilló desprevenido a la inmensa mayoría de los partidos, incluido Más Madrid, al que también sorprendió el ofrecimiento de Pablo Iglesias de llevar una candidatura conjunta (Más Madrid – Unidas Podemos) el 4 de mayo. Por ello, las formaciones ya han comenzado su pugna por el poder de la capital española que mucho tiene que decir en las futuras elecciones nacionales. Hablamos con la candidata de Más Madrid a la Comunidad de Madrid, Mónica García, que tiene muy claro que el objetivo prioritario es sacar a la derecha del Gobierno de la Comunidad, «que la señora Ayuso haga las maletas lo antes posible de la Puerta del Sol».

Mónica García es anestesista en el Hospital 12 de octubre, algo que ha compatibilizado con su vida política. Dice que tiene claro que si pudiera anestesiar a un político «sería a Ayuso y a Monasterio». Hablamos con la médica y política de Más Madrid de su formación «netamente madrileña» y de su proyecto para la Comunidad, de la gestión de la pandemia, de cómo Más Madrid piensa llegar al poder y de muchos otros temas.

¿Era necesario este adelanto de elecciones?

La frase de la señora Ayuso fue: «Si yo convocara elecciones me llamarían insensata y peligrosa». Creo que eso lo responde. La señora Ayuso decía que unas elecciones en plena pandemia eran temerarias y esto básicamente es lo que nos ha traído a Madrid.

¿Qué está en juego ahora en Madrid?

Está en juego el futuro y el porvenir de nuestra comunidad, si seguimos cavando el hoyo de la desigualdad, si seguimos cavando el hoyo de la corrupción, si seguimos cavando hacia abajo, o si somos capaces de aprovechar los fondos europeos y la reconstrucción que está habiendo a nivel mundial para que Madrid salga adelante.

Ayuso habla de comunismo o libertad, Vox de Globalismo o Patria, ¿y Más Madrid?

Más Madrid habla de pasado o futuro, básicamente. En el sentido de que nos estamos jugando ahora mismo cómo se reconstruye la Comunidad de Madrid después de 25 años de Gobierno del Partido Popular, después de una forma de hacer política que creo que es nefasta tanto para la comunidad como para la propia política, y después de una pandemia que nos ha dejado una crisis que tenemos que solventar.

¿Qué es para ti la patria?

La patria son sus servicios públicos, es cuidar a tus compatriotas, es no poner siempre a confrontar unos con otros y la patria es la empatía, ser empático con el que no es como tú pero vive en tu misma realidad, que es una frontera o puede ser una realidad social. La patria tiene que ver con eso, todo lo demás son banderas que ocultan una realidad. 

¿Qué decir sobre la oferta de Pablo Iglesias de una candidatura conjunta? 

Desde el principio hemos pensado que separados sumamos más, que tenemos que ampliar nuestro bloque, que cada uno tiene que hacer un buen trabajo en el margen del electorado que tiene y que eso anima más al electorado progresista para elegir entre las diferentes fuerzas, porque lo que tenemos delante es a la señora Monasterio en la Consejería de Educación, eso es lo que tenemos delante y eso es lo que no estamos jugando.

¿No hubiera sido más útil juntar las fuerzas de la izquierda para ganar?

Yo creo que tal y como está conformado la Comunidad de Madrid, que todos los votos suman siempre y cuando se pase del 5%, una vez superado ese dilema, sumamos más yendo por separado que yendo juntos.

¿Llegado el caso tras los resultados, pactaríais con Unidas Podemos?, ¿y con el PSOE?

Hemos dicho claramente que nos entendemos ahora con Unidas Podemos, nos hemos entendido durante toda la legislatura, igual que con el PSOE, y por supuesto nos vamos a entender a partir del 5 de mayo. En la Asamblea de Madrid creo que hemos demostrado que podemos trabajar juntos con un objetivo común que es que la señora Ayuso haga las maletas lo antes posible de la Puerta del Sol.

¿Qué puede ofrecer Mónica García a Madrid que no pueda ofrecer otro candidato como Pablo iglesias?

