Ley de bienestar animal: ¿Qué ocurre si tengo una de las mascotas prohibidas?
La nueva normativa impone a los propietarios de perros la obligación de asegurar a sus animales para cubrir posibles daños a terceros
Ley de bienestar animal
La nueva Ley de Salvaguardia de los Derechos y el Bienestar Animal, aprobada el mes pasado en el Congreso, entrará en vigor el 29 de septiembre de 2023, marcando un punto de inflexión en los estatutos legales concernientes a los animales domésticos.
La legislación establece con claridad que los perros, gatos y hurones son considerados animales domésticos. Además, introduce la posibilidad de que animales de granja sean reconocidos como de compañía.
No obstante, es importante tener en cuenta que esta legislación excluye a las especies invasoras y a los animales silvestres que no puedan aclimatarse al entorno en cautiverio o que puedan plantear riesgos para la seguridad y la salud humanas. Por otra parte, se permite la posesión de aves adiestradas para cetrería, siempre y cuando estén debidamente registradas, así como peces de acuario, siempre que no pertenezcan a especies invasoras.
Por otro lado, en el caso de los dueños de perros, la nueva normativa impone la obligación de asegurar a sus mascotas a partir de este momento.
Animales prohibidos para tener en casa
A pesar de que podría haber pasado desapercibido para muchas personas, desde 2013 existe una ley (Real Decreto 630/2013) que establece la prohibición de poseer en el hogar aquellas especies invasoras que se encuentran enumeradas en el registro nacional de especies exóticas invasoras. Este registro abarca una lista de animales que no se permiten tener, entre los cuales se encuentran:
- Agapornis
- Cotorras argentinas
- Mapaches
- Erizos
- Cerdos vietnamitas
- Tortugas peninsulares y tortugas de Florida
¿Qué sucede si tengo uno de los animales prohibidos?
Si tiene alguno de estos animales desde antes de 2013, puede seguir cuidándolos, pero bajo ciertas condiciones. Es necesario haber informado a la autoridad competente y registrarlos en un sistema específico (algunas regiones como Cataluña, Canarias o Galicia permiten hacer este proceso en línea). Además, el animal debe ser esterilizado y está prohibido venderlo.
Tener uno de estos animales sin registrarlos puede resultar en multas que ascienden hasta 200,000 euros. No conocer la ley no es una excusa válida para evitar estas consecuencias.
Por supuesto, abandonar a un animal es peor que mantenerlo en casa sin registrarlo. El abandono no solo es éticamente incorrecto, sino que también representa una amenaza para los ecosistemas. La prevención del abandono es uno de los objetivos clave de la ley, por lo que quienes abandonen a estos animales se exponen a sanciones severas.
Si tu mascota no es un perro, gato o hurón, pero tampoco está en riesgo de extinguirse, no es una especie exótica invasora, no transporta enfermedades ni representa un peligro, es probable que puedas continuar teniéndola en tu hogar.
Sin embargo, la nueva ley ha establecido un período de 4 años para elaborar una lista completa de animales considerados oficialmente como mascotas. Cualquier animal que no figure en esa lista estará sujeto a prohibición.
El curso obligatorio que deben hacer los propietarios de perros
La nueva ley de protección animal trae modificaciones para aquellos interesados en tener un perro. Según la ley, las personas que deseen tener un perro deberán completar un curso de formación. El propósito es promover el cuidado responsable de los animales, ya que la falta de conocimiento a menudo conduce a prácticas inadecuadas.
Este curso será válido de manera indefinida, será ofrecido de forma gratuita y su contenido estará regulado por normativas específicas.
Adicionalmente, los dueños de perros deberán contratar y mantener un seguro de responsabilidad civil que cubra posibles daños a terceros durante toda la vida del animal.
