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Internacional

Bajo la dictadura de los gilipollas

Nos crean una sharía ecofriendly de género ad hoc por el cual no podemos hacer nada porque contamina, ni podemos pensar y llegar a conclusiones propias que disientan con estos grupos porque no se es moderno ni progresista

Bajo la dictadura de los gilipollas

Que el mundo está en constante evolución tecnológica, política y social es un hecho. Preguntarse dónde nos llevará esa evolución es cosa bien distinta. Frente al hundimiento cada vez mayor en Europa del concepto de Estado-Nación por el modelo de Europa de las naciones, de la integración disolvente de las culturas de Europa, del peligro de la inmigración y el modelo de estado multicultural fallido con el auge de radicalismos de toda clase, los encontronazos más que la convivencia y la partición de las ciudades de barrios como vasos comunicantes a guettos cuasicerrados nos encontramos con, por otro lado, los líderes paralelos.

En definitiva: tenemos un problema social del que se discute mucho en las redes e internet pero la base es política. ¿Por qué?, porque estamos bajo el gobierno de los gilipollas. En primer lugar estamos sufriendo el entramado de partidos que parasita y contamina, como un cáncer, la administración del estado que, bajo mi punto de vista debe ser delgado y fuerte pero sobre todo delgado, pocos políticos. 

Menos políticos = menos corrupción, crispación, menos ideas iluminadas (que iluminados tenemos muchos), menos zarandajas e ideas quijotescas. El problema de la España de hoy es que el régimen del 78, bunkerizado, no sabe dónde moverse y prefiere el anquilosamiento. Me recuerda a Dante en el infierno guiado por Virgilio sólo que en este caso Virgilio sabe menos que Dante, que va a tientas profundizando en unos círculos infernales de los que, al contrario que en el texto, no le lleva al Purgatorio sino, por desgracia, a una espiral infernal infinita. 

Pues ese Dante bien jodido en la oscuridad del entramado, sin un candil ni mano amiga y rodeado de demonios enemigos es usted. Llamar demonio a un político es un insulto para el ente demoniaco pero dejémoslo ahí…no entremos en teologías.

El demagogo antiguo del ágora iba tanteando a la población poniendo el oído en las conversaciones y reuniones y durante el discurso que daba, lleno de sofismas y mentiras iba dirigiendo su discurso. Hoy el político de turno encarga una encuesta al CIS o, como mucho, ojea twitter; no llegan a procesar más de 280 caracteres.

En todo este entramado están los lobbys, que miran por sus intereses, presionan y ofertan, la política es como la bolsa, sin embargo en este grupo de lobbys existe otro perfil. El neocaudillo. Mientras que el Lobby es una persona u organización que representa los intereses de un colectivo estructurado y lucha por sus intereses el neocaudillo es un iluminado con más vocación de señor feudal que de empresario o líder de opinión. 

Estos iluminados son los mayores violadores de la libertad y la privacidad del ser humano y siempre usan el mismo timo, porque es un timo: Problema (creado o inventado) + solución (la que ellos han diseñado según su visión del mundo) y ese modelo dictatorial debe ser impuesto sí o sí ¿por qué?: porque el neocaudillo es guapo, exitoso, millonario y un ejemplo de buen ciudadano porque se preocupa del amazonas, del cambio climático o del tigre de Bengala. Además es humilde, habla bien y es sensible, joder, un partidazo que haría las delicias de cualquier suegra.  

Para este nuevo líder descontrolado y no sometido aún a ningún control institucional que le pare los pies en sus intentos constantes por influir e imponer sus agendas usted contamina con su coche de segunda mano pero él, ella o elle no contamina con su jet privado. 

Este tipo de neocaudillo siempre tiene sus vasallos aunque hay vasallos y vasallos (siempre hubo clases y niveles). Está el que jura vasallaje tras ver un documental o caer en un grupo progre y se vincula al movimiento de forma absolutamente comprometida. 

