Los grupos parlamentarios de PSOE y Ciudadanos han presentado en la mañana de este miércoles una moción de censura para sacar al PP del Gobierno de Murcia, en el que también se integra la formación naranja, y que dejaría a los populares fuera del ejecutivo autonómico tras 26 años en el poder.
En contexto: la presentación surge tras varios meses de discrepancias entre los dirigentes regionales del PP y de CS y entre la vicepresidenta autonómica, Isabel Franco, y la consejera y coordinadora autonómica de CS, Ana Martínez Vidal, ambas integrantes de la formación naranja. El veto parental, la vuelta a la presencialidad en las aulas, la reforma de la Ley del Presidente que permitiría al jefe del ejecutivo, Fernando López Miras, la vacunación fuera del protocolo han sido puntos de fricción en el Gobierno de PP y CS.
El portavoz parlamentario de CS, Juan José Molina, y los diputados socialistas Francisco Lucas y Alfonso Martínez Baños han registrado la moción de censura hace escasos minutos en la Asamblea Regional, donde el PSOE tiene 17 diputados y CS 6, sumando la mayoría absoluta de 23 escaños.
Según el texto presentado, la candidata que sustituiría a Fernando López Miras al frente del ejecutivo sería Ana Martínez Vidal, actual portavoz del Ejecutivo autonómico y líder regional de CS.
La noticia ha sido adelantada esta mañana por Cope. Así, Carlos Herrera aseguraba a primera hora que «un par de diputados de Ciudadanos le habrían hecho llegar al Partido Popular la intención de la dirección de Inés Arrimadas de pactar una moción de censura con el PSOE, para desalojar al PP tanto del Gobierno de la Región como del Ayuntamiento de Murcia», de esta forma, según el comunicador, «Ciudadanos se quedaría con el Gobierno regional y el Partido Socialista con el Ayuntamiento de Murcia».
Las primeras reacciones del Partido Popular no han tardado en llegar. El PP ha acusado a la presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, de «irresponsabilidad» por plantear esta moción de censura junto al PSOE y considera que pacta también con Unidas Podemos y por tanto con su líder, Pablo Iglesias, para permitir a los «radicales» gobernar. «Arrimadas pacta con Iglesias. Permite que los radicales puedan gobernar en Murcia», denuncian.
Así, fuentes de la dirección de Pablo Casado critican a Arrimadas por haber roto su palabra y recuerdan que el acuerdo con el presidente murciano, Fernando López Miras, se firmó por cuatro años. «Es una gran irresponsabilidad y trae una enorme inestabilidad en plena pandemia sin ningún motivo», aseguran además desde Génova.
Los de Pablo Casado también gobiernan junto a Ciudadanos en Andalucía, Madrid y en Castilla y León.
López Miras cesa a los consejeros de Ciudadanos
Fernando López Miras ha cesado a los consejeros de Cs que forman parte de su gabinete y ha dicho que anoche fue informado de la moción de censura contra él. A pesar de ello, ha dicho, actuó «pensando en los murcianos» y no convocó elecciones anticipadas.
En rueda de prensa en el Palacio de San Esteban, sede de la presidencia autonómica, López Miras ha subrayado en repetidas ocasiones que «no es el momento» para «pensar en política, partidos ni sillones» porque la Región de Murcia atraviesa la peor crisis económica, social, sanitaria y laboral de su historia a causa de la pandemia del coronavirus. Además, ha criticado con dureza la que considera una deslealtad de sus socios de gobierno y ha dicho que los consejeros de Cs forman parte de un partido que «anoche pertrechó este atraco».
«Este no es el momento de entrar en el debate de sillones, es una falta de respeto al millón y medio de murcianos», ha argumentado López Miras, quien opina que los ciudadanos «deben estar por encima de los intereses personales, y no lograr el poder al precio que sea». Sigue, de ese modo, la línea opuesta de su homóloga madrileña, Isabel Díaz Ayuso, que sí ha anunciado elecciones el 4 de mayo.