Puedo ofrecer una formación política qué es netamente madrileña que no tiene ningún cromo que intercambiar en ningún otro sitio, que nos debemos por y para los madrileños que estábamos aquí en el minuto uno y vamos a quedarnos hasta el final. Puedo ofrecer una organización política que está volcada y centrada en las políticas feministas, por supuesto de justicia social, de políticas públicas, de servicios públicos y qué es una fuerza netamente verde, que la vertebra de arriba abajo, no solamente en las políticas que tienen que ver con lo meramente medioambiental, sino con la política de lo cotidiano, el poner encima de la mesa el derecho al tiempo, las 32 horas, la salud mental los problemas cotidianos que al final son para los que teóricamente estamos aquí.

Hablas de políticas feministas. Rocío Monasterio nos comentaba que: «Las mujeres, como colectivo, no necesitan protección»

Está bien el negacionismo, el terraplanismo igualitario, que es lo que nos ofrece la señora Monasterio, pero las estadísticas y los datos indican lo contrario. No es que necesitemos protección es que tenemos que superar de alguna manera las inequidades y las desigualdades, que son manifiestas, no hay una sola estadística que se escape a esas desigualdades. Lo cual entiendo que a la señora Monasterio le parezca que no existe, como que la Tierra es plana, pero sobre lo que tienes que gobernar es sobre la realidad.

Otro de los discursos fuertes de Rocío Monasterio, de Vox, es la lucha contra la inmigración ilegal.

La señora Monasterio ha demostrado que no tiene compasión, y su política con los menas, y lo digo abiertamente, es miserable. Yo como madre, que tengo tres chavales, me imagino solo el titular «menores no acompañados», y no se me ocurre un colectivo más vulnerable, un colectivo al que haya que proteger más, y me parece que escudarse en el racismo, en la xenofobia, para culpar a unos menores que están sin su familia, de verdad, a mí no me cabe en la cabeza que esta señora que es madre, y supongo que se podrá imaginar lo que puede sentir un chaval de 14 años alejado, que ha tenido que irse de su país por la miseria o por lo que sea y que está aquí, en el cual encima hay una señora que le acusa de  violar, de los disturbios, etcétera, es miserable.

¿Cómo valoras la gestión del Gobierno de Ayuso? 

El Gobierno de Ayuso me parece un gobierno nefasto. Creo que la pandemia ha puesto sobre la mesa no solamente que no les interesa gobernar, sino que no les interesa protegernos. Prefieren que tengamos una comunidad en la que vamos sin cinturón de seguridad, solo les interesa mantenerse en el poder, mantener sus redes clientelares, utilizar sus plataformas de mercadeo de negocios y han demostrado que ni siquiera en plena pandemia han puesto el foco en Madrid, sino que han tenido todo el rato el foco en intentar confrontar con el Gobierno central. Lo último que necesitábamos, el ruido que no necesitábamos en este momento, es el que nos ha proporcionado la señora Ayuso. 

¿Cómo se le ganan las elecciones a Ayuso, a Monasterio, a la derecha?

La señora Ayuso ahora se presenta por dos candidaturas, por la de Vox y la del Partido Popular, entonces juega con ventaja en ese aspecto. Se le gana hablando de los problemas reales de la gente, no diciendo las tonterías que dice del comunismo, y hablando de lo que está sufriendo la gente. Diciéndole a la gente que nos estamos jugando el porvenir y que los fondos europeos que van a venir ahora a la Comunidad de Madrid vuelvan a ser gastados en ciudades de la Justicia, en Zendales, en chanchullos que acaban tarde o temprano en un sumario de corrupción, o en hacer una estructura social que realmente reflote de esta crisis, que esta crisis va a ser profunda en lo económico y en lo social, y creo que se le gana poniendo sobre la mesa el sentido común, que creo que después de una pandemia es lo que más necesitamos: sentido común, sentido de la responsabilidad y empatía.

