Rolenka, el restaurante donde saborear una ensaladilla rusa de verdad

Que España enamora es ya un hecho indiscutible. Su gente, su clima, sus tradiciones, su gastronomía… Una combinación de todas ellas, liderada por esta última, hicieron que la chef ucraniana Olena Ros recorriera los 3.700 kilómetros que separan España de Ucrania para instalarse en nuestro país y hacer, así, aquello que le apasiona: cocinar.

Un viaje cuyo destino final ha sido Rolenka, un restaurante cuya base es una cocina «honesta», de sabores tradicionales no influenciados por modas, y donde el comensal puede «beber un buen vino o degustar una buena comida» sin dejarse un dineral. «Rolenka es amor, calidad, una atmósfera cómoda. Es un restaurante para familias que quieran comer una comida tradicional a buen precio», cuenta la chef a The Objective en un español perfecto aunque con marcado acento ucraniano. Y es que Ros ha aprendido el idioma entre fogones en tan sólo un año.

Así, en pleno centro de Madrid, en calle Mayor 30, una de las principales arterias que desembocan en la turística Puerta del Sol, cocina a fuego lento para familias madrileñas, pero sobre todo, para aquellos turistas que «quieran vivir una buena experiencia gastronómica» con menús que  oscilan entre los 14 y 35 euros.

El confit de pato con salsa de naranja y puré de patatas, las flores de alcachofa o el fondant de chocolate con helado de vainilla y coulis de frambuesa son de obligada degustación para la chef, quien asegura que ha sido todo un aprendizaje personal entender al comensal español, «muy diferente tanto en gustos como en comportamientos al ucraniano». «La primera vez que leí una comanda en la cocina que ponía ‘PARA COMPARTIR’ no daba crédito. En Ucrania nunca se comparten los platos», cuenta de forma anecdótica la propietaria de Rolenka que en los próximos meses abrirá un nuevo local en Paseo de la Castella 34 y en Barcelona. Además, la ucraniana, que mamó este arte gastronómico de su abuela, ya cuenta con tres restaurantes más en la capital de su país, Kiev, dos japoneses y un francés. Próximamente también abrirá un español «especializado en paella» ya que en Ucrania «apenas hay locales de comida española», asegura.

Además, la cocina non-stop de Rolenka ofrece una carta after lunch con platos que mantienen intacta la esencia del restaurante, como la «verdadera» ensaladilla rusa, que no lleva atún sino lengua de ternera. «A los españoles le gusta, dicen que es algo distinto», cuenta Olena Ros, quien también destaca el salmorejo, su «primer amor a primera vista» cuando visitó España hace 14 años. Algo que no le sucedió con el jamón: «No hay nada parecido en Ucrania y su sabor tan salado no me conquisto», destaca la cocinera.

Dirección: Calle Mayor, 30, Madrid

Teléfono: 919 19 17 49

Web: rolenka.com

Menú del día: 14,50 euros

Menús especiales: 25 y 35  euros

Precio medio: 30 euros

Horarios: X –D: de 13:00 a 00.00 h; lunes cerrado; martes, de 18.30 h a 00.00 h.