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Unicaja acaba con el teletrabajo: primera gran empresa española en anularlo

Pone fin en julio al plan que permitía a todo el personal de sus servicios centrales a usar este sistema y desde ahora solo se lo facilitará a algunos empleados

Unicaja acaba con el teletrabajo: primera gran empresa española en anularlo

Una sucursal de Unicaja. | Europa Press

Unicaja ha decidido poner punto y final al teletrabajo y se alza como la primera gran empresa en España que anula este sistema tras haberlo implantado. La entidad, según ha podido saber THE OBJECTIVE, ha dado carpetazo al plan piloto que lanzó el año pasado tras la recuperación de la normalidad, después de las restricciones de movilidad de la pandemia, y a partir de este mismo mes de julio sus trabajadores no tendrán la opción de no acudir físicamente a sus puesto laboral.

Fuentes oficiales de Unicaja han confirmado a este periódico que dicho plan se ha dado por finalizado, pero matizan que a partir de ahora el modelo a seguir será personalizado, en línea como están haciendo otras entidades. Esto significa que solo un reducido número de empleados podrán optar al teletrabajo, en función de las necesidades y la gestión de los recursos humanos en cada momento.

La entidad malagueña puso en marcha un proyecto en pruebas hace 12 meses, por el que permitía a todos los empleados de los servicios centrales poder trabajar a distancia 15 días al trimestre con un máximo del 25% de la jornada. Como en todo el sector financiero, en Unicaja este sistema dejaba al personal de las sucursales y de algunos departamentos al margen, obligándolo a laborar de manera presencial.

Unicaja toma la decisión en plena cruzada contra el sistema por grandes ejecutivos

A diferencia de Unicaja, el resto de entidades y de grandes empresas que implantaron este modelo híbrido de trabajo aún no han dado marcha atrás de manera tan tajante, aunque en algunos casos se está modulando y rebajando su extensión, en un momento en que su uso se está recortando en nuestro país y en plena corriente de líderes empresariales en el mundo que reclaman su punto y final.

Desde hace unos meses, algunos de los grandes ejecutivos internacionales -muchos de ellos ligados a las grandes tecnológicas- están clamando contra el teletrabajo. Destacan entre ellos el dueño de Tesla y Twitter, Elon Musk, y el consejero delegado de Google, Sundar Pichai, que han lanzado una cruzada contra el teletrabajo al considerar que resta productividad y es inmoral.

En este contexto, Unicaja ha dado por terminada la plan piloto para que sus empleados de los servicios centrales pudieran trabajar desde casa. Una decisión que ha soliviantado a los sindicatos, que estaban luchando tanto en la entidad como en todo el sector financiero para ampliar el modelo a todos los centros, incluidas las sucursales. CCOO, por ejemplo, lamenta los perjuicios que va a acarrear a la plantilla afectada y señala que luchará para que la entidad lo reconsidere.

De una u otra manera, todas las grandes compañías españolas tienen proyectos para que sus empleados puedan teletrabajar diferentes días. Iniciativas que se concretaron el año pasado, principalmente, con la llegada de la normalidad en la actividad después de que durante la pandemia se tuviera que generalizar este sistema operativo.

Por ejemplo, en el sector financiero y siempre en los servicios centrales, BBVA permite dos días a la semana; Caixabank, de cuatro a seis días al mes; Sabadell, seis al mes; Bankinter, una jornada a la semana; y el Santander, de entre uno y dos días a la semana.

La decisión de Unicaja es la primera que se adopta después de que su consejero delegado, Manuel Menéndez, se diera por vencido en la guerra interna mantenida por el poder por los pactos de la fusión con Liberbank y renunciara a su cargo. La salida del ejecutivo asturiano había sido bienvenida por los sindicatos, de ahí que a los representantes de los trabajadores les haya sorprendido negativamente la medida de anular el plan del teletrabajo.

En la actualidad, el banco malagueño está ultimando los detalles de su cúpula para designar al nuevo consejero delegado, que tendrá previsiblemente todas las funciones ejecutivas, ya que el presidente, Manuel Azuaga pasará a ostentar solo un cargo institucional. Fuentes financieras apuntan a que un hombre de la casa, el actual director de Control y Estrategia, Isidro Rubiales, podría suceder a Menéndez, pero tampoco descartan el fichaje de un externo, entre ellos, el ex número dos de Bankia, José Sevilla.

El teletrabajo en España se redujo en el último trimestre de 2022, manteniendo así la tendencia decreciente a pesar de que los ciudadanos tienen preferencia por este modelo. En concreto, disminuyó un 6,5% y a finales del pasado ejercicio era practicado por 2,56 millones de empleados (12,7% de la población ocupada), según un informe elaborado por Adecco.


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