 

En Madrid hemos tenido muchos años de Gobierno del PP y las encuestas vuelven a darles la victoria.

Aquí en Madrid hemos llegado hasta tener gobiernos corruptos, así que imagínate cómo será. Insisto, es que ella ahora mismo es la portavoz candidata de dos partidos políticos, entonces tiene esa ventaja y luego tiene otra ventaja, y es que ha utilizado, como ya le ha recordado la Junta Electoral, utiliza las instituciones siempre como un plató de televisión, un plató de marketing, y con esa ventaja que ha hecho que el Partido Popular no se presenta ni a unas solas elecciones sin hacer trampas en el siglo XXI, pues bueno es más Goliat que antes, pero el partido no ha hecho más que empezar.

Dices que el Partido Popular «ha hecho trampas», ¿a qué te refieres?

Hacer trampas significa que durante todo el siglo XXI no se han presentado a unas solas elecciones de manera limpia, demostrado con los sumarios, y en estas elecciones ha utilizado las instituciones como plataforma electoral, ya le ha dado un toque la Junta Electoral, ha utilizado el Hospital Zendal como plató de televisión, ha utilizado el sufrimiento de los madrileños y madrileñas como espejo de su victimismo y bueno, pues hace una utilización torticera de las necesidades que tenemos en Madrid.

¿Qué tres grandes cambios necesita Madrid?

Ahora que vamos a una legislatura que es corta, porque en el año 2023 volvemos a tener otras elecciones, el primer cambio, lo tengo que decir como médica y porque lo siento así porque creo que ha sido una de las brechas que tenemos más profundas en la comunidad. Creo que tenemos que hacer un cambio en el concepto que tenemos de nuestro sistema sanitario y tenemos que afrontar en lo que estamos ahora, qué es la pandemia, que es un problema que todavía no está resuelto, estamos en medio de un proceso de vacunación y creo que nuestro sistema sanitario está roto y colapsado, creo que es fundamental.

Necesitamos, obviamente, cambiar el modelo productivo. Ya hemos visto que en momentos de crisis a lo único que somos capaces de apelar es al turismo de borrachera, no tenemos mucho más valor añadido que darle a nuestros hijos, a nuestro futuro, qué le ofrecemos a nuestros chavales, a nuestros jóvenes, y creo que eso se tiene traducir en muchas políticas: desde la vivienda, a la cual los jóvenes no tienen acceso; la Protección Social, tenemos que tener una sociedad que lleve cinturón de seguridad y airbag, a ser posible, para que cuando tengamos estas crisis no las afrontemos con las manos atadas a la espalda.

Luego tenemos una oportunidad de proyectarnos en el futuro, bien en fondos europeos, y con esos fondos europeos el resto del mundo está pensando como reconstruirnos desde lo social, incluso Estados Unidos está hablando de cómo reinvertir en el modelo educativo, cómo hacer nuestras raíces sociales más profundas.

¿Qué sería lo primero que harías si ganas las elecciones?

Lo primero que hay que hacer es resolver la pandemia en la que estamos, la crisis económica, y por supuesto, poner los pilares para resolver la crisis social y hacer un modelo productivo que nos resuelva a medio y largo plazo la crisis económica.

¿Cuál es tu barrio y qué es lo mejor de vivir en él?

El Retiro. Es un barrio muy barrio, aunque sea céntrico hay mucha vida de barrio. Mis abuelos también vivían ahí y yo hago casi vida de pueblo dentro del mismo barrio. Es un barrio que tiene mucha vida, mucho comercio de barrio, es más, yo compro la comida y la ropa en mi barrio y me gusta hacer alarde de mis tiendas de mi barrio, y luego tiene esa maravilla que es El Retiro, que cuando he tenido perro ha sido maravilloso, cuando voy a correr es maravilloso y con los niños es un lujo.

Si pudieras anestesiar a un político, ¿a quién sería? 

(Ríe). Uyy, esa herramienta no me hagas usarla, pero si pudiera anestesiar a un político, claramente sería a la señora Ayuso y a la señora Monasterio.

