El 90% de los autónomos podría ser apercibido si no regulariza sus cuotas a tiempo

Hasta un 90% de autónomos podría ser apercibido por la Seguridad Social si a lo largo del próximo año, concretamente en octubre, no ha enviado la información correspondiente a los beneficios reales de sus negocios, y por tanto, ajusta esos ingresos a los nuevos tramos de las cuotas a pagar.

Y es que, aunque el mes de octubre parece muy lejos en el tiempo, lo cierto es que hoy por hoy -y después de un año de balance de la entrada en vigor del nuevo sistema de cotización por ingresos reales-, la respuesta de los autónomos ante este requerimiento sigue siendo un auténtico «caos» y la Seguridad Social está dando la información suficiente para saber cómo funciona.

Así lo explica a THE OBJECTIVE, Ana Belén González, asesora fiscal especializada en autónomos y emprendedores digitales en Consultoría Blogger, y quien comparte este dato estadístico, apoyándose en el volumen que gestiona su asesoría, señalando que, de la facturación de más de 300 clientes, solo un 10% de ellos piden ese análisis mensual para ajustarse correctamente a los tramos que se especifican. Clientes que se dividen en dos perfiles: «El que prefiere pagar cuotas de más para que luego no le hagan la regularización al año siguiente y el que prefiere pagar muy poco y esperar a las regularizaciones».

Pero en su opinión, ninguno de los dos se ajusta a lo que realmente tendrían que hacer, pues «sigue habiendo un desconocimiento brutal y la gente lo está dejando pasar y se lo están tomando como la renta, pensando que, si luego me sale a pagar, pues ya veré qué hago». 

Y así ocurre -remarca- que pasado un año desde su puesta en marcha y no sin cierta flexibilidad por parte de las instituciones, «aún son muchas las dudas que sigue generando este nuevo sistema de cotización por tramos, del que autónomos y asesores recibirán las regularizaciones a finales del año 2024». 

«El susto del año»

Y estas dudas no solo son de parte de los autónomos. González también pone el foco en los propios asesores, por dos cuestiones importantes: que por un lado no tienen muy claro cómo se va a gestionar y que, por otro, no han recibido la información suficiente para saber cómo funciona, cómo se regulariza y cómo se ajusta esa cuota. «El problema, es por tanto, de difusión, porque esto se publicó en un BOE el pasado verano de 2022 y a día de hoy hay muchos autónomos que no conocen el nuevo sistema de cotización y tampoco se van a leer el BOE; con lo que mucha gente se llevará el susto el año que viene», avisa la cabeza visible de Consultoría Blogger. 

Y ello sucede, explica, porque aquí en España, «la cultura financiera no está muy integrada y las instituciones pretenden que los trabajadores hagan un análisis financiero de su negocio sin cultura ni formación para poder hacerlo y fruto de esa falta de información después van a venir regularizaciones muy importantes», anticipa.

Según la previsión, las cartas que contienen las regularizaciones de la Seguridad Social del año 2023 comenzarán a llegar en 2024, justo tras finalizar la campaña de la renta. Ahora bien, es posible que «esas regularizaciones se vayan retrasando, al ser un sistema nuevo, igual que se retrasó la puesta en marcha de las nuevas aplicaciones necesarias para poner en marcha el sistema», explica González. Sin embargo -advierte-, no conviene dejarlo para más tiempo, porque también «es posible que estemos a finales de 2025 y nos llegue una carta de regularización del año 2023, porque va a ser una locura». 

Así pues, se pregunta: «¿Qué tenemos que hacer si recibimos una carta de regularización de la cuota de autónomos por parte de la Seguridad Social?». A lo que responde: «Si hemos estado cotizando de menos a lo largo del año, nos van a pedir que paguemos la diferencia. Pero, si hemos estado cotizando de más, nos van a proponer devolvernos el exceso, aunque (previsiblemente) podremos renunciar si queremos». En cualquier caso, añade la experta fiscal, «si no tienes asesor, lo mejor es que te prepares un Excel donde puedas controlar claramente tus ingresos y tus gastos y tu previsión de los 12 meses del año y, si tienes asesor -concluye-, mi mejor consejo es que lo delegues, puesto que estarás solucionando un futuro problema, porque lo importante también es revisar el tramo en el que estás y cambiarlo si es necesario antes del 31 de diciembre».

Sin entrar en el dato estadístico, pero confirmando que son muy pocos los autónomos que hasta la fecha han notificado sus ingresos reales, el presidente del Consejo General de Colegios de Gestores Administrativos de España, Fernando Santiago, explica cómo, en efecto, desde principio de año, el autónomo ha podido informar sobre los ingresos netos esperados y cotizar por éstos, al mismo tiempo que cada trimestre, éste también puede ir ajustando su cotización en base a los ingresos reales, al alza o a la baja. Y claro -matiza-, «puede hacerlo o no hacerlo. Pero el problema -advierte- es que si no lo hace, cuando se remitan a la AEAT (julio 2024) sus ingresos reales, la Tesorería General de la Seguridad Social sí le va a ajustar la cotización a los ingresos reales».
 
Por eso Santiago hace este ejercicio, y es que, cuando el autónomo ha ido cotizando por el importe mínimo, pero sus ingresos finalmente le sitúan en una escala muy superior a la del mínimo, entonces, adelanta el presidente del CGCGA, «le va a ajustar la cotización anual por el valor real, y este puede ser muy superior al mínimo por el que ha cotizado». Así -colige-, «en ese momento, tendrá que regularizar por el importe de menos en su cotización y podrán regularizar si lo desean por el importe pagado de más».