Mediaset culmina sus guiños al Gobierno con una presidenta afín a Moncloa

Mediaset ultima el nombramiento de una nueva presidenta que sustituya al renunciado Borja Prado y todas las quinielas apuntan a Cristina Garmedia, ex ministra de Ciencia de José Luis Rodríguez Zapatero y cercana al actual gobierno socialista. Las fuentes consultadas por THE OBJECTIVE califican este movimiento como el guiño final del grupo italiano al Gobierno, un acercamiento que empezó con la salida del anterior consejero delegado, Paolo Vasile, hace más de un año y que ha continuado con una progresiva adaptación de sus contenidos para hacerlos más cercanos al Ejecutivo de coalición.

Estas mismas fuentes indican que si bien Garmendia es la favorita, habrá que esperar hasta finales de mes para tener la confirmación definitiva. En cualquier caso, si hubiese un cambio de última hora el próximo presidente de Mediaset seguiría siendo alguien que cuente con el plácet de Moncloa. El consejero delegado, Alejandro Salem, aseguró hace dos semanas en una aparición pública que la nueva directiva «será absolutamente española», por tanto será también mujer si hacemos caso al género implícito en su respuesta.

En las quinielas también está Consuelo Crespo que -con un currículum más vinculado a empresas- comparte Consejo de Administración en Mediaset España con la propia Garmendia y son las dos únicas mujeres españolas en el máximo órgano de la compañía. Con todo, estas mismas fuentes advierten de que no necesariamente se nombrará a una presidenta que ya esté dentro de la empresa aunque es lo deseable, por lo que la exministra sería la elegida si nada se tuerce a última hora, según ya ha informado El Economista.

Salida de Borja Prado

El retrato robot de la nueva presidenta de Mediaset debe -además de tener cercanía con el Gobierno- responder a un perfil estrictamente institucional y que no haga sombra a Salem, quien seguirá siendo el responsable con plenos poderes en la gestión y correa transmisora de las directrices que lleguen desde Italia. El grupo no quiere que se vuelvan a repetir los enfrentamientos con el anterior presidente, Borja Prado, a quien se le prometieron responsabilidades en la línea editorial y en la gestión de negocios, pero que a las pocas semanas se le pidió que se plegase a las órdenes del nuevo CEO.

La nueva presidenta tendrá un perfil bajo y representará de manera discreta a Mediaset en actos institucionales y sectoriales, pero nada más. No es casualidad que a Borja Prado, de declarada ideología conservadora, se le sustituya con una ex ministra socialista. El ex presidente de Endesa intentó mover ficha para comprar Cadena Ser y ser accionista del grupo Prisa a nombre de Mediaset, algo que fue frenado por el Gobierno y también por Italia.

Es así como las fuentes consultadas coinciden en señalar que ésta es la última pieza que faltaba para que Mediaset termine la transición de un grupo apolítico a ser uno de los apoyos mediáticos de Moncloa, en sintonía con el propio grupo Prisa (El País y Cadena Ser) y la RTVE de Elena Sánchez. Este grupo italiano es un actor clave ya que en el equipo de asesores del presidente de Gobierno están convencidos de que las elecciones todavía se ganan en la televisión.

Informativos de Mediaset

Sánchez y Moncloa saben que en una legislatura complicada con delicados equilibrios parlamentarios y con sus socios de investidura exigiendo compromisos puntuales en cada votación, necesitan tener apoyos mediáticos que le permitan mejorar su imagen ante la opinión pública. Ser cercanos a Mediaset es muy importante para contrarrestar las informaciones críticas de Antena 3 Noticias.

Todo se comenzó a gestar a finales de 2022 con la salida de Paolo Vasile, hasta ese momento consejero delegado de la cadena. El directivo italiano dominó con puño de hierro la cadena durante 23 años, la última década sin interés por los servicios informativos y sin posicionamiento político. Mediaset nombró a Alejandro Salem como responsable en España y, aunque dio funciones al presidente Borja Prado en la línea editorial, a las pocas semanas ordenaron al nuevo consejero delegado que tomara las riendas del canal.

En Italia no gustó que Prado intentase buscar alianzas empresariales y que hablase a nombre de Mediaset sin articular una estrategia conjunta con el equipo directivo de Milán, por lo que pocos meses después del desembarco del nuevo equipo se rompieron definitivamente las relaciones con Salem. El directivo italiano logró orillar a Prado dejándole en una representación meramente institucional y empezó a reconstruir la cadena.

Fin de ‘Sálvame’

En mayo se conoció que el mítico Sálvame dejaba la parrilla tras 14 años ocupando las tardes de Telecinco. Fue la primera decisión de una cadena que quería alejarse del amarillismo, aunque discretamente sirvió para que Ana Rosa Quintana -una de las periodistas más críticas con Sánchez- fuera enviada a la franja de tarde para encabezar un nuevo magazine. En su lugar, ficharon para las mañanas a un equipo menos crítico con la labor del Gobierno.

En octubre el grupo audiovisual fichó a Francisco Moreno como director de Informativos, hasta entonces administrador único del Ente Público Radio Televisión Canaria (RTVC).  Quienes le conocen le definen como progresista, perfil que coincide con su designación en 2015 para el Consejo Rector de RTVC, precisamente por el PSOE.  En julio de 2018 también se postuló como presidente de RTVE y se llegó a decir que contaba con el apoyo de los socialistas aunque finalmente resultó elegido Pérez Tornero. Pese a que tiene un perfil técnico, está en la órbita de la centroizquierda.

Franganillo en Mediaset

En noviembre se conoció la incorporación de Carlos Franganillo, hasta entonces presentador del telediario de las noches de La 1. La estrella de los informativos de RTVE, con un gran cartel y prestigio y que ideológicamente está cerca de la centroizquierda asumió esta semana el prime time de la cadena poniendo en marcha un informativo para competir con Antena 3 y Vicente Vallés desde otra perspectiva ideológica. 

El equipo lo completa Juan Pedro Valentín, encargado de reconstruir Noticias Cuatro, y que también está en la misma sintonía de Moreno y Franganillo. Respecto al futuro, desde la cadena se dice que apostarán por una información no ideologizada, algo que parece difícil considerando la estructura directiva decidida. Del mismo modo, Salem ha indicado que no tiene sentido competir en el mismo espectro que el resto de las cadenas, por lo que queda claro que lo harán desde una perspectiva más progresista… y cercana al Gobierno.