Sobre el Hospital Zendal. ¿Va a desaparecer como hospital si ganáis?

Supongo que la máquina de los bulos ha empezado a funcionar, la máquina de triturar papel empezará a funcionar cuando la señora Ayuso vea que pierde las elecciones, pero la de los bulos lleva ya tiempo funcionando, y uno de los bulos que ha dicho es que nosotros cerraríamos el Zendal. En el Zendal nos hemos dejado un sobrecoste absolutamente innecesario pero nosotros no hacemos política de tierra quemada, vamos a aprovechar el Zendal, estamos estudiando varios proyectos en función de las necesidades de los madrileños, no de las necesidades de Más Madrid y o la mías, las de Mónica García. Las necesidades de los madrileños ahora mismo en materia de sanidad y en materia de salud tienen que ver con camas de media y larga estancia, tienen que ver con investigación y tienen que ver con tener de alguna manera instituciones que se preocupen por las cosas que han sido privatizadas: véase laboratorios, o sea todos aquellos servicios adyacentes a la sanidad que creo que el Zendal les puede dar, con inversión, porque ahora mismo no sirve ni para un hospital de media y larga estancia ni para un lugar de investigación, pero obviamente ni lo vamos a cerrar ni vamos a desaprovechar un solo de los euros que ya ha desaprovechado la señora Ayuso.

Hay quien no confía en las vacunas, quien no ve una salida próxima a la pandemia, ¿qué mensaje lanzarías a la población?

Es verdad que esta pandemia ha sido difícil de de pronosticar, no de prever, podíamos haber previsto muchas cosas. La primera igual nos viene un poco de sopetón, pero el resto podíamos haber hecho política de prevención. En cuanto a pronosticar cuándo acaba, no sabemos, es verdad que ha habido mucha mucha incertidumbre, ahora bien, creo que tenemos que empezar a poner las bases de a donde queremos llegar, hemos estado inmersos en una pandemia y creo que tenemos que sentar un poco las bases del futuro.

Madrid es una de las comunidades más afectadas por el coronavirus, ¿cómo valoras la gestión de la pandemia?

Hemos puesto una luz de neón en la Comunidad de Madrid, porque la Comunidad de Madrid no era el primer destino turístico, sino que era el tercero o el cuarto, creo recordar, y hemos puesto luces de neón de ‘aquí uno se puede saltar las normas mundiales’, no solo las normas de la Comunidad de Madrid, aquí somos Covid Free, aquí confundimos lo que es la libertad con la capacidad de alguien de hacer una fiesta ilegal en un piso ilegal y la capacidad de alguien de ponerse muchas copas en plena pandemia y claro, hay gente en Europa que ha recibido ese flyer, esa publicidad, y ha dicho: «¿Dónde me puedo ir a saltarme las normas que tengo en mi propio país?», pues a Madrid.

¿Hay futuro en Madrid para los jóvenes?

No hay ni futuro ni porvenir, es muy complicado. Toda una generación que se está dejando el 80% de su sueldo en la vivienda, toda una generación que tiene que compartir piso, estamos hablando de gente de 30 a 35 años que sus perspectivas de formar una familia, de tener un trabajo en condiciones, de no sufrir la precariedad, de no creer que la precariedad es una plaga bíblica, de tener acceso a una vivienda, de tener acceso a una escuela infantil, todo eso ha desaparecido.

Yo tengo 47 y noto como de mi generación a la siguiente, más o menos, se ha descolgado un vagón del tren claramente. Las condiciones en las que yo empecé a trabajar no tienen nada que ver con las condiciones con las que empiezan a trabajar por ejemplo mis compañeros MIR (Médico Interno Residente). Obviamente estamos retrocediendo hacia una sociedad más inestable y sin futuro básicamente.

¿Y qué piensa hacer Más Madrid para solucionar el abono joven, JOBO o los alquileres para jóvenes?

