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Vara impone un debate en Extremadura con 11 candidatos y el Madrid jugándose la Champions

El PSOE enoja al PP al meter a siete partidos que no están en el Parlamento. Los socialistas reeditan el formato que Iván Redondo ideó para Monago en 2015

Vara impone un debate en Extremadura con 11 candidatos y el Madrid jugándose la Champions

Guillermo Fernández Vara, presidente de Extremadura. | Carlos Criado (EP)

El único debate televisivo en Extremadura antes del 28-M se celebrará el próximo 17 de mayo por la noche y con toda seguridad será el más surrealista de toda España. El PSOE de Guillermo Fernández Vara ha hecho valer su mayoría absoluta en la Corporación Extremeña de Medios Audiovisuales (Cexma) para abrir el evento a los 11 candidatos que se presentan a las elecciones autonómicas, con el añadido de que el inicio del mismo en la televisión autonómica Canal Extremadura coincidirá con el partido de semifinales de la Champions en el que el Real Madrid se jugará su pase a la final contra el Manchester City, según desvelan fuentes populares a THE OBJECTIVE en exclusiva.

El formato y el día elegido ha enojado a la candidata del PP, María Guardiola, quien ha buscado en las últimas semanas un cara a cara televisivo con Vara para confrontar los programas de cada uno, pero que, ante la negativa del barón socialista, se avino a un debate a cuatro como mal menor. Sin embargo, al final habrá 11 representantes políticos en el plató y con un buen número de extremeño pendientes de si los jugadores de Carlo Ancelotti pasan a la final de Estambul. Una coincidencia que no ha gustado al principal partido de la oposición en dicha región: «Será una jaula de grillos», avisa un dirigente de la campaña de los populares.

El Parlamento extremeño solo ha tenido cuatro grupos parlamentarios en esta última legislatura -PSOE, PP, Ciudadanos y Podemos- ya que Vox se quedó hace cuatro años en el 4,7%, muy cerca del listón del 5% para entrar en la Cámara autonómica. Pero en el debate también habrá representantes de la coalición Levanta Extremadura (formada por Extremeños PREX-CREX y Extremadura Unida) y de los partidos Vox, Por un Mundo Más Justo (PUM+J), Extremeñistas-Partido de los Extremeños (PEX-EXT); Partido Animalista con el Medio Ambiente (Pacma), Una Extremadura Digna (UED) y Juntos por Extremadura (JUEx).

Una sopa de letras en la que el candidato de la formación de Santiago Abascal es el único extraparlamentario con posibilidades de conseguir escaño el 28-M. Y eso que aún podía haber sido peor, pues los únicos excluidos del debate han sido las formaciones localistas Somos Cáceres y Cáceres Viva, que se presentan únicamente por la provincia cacereña.

La nutrida presencia de políticos en el debate televisivo desalentará a la audiencia y al coincidir con un partido de fútbol tan importante como el del Real Madrid, aún más, advierten las fuentes del PP consultadas por este diario, quienes hacen hincapié en que con esta jugada, Vara pretende salir «indemne» del principal escollo mediático antes de las elecciones.

Cexma reunió este martes a representantes de los 11 partidos elegidos para comunicarles la decisión. Tanto PP como Cs se sumaron in extremis a la iniciativa para no quedarse fuera, pero a renglón seguido exigieron un segundo debate a cuatro en otro momento de la campaña. Sin embargo, no concitaron apoyos y solo les quedó el recurso al pataleo ante el rodillo del PSOE.

La televisión extremeña se escudó en el precedente que idearon en 2015 el popular José Antonio Monago y su entonces joven jefe de campaña, Iván Redondo, tras la única legislatura en la que Extremadura había estado gobernada por el PP. Por aquel entonces, el primero gobernaba en minoría con apoyos puntuales de IU -así lo decidieron las bases de la coalición de izquierda- en un momento en el que habían saltado a la palestra política dos formaciones noveles -Podemos y Ciudadanos- con ganas de mover el tablero del bipartidismo.

En ese debate electoral de hace ocho años estuvieron los 12 candidatos que concurrían a las elecciones autonómicas. El apelotonamiento de políticos en el plató solo permitió que cada uno de ellos opinase de cada bloque cuando el presentador le daba paso. Apenas hubo posibilidades de réplica entre ellos. Al final, se convirtió en un «once contra uno», en palabras de Monago tras aquella experiencia que no contentó a nadie. Incluso, el debate se tuvo que ver en diferido ya que fue editado de lo tedioso que era para su difusión tres días después.

En 2019, ya con Vara en el poder, se pasó al directo y se modificó el debate para hacerlo un poco más operativo pero castigando de nuevo a la oposición. Hubo siete candidatos: los que tenían representación en la Asamblea -PSOE, PP, Podemos y Ciudadanos- junto a tres extraparlamentarios: Vox, IU y Actúa, formación fundada unas semanas antes por Gaspar Llamazares y cuyo peso el día de las elecciones fue irrelevante. Solo consiguió 665 votos -menos que otras formaciones que concurrían a los comicios sin tener atril en el debate-, lo que demuestra, a juicio de las citadas fuentes, que por mucho minuto de gloria que se le dé a un partido desconocido en televisión luego no tiene incidencia en el momento de la votación.

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