Es el vasallo activista pesado de la red social que se tira todo el día llorando por todo, pontificando y como buen moralista, buscando gente que no está de acuerdo o no ha conocido la verdad absoluta que él descubrió gracias a Internet y, por lo tanto, se lanza a una cruzada para llevar a la luz a todo aquel extraviado fascista criminal que no sabe que el Krill está en peligro en la Antártida. Obviamente si te importa un bledo y haces tu vida como te parece, siendo libre, pensando y actuando por voluntad propia serás poco menos que un criminal insensible, un psicópata de manual para el atormentado predicador.

Luego está el líder político que se suma a la idea por conveniencia y firma el manifiesta sin pestañear, sobre todo si el panfleto es popular, y en base a eso montan grupos y coordinan fundaciones etc…en beneficio propio y de su tribu.

El político, en ese momento, pasa a querer lo que quiere el líder carismático y hace suyo el ideario mezclado con la ideología de su partido: también quiere que poco menos que no tengamos hijos porque hay que controlar la natalidad, que no viajemos, no comamos carne, nos muramos de calor en verano y de frío en invierno (aunque en invierno tenemos la solución de las mantas hasta que nos digan que contaminan). Básicamente, nos prohíben vivir y respirar porque contamina y hay que salvar a la Pachamama. 

Pero la factura de eso la paga usted, no Zuckerberg…uno de los iluminados que dice que usted contamina por hacerse un café pero su empresa Facebook y sus servidores que necesitan muchísima energía para mantenerse a una temperatura óptima de rendimiento no, o el proceso de construcción de los Tesla de Musk o, por qué no, los camiones de reparto de Bezos…o los coches de los políticos españoles que quieren ahogarle en impuestos para nada.

Impuestos que son un robo y una extorsión porque, entre otras cosas, si no pagas o vas a la cárcel o te multan pagando el quíntuple de lo que no pagaste. 

Sin embargo el problema de esto es la creación de cada vez más líderes carismáticos inflados por la prensa, que deciden que lo que ellos aplican en su vida deben imponérselo a la suya y a la mía a cualquier precio…pasando por encima de la democracia e, incluso, limpiándose el culo con nuestras libertades individuales.

Greta Thunberg es un claro ejemplo de eso. Le dice a usted que el ártico se derrite, que le hemos destrozado la infancia, que somos malísimos por comer carne y que usar vehículos es un crimen y por ello usted es el malo de la película aunque en realidad no es otra cosa que una víctima de esta heroína vociferante y de la ideología que detrás de ella están promocionando, aunque lleva hilada mucho tiempo. 

Ahora bien, Greta Thumberg jamás irá a protestar a las sedes o a las plantas petrolíferas de Aramco (la petrolera de Arabia Saudí) o las empresas de Estados Unidos que hacen Fraking usando muchísima agua que queda, además, contaminada…o a las empresas mineras chinas que dentro de su territorio destrozan bosques y contaminan sin el más mínimo control acuíferos enteros. Ellos no tienen que sacrificarse, usted sí.

Cierto político español soltó este verano una memez sobre el hecho de que el pueblo español debía de entender que se acabó el usar aire acondicionado en verano porque contamina y hay que hacer, de nuevo, sacrificios…sacrificios que ya hacemos gracias a su pésima gestión y la subida de la luz a máximos históricos.

Este verano mucha gente se ha asado de calor y no ha puesto el aire acondicionado no por estar sensibilizada por la contaminación sino porque sabían que gracias a ustedes y su maravillosa gestión si encendían el susodicho aparato a lo mejor no iban a poder pagar la próxima factura de la luz

Esto, sin embargo, no es sólo culpa de los políticos que nos gobiernan hoy y mal sino de toda la generación que desde el 78 desmontaron el país sin ofrecer nada mejor a cambio y, sobre todo, sin reformas económicas y financieras que permitan al ciudadano poder acceder a servicios de calidad a un precio razonable. 