Todo esto que me comentas son pequeños parches que se ponen. El abono joven está bien pero yo creo que es el problema número 100 para los jóvenes, porque como no tienen liquidez, tienen unos sueldos precarios y tienen una vivienda por las nubes, pues obviamente cualquier ayudita para su abono transporte pues es un granito de arena. Les estamos ofreciendo una sociedad que está rota, una sociedad que es desigual, una sociedad qué es el sálvese quien pueda, y en el sálvese quien pueda normalmente siempre sobrevive el sálvese quien tenga, al final tu ascensor social depende de lo que tengan tus padres, no depende en absoluto de lo que tú vayas a estudiar, de tu esfuerzo, de tu mérito.

El otro día estuvimos en Orcasitas y nos decían que allí el absentismo escolar es del doble, que el número de universitarios del sur pues a lo mejor es una tercera parte de los del barrio de Salamanca, ¿eso es que están menos capacitados? No, eso es que les estamos ofreciendo desigualdad y estamos dilapidando el talento de toda nuestra comunidad en aras de unas políticas que un día se las lleva un fondo buitre, otro día se las lleva un altillo de un partido político y otro día se las lleva una gran multinacional que no cotiza aquí en Madrid, ni en España. Eso es lo que estamos ofreciendo.

Obviamente, en cada una de las políticas tiene que haber un apartado que vaya dirigido a los jóvenes y al futuro. Todo tiene que recoger a los jóvenes.

En vivienda pondríamos límites en los precios del alquiler, potenciaríamos la vivienda social, entre otras cosas recuperando las 3.000 viviendas esas que la señora Ayuso no quiere recuperar de los  fondos buitre, haríamos que los barrios no estuvieran pensados para los pisos turísticos, sino para los pisos realmente de las familias o de los jóvenes, que también tienen derecho a vivir en el centro.

En la educación creo que tenemos una segregación, somos la comunidad que más segrega, entonces desde el momento en el que tú estás segregado en el punto de partida de la sociedad, que es la educación, pues de ahí ya no hay manera de unir esa esa brecha. Tenemos un 16% o un 19%, depende las organizaciones, de exclusión social directamente. Esa desigualdad nos ha llevado a que hay un 16% de la población, niños incluidos, familias incluidas, que están fuera de nuestra sociedad y que no van a participar de la sociedad, que ya les hemos dado por perdidos.

Fondos europeos que hagan inversiones en innovación, empresas de innovación, nosotros hemos estado en el parque tecnológico, ahí hay futuro, hay talento, hay conocimiento y todo eso está infravalorado en esta Comunidad. Hagamos otro modelo productivo que no solamente sea el de poner copas a los franceses, hagamos otro modelo productivo dedicado a la transición ecológica, a la rehabilitación de edificios, a la economía de cuidados. Lo que más entristece de la Comunidad de Madrid es las posibilidades y el constante ancla del Partido Popular, ahora de la mano de Vox, el constante ancla que nos ponen a los años 80.

¿Tienes miedo a Ayuso y a Monasterio?

Tengo miedo a que gobiernen, claramente. Tengo miedo a que la señora Monasterio tenga la Consejería de Educación y le cuente a mis hijos que no existe la desigualdad, que le cuente a mis hijos que no existe el cambio climático, que le cuente a mis hijos que se le puede hacer bullying a una persona que es diferente porque es diferente, que se le puede hacer bullying a un extranjero que no se merece estar en ese colegio porque se lo estamos pagando, como nos ha demostrado.

Tengo miedo a que de aquí a 20 años hayamos perdido el tren y la oportunidad de haber reconstruido la Comunidad de Madrid después de esta crisis, como lo va a hacer el resto de Europa y seguramente muchas de las otras comunidades. Tengo miedo a seguir siendo la comunidad que menos invierte en educación, que menos invierte en sanidad, que menos invierte en políticas sociales y que ha abandonado a sus mayores a fondos buitre y a las políticas Low Cost.

Sí, claro que le tengo miedo. En estas elecciones nos lo jugamos todo, no estos dos años, sino el camino que tenemos que recorrer para que en el año 2030 estemos orgullosos de la Comunidad de Madrid.