Analizamos 'la foto del año' de la Familia Real: la mirada de Letizia y la mano de Felipe a su padre

Cuando se marcó el 27 de febrero como fecha clave para el reencuentro entre los reyes, Felipe y Letizia, con don Juan Carlos, pocas cosas hacían prever que protagonizarían una de las fotos del año. Ha sido el funeral de Constantino de Grecia, el escenario clave para que los monarcas se vuelvan a ver, al menos de forma pública, con el que fuera rey de España. Y lo han hecho protagonizando unas imágenes de lo más cómplices y cercanas, con las que sellan su reconciliación. Cabe destacar que, en el mes de diciembre, también coincidieron en el cumpleaños de la infanta Elena en Madrid, aunque cada uno salió y entró por separado. Por eso, estas instantáneas han reflejado una actitud a las que no nos tenían acostumbrados de forma pública.

Desde que el rey Juan Carlos abandonara España, en el verano de 2022, Felipe siempre ha mantenido cierta distancia con él, con su padre. Así, por ejemplo, no acudió a su fiesta de cumpleaños, que se celebró en Abu Dabi a principios de enero, ni tampoco a visitarle en alguna de las numerosas visitas que ha hecho el Emérito a Sanxenxo, a donde sí han ido, por ejemplo, las dos infantas. Es por eso que todo hacía presagiar que en el funeral de Constantino, al igual que sucedió en la misa que se celebró hace un año en Grecia, iban a mantener la distancia. Pero no, han roto todos los esquemas.

La imagen clave de Felipe cogiendo del brazo a su padre, Juan Carlos

Aunque han entrado por separado a la capilla de San Jorge, en Londres, Felipe, Letizia y Juan Carlos se han sentado en la misma fila, uno al lado del otro. Durante todo el tiempo que han compartido juntos, lo que ha durado la misa, se ha visto al rey de España compartiendo confidencias con Olimpia de Grecia. También, han tenido algún que otro comentario que ha hecho que el rey Juan Carlos se riera en más de una ocasión, al igual que lo ha hecho la reina Letizia. Así, una vez finalizada la misa, los tres se han levantado de sus asientos para abandonar la Capilla. Ha sido en ese momento cuando Felipe ha ralentizado su paso para hacerlo coincidir con el de su padre, a quien ha agarrado del brazo.

Juntos y de la mano han salido del lugar sagrado, mientras que la reina Letizia se quedaba más atrás junto a Sofía. Ha sido ese mismo momento cuando se ha captado el frame exacto en el que la Reina observaba, a lo lejos, a su marido y a su suegro con una cierta mirada de una mezcla de nostalgia y asombro. Tras esto, los reyes de España han salido del lugar caminando, mientras que Felipe sostenía a su mujer, debido al empedrado del suelo y sus altos tacones, en una comitiva liderada por el príncipe Andrés. Antes de eso, Juan Carlos y Sofía ya se habían retirado.

Gestos cómplices y sonrisas en el funeral de Constantino de Grecia en Londres

Llama la atención que la llegada de los Eméritos no ha sido captada por los medios de comunicación, mientras que sí hemos tenido imagen de, por ejemplo, la infanta Elena y la infanta Cristina, quien ha acudido junto a Juan Urdangarin. Con ellos sí que ha coincidido el rey Juan Carlos en más ocasiones. Es más, la última vez fue durante su cumpleaños en Abu Dabi, donde acudió toda la familia al completo a falta de la infanta y la reina Sofía, la princesa Leonor y los reyes, Felipe y Letizia. Que su relación se ha desgastado con el tiempo es todo un hecho y se escenificó el pasado mes de octubre cuando el monarca, aunque acudió al cumpleaños de su nieta Leonor, no pasó la noche en Zarzuela.

Por ahora, no sabemos cuándo será la próxima vez que veamos a los reyes y al Emérito en público. Sí que es cierto que está previsto que, en los próximos meses, las visitas del rey Juan Carlos a España sean cada vez más constantes. Esto se debe a la llegada del verano, el comienzo de las regatas en Galicia y la propia voluntad del Rey. Un extremo que no sabemos si acaba de agradar del todo a Felipe con quien, desde que su padre abdicara y abandonara el país, ha intentado poner distancia. Al igual que lo ha hecho su mujer, con quien la tensa relación es pública y notoria.