¿Qué delitos son los más comunes en España y quién los comete?

En el año 2020 fueron condenados 221.437 adultos en España y 11.238 menores, según los datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). ¿Qué delitos cometieron? Explicamos cuáles fueron los más comunes y qué condenas fueron las que más se impusieron.

Los delitos más comunes

Los delitos más frecuentes entre los adultos fueron los relacionados con la seguridad vial, que constituyeron un 22,7% del total. A estos le siguen las lesiones y los hurtos, con un 17,1% y un 15,3%, respectivamente. En último lugar están los delitos contra los derechos y deberes familiares y las falsedades documentales.

En cuanto a los delitos cometidos por menores, los de mayor incidencia fueron las lesiones, un 30,6% del total, seguidas de los robos (19,2%) y los hurtos (9,2%).

Todas estas cifras son inferiores a las del año 2019, pero hay que tener en cuenta que «los mayores descensos en el número de personas condenadas adultas se registraron en los meses en los que la movilidad estuvo restringida por la pandemia», según explica el INE, por lo que la bajada puede no ser un reflejo de la realidad.

 

Delitos sexuales

En su informe, el INE dedica un apartado especial a los delitos sexuales, por los que las condenas fueron un 12,3% menos en 2020 que en 2019. En total, fueron 2.374 las personas condenadas por estos delitos, de los que un 97,6% fueron hombres y el 2,4%, mujeres.

Del total de estos delitos, casi la mitad, 1.070, fueron considerados abuso sexual, 560 como abuso y agresión sexual a menores de 16 años y 429 prostitución y corrupción a menores. Del total de agresiones sexuales, 38 fueron consideradas violación.

Si hablamos de delitos sexuales cometidos por menores, fueron 390 los condenados en 2020, el 98,7% hombres y el 1,3% mujeres. Del total de estos delitos, 177 fueron considerados como abuso y agresión sexual a menores de 16 años, 159 como abuso sexual y 56 como prostitución y corrupción a menores.

Quiénes son los condenados

El dato más significativo en cuanto al perfil de los condenados es la gran diferencia entre géneros, pues el 80,5% de ellos eran hombres, algo que se repite entre los menores con cifras muy similares, un 80,8% de condenados son varones.

La edad media de los adultos condenados es de 37,7 años y el grupo con más personas condenadas al analizar las tasas por 1.000 habitantes es el de 18 a 20 años, tanto en hombres como en mujeres.

En cuanto a los menores, por edad, el grupo de 17 años fue el más numeroso con el 30,7% del total de condenados, seguido del grupo de 16 años, con el 28,9%.

La mayor parte de los condenados en 2020 era de nacionalidad española (74,9% frente al 75,0% del año anterior). Entre los extranjeros, los países de América representaron el mayor porcentaje de condenados, un 33,2%. También la mayoría de los menores condenados era de nacionalidad española (79,3%).

Las penas impuestas

De todas las penas que se impusieron, el 48,1% fueron privativas de otros derechos. Es decir, penas como la inhabilitación para el empleo, que fue la más frecuente. El 32,6% fueron multas y el 19,1%, privativas de libertad, entre las que la más común fue la prisión.

En cuanto a los menores, la medida que más se impuso fue la libertad vigilada, en un 45,4% de los casos, seguida de las tareas socio-educativas y del internamiento en régimen semiabierto, que fue impuesto a un 10,5% de los condenados.