El problema no es la luz, ni siquiera la distribución o la subasta de la energía sino el inmenso poder político heredado del régimen anterior, el régimen del denostado general Franco del cual todos y digo TODOS los políticos españoles son deudores…desde el PP hasta PODEMOS. De hecho el modelo económico y financiero de PODEMOS con la nacionalización de todo y las empresas públicas mastodónticas podría firmarlo tanto el Caudillo como José Antonio Primo de Rivera, no se distinguen tanto, por lo menos en eso.

Luego tenemos otros imbéciles. Cuidado con Bill Gates. El multimillonario activista dice que hay que bajar el número de seres humanos sí o sí…como sea, desde luego su afán por quitarse de en medio a cuanta más población mejor es un delirio casi genocida que es bien acogido. De nuevo el mismo mantra. Muchos humanos=mucha contaminación=restricciones para todos, pero su empresa Microsoft no contamina creando chips y procesadores con un gasto increíble de agua…sin contar de donde vienen muchos de los minerales necesarios para montar estos aparatos electrónicos.

El problema de esta gente es que con su verborrea y su poder logran infiltrar acólitos, convencer con su publicidad machacona, montar organizaciones poderosísimas que implican desde políticos hasta financieros y demás miembros de su grupo lobista para organizar proyectos que, al final, acabaremos sufriendo usted y yo. Y que, además, ni hemos elegido porque la Agenda 2030, siniestra hasta decir basta, ha sido cosa de esta mixtura de caudillitos y politicuchos.

En definitiva, se nos meten en el entramado de los estados, de los partidos, de la sociedad…hasta se nos meten dentro de la casa: en lo que consumimos, en lo que hacemos, en lo que comemos, nos dicen qué debemos hacer y qué no…nos crean una sharía ecofriendly de género ad hoc por el cual no podemos hacer nada porque contamina, ni podemos pensar y llegar a conclusiones propias que disientan con estos grupos porque no se es moderno ni progresista.

Con ello te crean al “nuevo hombre progresista”, un ente sin personalidad propia que sólo repite consignas y viven conforme otros le digan, sin disentir, sin cuestionarse, sin pensar. Si hay que comer cucarachas, se come; y si hay que preocuparse del Serengeti, me preocupo. Cuando ni las cucarachas ni el Serengeti sean importantes (es decir; estén de moda) a otra cosa, mariposa. 

Mientras este hombre marioneta compungido y bien adoctrinado por los machacas de este poder (los políticos) sacrifica su vida y pretende que el resto hagamos lo mismo, estos neocaudillos van y vienen en sus cochazos, jets, se pegan la vida padre en yates y paraísos, comen en los mejores restaurantes mientras usted, manchado con el pecado original de ser un ente altamente contaminante más vale que trabaje, pague impuestos y se muera pronto para contaminar lo menos posible.

¿La única manera de acabar con esto?: reducir el poder de los políticos, correa de transmisión de esta enfermedad, desmontar estos discursos prefabricados del miedo y luchar cada día contra aquellos que quieran asaltar las murallas de nuestra libertad personal e individual ya sea mediante la fuerza política, mediática o intelectual. 

Sólo un dato para reflexionar, si tan mal estamos en España, ¿cómo que el Ministerio para la Transición Ecológica declaró en su informe de Perfil Medioambiental de España 2018 que la superficie forestal española aumentó un 1,2% entre 2004 y 2018, que el 55,2% de la superficie nacional (28 millones de hectáreas) son montes de los cuales el 66% de los mismos tienen bosques?

¿No se dan cuenta que toda esta ideología lobista no tiene otro fin que, como todo lo surgido de las profundidades de la pestilencia progresista, robar la libertad del ser humano y dominar a los ciudadanos?

Sea libre. Piense por sí mismo…no se deje gobernar ni amedrentar por el gobierno de los gilipollas.

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