El actor británico Dave Prowse, que dio vida a Darth Vader en la trilogía original de La Guerra de las Galaxias, ha fallecido a los 85 años «tras una breve enfermedad», según ha confirmado este domingo su agente.
Lo más importante: el trabajo que le dio celebridad a nivel internacional fue el de Vader en la archifamosa trilogía, un papel que ganó debido a su imponente físico -medía 1,98 metros-, si bien su marcado acento del West Country inglés no resultó del todo apto para la franquicia, por lo que fue doblado por James Earl Jones.
Thomas Bowington, su representante, ha anunciado «con gran tristeza» la muerte de Prowse en un mensaje colgado en su página de Facebook, donde indicaba que este falleció «ayer por la mañana», sin precisar apenas detalles, y agregando la célebre frase: «Que la fuerza le acompañe, siempre».
Prowse, que antes de pasarse al mundo del cine había sido culturista en la ciudad inglesa de Bristol, también llegó a ser condecorado con un MBE (Miembro del Imperio Británico) por su papel en el Green Cross Code Man, que promovía la seguridad vial en las carreteras de este país.
«Aunque fue famoso por interpretar muchos monstruos, para mí y para todos los que conocimos a Dave y trabajamos con él, era un héroe en nuestras vidas», apuntó Bowington en otra declaración a la BBC.
El agente tildó el fallecimiento de Prowse de «una pérdida profunda y verdaderamente dolorosa para millones de fans de todo el mundo».
Antes de iniciar su carrera en el cine, Prowse llegó a representar a Inglaterra en la modalidad de levantamiento de peso en los Juegos de la Commonwwealth a comienzos de la década de los 60.
Al parecer, el director de La Guerra de las Galaxias, George Lucas, se fijó en él para el papel de Darth Vader cuando lo vio interpretando a un guardaespaldas en el filme A Clorckwork Orange (1970), donde le invitó a presentarse a los procesos de selección para los papeles de Darth Vader y Chewbacca.
Pero, incluso antes de comenzar su carrera como actor, que desarrolló durante cinco décadas, sus servicios fueron requeridos dentro de los círculos de Hollywood, donde ayudó al malogrado Christopher Reeve a prepararse para las exigencias físicas del papel de Superman, como su entrenador personal.
Prowse debutó delante de las cámaras en la parodia de la película Casino Royale, de la saga del espía británico James Bond, en 1967, donde hizo de criatura de Frankenstein, un papel que le volvieron a pedir que encarnara en otras dos películas.
También apareció regularmente en varias series de televisión consideras «de culto», como The Saint Space (1999) y Doctor Who, en la que hizo de minotauro, en 1972.