Estas son las prendas más especiales de Meghan Markle: así ha evolucionado su estilo

Meghan Markle es una de las mujeres más poderosas de Inglaterra y Estados Unidos. La duquesa de Sussex llegó al Palacio de Buckingham en 2016, una vez comenzó su relación el príncipe Harry, el hijo menor del rey Carlos III y Lady Di. Meghan encarnaba muchas de las cosas de las que había huido la Casa Real Inglesa, como es una mujer divorciada y, sobre todo, que se dedicaba al mundo de las artes. Desde la Familia Real buscaban un perfil más light, probablemente más moldeable, más tranquilo y, sobre todo, exento de problemas. A pesar de los primeros inconvenientes, Meghan pronto se adaptó a la vida de palacio, luciendo sus mejores galas y decantándose por un estilo con toque british y sofisticado.

Esa adaptación fue difuminándose con el paso del tiempo hasta que Meghan y Harry decidieron alejarse de todo aquello que había condicionado la vida de Diana de Gales. Así, cogieron sus maletas, y a su familia, y se mudaron hasta Canadá para más tarde recalar en Estados Unidos. Su objetivo era, y es, vivir una vida lo más normal posible, teniendo en cuenta que él es príncipe y ella una actriz que en su día fue muy reclamada en Hollywood. Una vez establecida en Los Ángeles, Meghan ha vuelto a su estilo de siempre, ha vuelto a esa Meghan que algún día fue cuando interpretaba a Rachel Zane en Suits.

Cómo es el estilo de Meghan Markle

Así, en estos casi siete años hemos visto como su estilo ha cambiado y ha evolucionado. Con todo, Markle ha combinado la modernidad con el minimalismo y los looks monocromáticos con aquellos que marcan su silueta y más clásicos y elegantes. De esta manera y, previsiblemente, gracias al consejo de los estilistas que tuvo en Palacio, Meghan sabe muy bien qué tipo de vestidos le favorecen más y qué colores se combinan con las facciones de su rostro.

La primera aparición de una tímida Meghan Markle con recuerdo a Lady Di

Una de las primeras veces que pudimos ver a Meghan Markle como futura duquesa fue en la pedida de mano junto al príncipe Harry. Como es tradición en todas las casas reales, la pareja reunió a la prensa y se presentó para hablar sobre su futuro compromiso y sobre qué significaba su relación para cada uno de ellos. Así, tanto Meghan como Harry oficializaron su relación en Kensington Palace. Para esa ocasión tan especial, Markle se decantó por un abrigo de color blanco roto de la firma Line the Label, que se agotó a los pocos minutos. Debajo llevaba puesto un vestido, en verde esmeralda, de P.a.r.o.s.h. Además, combinó su look con unos zapatos de salón en color nude de la marca Aquazzura y unos pendientes de Maison Birks.

Aunque eso sí, el detalle más especial estaba en el anillo. Había sido Harry quien lo había diseñado especialmente para ella y haciendo un guiño a su madre. Este estaba formado por tres diamantes. El más grande, y central, procedía de Botsuana, tierra a la que la pareja se escapó, antes de que se hiciera pública su relación, para vivir su amor. Y los otros diamantes, en los laterales, pertenecieron a Diana de Gales. Según publicaron en los medios ingleses, la joya podría tener un valor de 50.000 euros.

La tradición y la modernidad en su vestido de novia

Tras esa primera toma de contacto, Meghan siguió derrochando estilo. Para su enlace, que se celebró en la primavera de 2018, Meghan se decantó por un diseño de Clare Waight Keller, de la casa Givenchy. Para la ocasión, la diseñadora creó un vestido atemporal que tenía detalles icónicos de la casa Givenchy, así como otras pinceladas más modernas. Además, estaba confeccionado en cadi de seda y se encontraba ceñido con un escote en barco junto a un velo de tul con bordados de más de cinco metros. Para el pelo, Meghan se decantó por una tiara de modelo bandeau con motivos geométricos.

Ascot, el lugar con más estilo de Inglaterra

Otro de los momentos más esperados para los ingleses, además de las bodas reales, son los torneos en Ascot. Desde hace muchos años, las carreras de caballos han ocupado una parte muy importante entre la jet set inglesa. Por eso, es normal que, también, ningún miembro de la casa real quiera perdérsela. En 2018, la Duquesa se decantó, de nuevo, por la casa Givenchy para lucir un vestido camisero de manga larga con botones y el bajo asimétrico. Además, también tenía unos motivos florales tejidos en la zona de la cintura con un pequeño cinturón negro. Aunque eso sí, lo que más llamaba la atención era el tocado. Meghan eligió un sombrero, en blanco y negro, de la firma Philip Treacy.

Meghan Markle deslumbró en su primer acto en solitario con Isabel II

Ese mismo año, se produjo el primer acto en solitario de la duquesa de Sussex junto a la reina de Inglaterra. Isabel II y Meghan acudieron al condado de Chesire. Para la ocasión, Meghan eligió un vestido beige de Givenchy, como vemos una de sus marcas de cabecera, y un sobrecuello en la misma tonalidad que el vestido. Además, incluyó un sencillo cinturón y fino de color negro junto a un clutch y unos zapatos del mismo estilo.

El binomio blanco-negro es un acierto asegurado

Un año más tarde, y sin sorpresas, volvió a confiar en Givenchy con un sencillo diseño para los Endeavour Fund Awards en Londres, que se celebraron en febrero de 2019. Para ello, se decantó por una camisa blanca y una falda de talle alto en negro con una original apertura delantera que dejaba entrever sus piernas. Además, también lució unos bonitos tacones de Aquazzura en negro con tiras doradas. Para el pelo optó por un recogido hacia atrás y un clutch negro. En ese momento se encontraba embarazada del pequeño Archie y lo cierto es que el look le favorecía mucho.

El ‘todo al rojo’ de Meghan Markle como duquesa de Sussex

En el año 2020, los duques de Sussex acudieron al Mountbatten Festival of Music en el Royal Music Hall de Londres y para el evento, Meghan eligió un favorecedor vestido en rojo de Safiyaa. Además, este tenía una minicapa en los hombros que le daba un toque especial además de una apertura en la pierna derecha. La Duquesa lo combinó con un clutch de la firma Manolo Blannik y unos salones de tacón de Aquazzura, también en rojo.

Su vestido con mensaje en su entrevista con Oprah

Para uno de sus días más importantes y decisivos, no solamente de su vida, sino, también, para el mundo entero, Meghan eligió un vestido vaporoso en negro y blanco. La duquesa de Sussex se sentó junto a Oprah Winfrey para hablar de cómo había sido su salida de Inglaterra. En su testimonio relató cómo se habían portado con ella en estos últimos años, dejando en muy mal lugar a la Casa Real Inglesa. Así, Markle eligió un lujoso diseño de Giorgio Armani valorado en 3.500 euros, realizado en seda y con un escote en V. Además, tenía una flor de loto bordada en la parte derecha.

El traje ‘blanco impoluto’ de Meghan Markle que es un acierto rotundo

Uno de sus looks más icónicos fue el que lució durante los Juegos Invictus en La Haya en abril de 2022. El conjunto estaba compuesto por una chaqueta y un pantalón de color blanco de la colección de primavera verano de Valentino de ese mismo año. La parte de arriba era oversize con doble abotonadura y un pantalón que combinó con salones blanco y un pequeño bolso de la misma tonalidad.