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Montoro entrega los presupuestos en el Congreso sin tener garantizada su aprobación

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha entregado a primeras horas del martes a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 que, al igual que el año pasado, comenzará su tramitación parlamentaria con retraso. La diferencia, en esta ocasión, es que el texto no cuenta aún con los apoyos suficientes para su aprobación final. ´ón

Montoro entrega los presupuestos en el Congreso sin tener garantizada su aprobación

El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, ha entregado a primeras horas del martes a la presidenta del Congreso, Ana Pastor, el proyecto de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2018 que, al igual que el año pasado, comenzará su tramitación parlamentaria con retraso. La diferencia, en esta ocasión, es que el texto no cuenta aún con los apoyos suficientes para su aprobación final, pese a que son «los presupuestos del empleo y del crecimiento«, según Montoro.

Pasadas las 09.15 horas, Montoro ha posado para los medios gráficos en el Patio de Floridablanca de la Cámara Baja, acompañado por los secretarios de Estado de Presupuestos y Gastos, Alberto Nadal; Hacienda, José Enrique Fernández Moya, y de Función Pública, Elena Collado, junto a otros altos cargos del departamento.

Acto seguido, Pastor ha recibido en su despacho a Montoro, con quien ha analizado los plazos y la tramitación parlamentaria de las cuentas públicas de 2018, las segundas que elabora el Gobierno en esta legislatura y que, de momento, no cuentan con una mayoría suficiente para salir adelante.

El Gobierno de Mariano Rajoy obtuvo la semana pasada el respaldo del Grupo de Ciudadanos en el Congreso a los presupuestos a cambio de exigir la dimisión de la senadora del PP Pilar Barreiro, e incluir en el texto la subida de las pensiones y la equiparación salarial de policías y guardias civiles a los Mossos d’Esquadra, entre otras propuestas.

El PP aún no ha conseguido, sin embargo, el apoyo de los cinco diputados del PNV, imprescindibles para que los PGE salgan adelante. Los vascos están dispuestos a dar su apoyo a las cuentas públicas a cambio de que el Gobierno central ponga fin a la aplicación del artículo 155 de la Constitución, activado tras la declaración unilateral de independencia aprobada por los grupos independentistas en el Parlamento catalán en octubre. Una petición que los populares consideran un chantaje inaceptable.

Tanto el PNV como el PP han instado a los partidos independentistas de Cataluña a formar gobierno cuanto antes, momento en que Moncloa desactivará el 155. Los plazos para celebrar nuevas elecciones en Cataluña se activaron la semana pasada con la celebración del pleno de investidura de Jordi Turull, que resultó fallida al no contar con los votos suficientes en primera votación. Investidura que no pudo continuar 48 horas después para la segunda votación, porque el candidato de Junts per Catalunya y ERC había ingresado en prisión el día anterior por orden del juez del Supremo, Pablo Llarena.

Montoro entrega los presupuestos en el Congreso sin tener aún asegurada su aprobación
Montoro y Pastor durante el acto de entrega de los PGE en e Congreso. | Foto: Moncloa / RRSS

Por su parte, Ciudadanos, que finalmente llegó a un acuerdo con el Gobierno para apoyar los presupuestos después de que este aceptara sus exigencias, considera que «se trata del presupuesto más social en una década y que cumple con el déficit», ha dicho el portavoz de Economía de la formación naranja en el Congreso, Toni Roldán.

Además, ha pedido al PSOE que estudie estos presupuestos, que los socialistas han rechazado. «¿Qué medida no le gusta al PSOE par ano apoyar los Presupuestos Generales del Estado de 2018? ¿La bajada de impuestos a mileuristas? ¿Las medidas de conciliación?», ha dicho Toni Roldán.

El PSOE, por su parte, ha asegurado en varias ocasiones que presentará unos presupuestos alternativos a los del Gobierno. «No apoyaremos unos Presupuestos Generales del Estado que colocan a España en el furgón de cola del gasto social», ha dicho Margarita Robles.

A la espera de lo que ocurra en Cataluña, los PGE inician el trámite parlamentario, una vez que se ha celebrado en el Salón de Pasos Perdidos oficialmente el acto de entrega del proyecto de ley, desarrollado en presencia de altos cargos del Ministerio de Hacienda, el secretario de Estado de Relaciones con las Cortes, Rubén Moreno, y miembros de la Mesa y de la Comisión de Presupuestos del Congreso.

Las partidas más destacadas de los PGE 

Políticas de empleo, Casa Real, los Servicios de Inteligencia, Pensiones, Fomento y Sector público son algunas de las partidas que suben este año.

Un años más, el gobierno ha aumentado la asignación del rey, que recibirá 7.887.150 euros, un 0,87% más que en los presupuestos anteriores, cuando la subida fue del 0,56%.

El Gobierno también ha incrementado el presupuesto del Centro Nacional de Inteligencia (CNI) un 8%, con 281,95 millones de euros, por lo que el gasto de los servicios de inteligencia acumula un crecimiento de más del 16% en dos años.

Destaca también el incremento de 80 millones de euros para arrancar el Pacto de Estado contra la Violencia de Género, de los cuales algo más de la mitad se destina al Ministerio de Interior para la protección de las víctimas.  Este ministerio también aumenta el presupuesto con 506 millones de euros más que en 2017 para, entre otras cosas, cumplir con el compromiso del ministro Juan Ignacio Zoido de atender las demandas de equiparación salarial de policías y guardia civiles con los Mossos d’Esquadra.

El presupuesto para pensiones, que ha generado numerosas manifestaciones en las últimas semanas, también aumenta en los PGE. Los fondos destinados a las pensiones se llevarán 40,9 euros de cada 100 de los presupuestos frente a los 40,5 euros que recogían las cuentas de 2017.

El Ministerio de Cultura, con 838 millones de euros, ve incrementado su presupuesto un 4,4% respecto a 2017.

Otros aumentos incluidos en los PGE son el presupuesto del Banco de España, que crece un 2,67%; el de Educación, que aumenta un 3%, con 50 millones de euros más para becas; el destinado a igualar y subir los sueldos de los funcionarios, que aumenta 600 millones de euros; y el de Sanidad, que aumenta su presupuesto en un 3,9%.

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