Mobile 2024: del fracaso del metaverso a la monetización de la inteligencia artificial
La gran feria de la tecnología espera recibir 95.000 asistentes, aún por debajo del récord de 109.000 de 2019
Imagen del Mobile World Congress de 2023 en Barcelona. | Agencias.
Barcelona se prepara para recibir desde este lunes a las principales empresas del mundo digital en un nuevo Mobile World Congress (MWC), una edición en la que la agenda estará marcada por los retos y oportunidades de la inteligencia artificial (IA) generativa y por los esfuerzos de los grandes gigantes tecnológicos y las operadoras de telecomunicaciones por buscar la forma de monetizar un desarrollo que en los últimos meses ha sido frenético, según ha podido constatar THE OBJECTIVE tras charlar con algunos de sus protagonistas.
Una ola que ha sustituido completamente al gran actor de las dos ediciones anteriores: el metaverso, tendencia que ha desaparecido completamente del universo digital ante la imposibilidad del sector para hacerlo rentable. La web 3.0, es decir la evolución de navegación tradicional y de las redes sociales, para entrar en un mundo de servicios online personalizados e inmersivos, sigue vida y probablemente tiene recorrido por delante, pero su pujanza ha cedido todo el protagonismo a los usos industriales y comerciales que se le pueden dar a la IA.
Entonces ¿qué pasará con la IA? Los expertos que irán al Mobile coinciden en señalar que hay dos ámbitos claramente diferenciados. El primero es sobre las implicaciones éticas de la nueva tecnología y en especial su impacto en la sociedad y en el trabajo de los creadores de contenido, un punto donde los Gobiernos están poniendo especial énfasis. El propio ministro de Transformación Digital español, José Luis Escrivá, advirtió el pasado viernes en un foro público que gracias a Ley europea de IA (que todavía está por desarrollar) «estamos todavía a tiempo de establecer límites y eliminar usos espurios y peligrosos».
Nvidia en el Mobile
Y el segundo ámbito es el uso comercial y el impacto económico de la IA, con mucho peso en la semana de MWC de Barcelona. En cuanto a la industria, se está demostrando que la fabricación de chips para esta nueva tecnología está creciendo de manera exponencial. Nvidia, la empresa de moda –y con el mayor aumento diario en capitalización bursátil de la historia hasta llegar a los 1,94 billones de dólares– prevé que sus ventas crezcan un 20% en el trimestre en curso. En sus últimos resultados reflejó ingresos de 60.000 millones, el doble que hace un año, tras convertirse en uno de los mayores productores de componentes para la IA.
En cuanto al montante de inversión global, ya se habla de billones de dólares. Incluso Sam Altman, CEO de OpenAI, la otra gran disruptora de esta industria con desarrollos generativos constantes, indicó hace unas semanas que se necesitaban entre cinco y siete billones, aunque luego matizó sus palabras. Lo cierto es que la desarrolladora -que a finales del año pasado vivió una crisis de gobernanza por las diferencias entre sus socios respecto de cuán lejos debía ir el avance de la IA- ya está valorada en 80.000 millones de dólares.
Esta doble vertiente (desarrollo e infraestructura) abre la puerta a múltiples mercados, no solo a las grandes tecnológicas como Google, Amazon, Microsoft o Meta, sino que además a Gobiernos y redes públicas que están comenzando a desarrollar sus propias redes de IA, conscientes de que la seguridad y el desarrollo digital se está jugando en este terreno. Nuevamente el riesgo es que Europa se quede fuera de esta carrera en la que Estados Unidos lleva una clara ventaja.
Open Gateway
Pero no todo será IA en el MWC. Las operadoras de telecomunicaciones nuevamente pondrán sobre la mesa el Open Gateway y se espera un importante anuncio para la primera jornada de la feria. Hace un año, la patronal de las operadoras del sector, GSMA (Groupe Speciale Mobile Association) anunció un acuerdo global entre todos sus socios para dar acceso universal a las redes de los operadores para los desarrolladores, ya sea independientes, de cualquier compañía privada o de las grandes tecnológicas.
Se trata de poner las redes de las operadoras, tanto de redes fijas como móviles, al servicio de todo el mundo digital para que tengan una puerta única de entrada a las infraestructuras y puedan desarrollar sus iniciativas compatibles en cualquier parte del mundo y con cualquier proveedor al mismo tiempo. Un año después de esta comunicación, Telefónica, Orange y Vodafone anunciaron su lanzamiento comercial en España y se espera darle profundidad global en este Mobile de 2024.
Por otro lado, las grandes telecos volverán a poner el foco en el fair share y en el pago justo que -consideran- las grandes tecnológicas deben realizar por utilizar sus redes. El año pasado fue la gran batalla política y esta vez se espera que todo el sector vuelva a unir fuerzas para pedir a los reguladores cambios en esta línea. En este contexto, la mesa más importante se desarrollará el mismo lunes con la presencia de los cuatro grandes directivos de la industria telco europea: José María Álvarez-Pallete (Telefónica), Margherita Della Valle (Vodafone), Christel Heydemann (Orange) y Tim Hoettges (Deutsche Telekom).
Asistentes al Mobile
El Mobile de este 2024 espera recibir unos 95.000 asistentes de más de 200 países, según indicó la organización recientemente. Pasado el impacto de la pandemia y tras asegurar su presencia en Barcelona hasta 2030 (con renovaciones anuales automáticas), atrás quedan los líos del procés y los riesgos de que se marchase a otra ciudad, algo que da tranquilidad a la organización para comenzar a volver a la normalidad.
Con todo, de momento siguen sin alcanzar su máximo histórico alcanzado en 2019 con 109.000 asistentes y un impacto económico de 470 millones, aunque en esta oportunidad se espera superar los 461 millones registrados el año pasado. El evento ocupará los ocho pabellones del recinto de Gran Vía de Fira de Barcelona en L’Hospitalet de Llobregat, reunirá a más de 2.400 compañías expositoras y a unos 1.100 ponentes. Generará más de 9.100 puestos de trabajo temporal y dará trabajo a 1.200 empresas logísticas.
