Marruecos eleva su gasto militar para 2024 e iguala ya el presupuesto de Defensa de España
El apoyo de EEUU e Israel ha convertido a Rabat en una gran potencia. Drones y escudos defensa, prioridades
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha afianzado las relaciones con Mohamed VI. | Europa Press
Marruecos incrementará considerablemente su gasto en Defensa en 2024 en un contexto de inestabilidad internacional y de ruptura de relaciones con la vecina Argelia. Su presupuesto, según los datos del Gobierno de Rabat a los que ha tenido acceso THE OBJECTIVE, superará los 124.700 millones de dírhams. Esta cantidad equivale a 11.400 millones de euros, una cifra muy aproximada al presupuesto de Defensa español.
Así, la monarquía norteafricana consolida su poder militar en el Mediterráneo occidental. Además, se dota una tecnología puntera. También esta apuesta militar servirá como recado a Argelia, aliado de Rusia y de China. En paralelo, el Gobierno de Pedro Sánchez sigue afianzando sus relaciones con Rabat en detrimento de las reclamaciones de los saharauis y el comercio y las inversiones con Argelia.
Nuestro vecino norteafricano dedicará algo más del 9% de su Producto Interior Bruto (PIB) a rearmarse. Por su parte, España mantiene la asignatura pendiente de llegar al 2%. Este porcentaje es el que se reclama desde la OTAN ante la necesidad de afianzar la defensa europea con el frente de Ucrania abierto desde febrero de 2022. El presupuesto de Rabat supone un nuevo récord e irá destinado principalmente a la compra de nuevo armamento.
Gasto militar de Marruecos
A esta rúbrica se destinó en 2023 un total de 116.000 dírhams -10.600 millones de euros-, un 4,3% menos que lo previsto para el próximo año. El enorme presupuesto militar de nuestro vecino del sur también servirá para crear empleo. En total, se proyectan 7.000 puestos de trabajo adicionales directos y más de 50.000 indirectos.
La ayuda de Estados Unidos, uno de los principales aliados del Reino alauí, será clave para llevar a buen puerto la iniciativa. Otro de los principales suministradores de Marruecos es Israel. La producción de nuevas armas también evitará la dependencia exterior y fortalecerá su autonomía ante un potencial conflicto.
Rabat busca ampliar su flota de drones para inteligencia, vigilancia y reconocimiento y para fines de combate potencial al tiempo que desarrolla sus propias capacidades para producir sistemas similares. Los aviones de combate también están inmersos en un proceso de modernización y expansión con la disuasión como principal objetivo, según destacaba en un informe reciente el Instituto Marroquí de Análisis de Políticas.
Conflicto en el Sáhara y Argelia
El vecino norteafricano se enfrenta a desafíos con el conflicto del Sáhara, la guerra civil en Libia, la inestabilidad militar y de seguridad en Mali, el terrorismo yihadista y el rearme argelino. El principal proveedor de armas marroquí es Estados Unidos. El 76% del armamento que ha comprado el Reino alauí entre 2017-2021 ha procedido de ese país.
Marruecos, según informa la prensa local, tiene en el punto de mira adquirir 25 aviones de combate F-16C/D Block 72, así como actualizar 23 F-16 a la nueva configuración F-16V. El mismo departamento también aprobó la venta de municiones para F-16 por un valor aproximado de 209 millones de dólares. Además de Estados Unidos, Israel es un socio preferente en materia de armamento. A partir de estos acuerdos ha adquirido el sistema de defensa aérea y antimisiles Barak MX fabricado por Israel Aerospace Industries (IAI) y numerosos drones.
Asignatura pendiente de España
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, se comprometía el pasado verano a doblar el presupuesto militar de Defensa en apenas cinco años para alcanzar el 2% del PIB «entre 2028 y 2030». Los aliados se conjuraron en la cumbre aliada de Glasgow en 2014 a alcanzar ese porcentaje en menos de una década. Concretamente, en 2024 pero España siempre se ha encontrado lejos del 2%. En la actualidad, apenas supera el 1% y se encuentra a la cola en el ranking de la OTAN. Solo Bélgica y Luxemburgo invierten menos.
Según los últimos datos de la OTAN, de julio de 2023, apenas 11 países de la Alianza Atlántica superan el listón del 2% del PIB en gasto de defensa: Polonia, Estados Unidos, Grecia, Estonia, Lituania, Finlandia, Rumanía, Hungría, Letonia, Reino Unido y Eslovaquia.
El Gobierno de Sánchez ha acelerado en el último año la inversión en el área de Seguridad y Defensa con un total de 11.300 millones de euros en contratos y autorizaciones de gasto. Un esfuerzo económico que el Ejecutivo ha querido poner encima de la mesa en la OTAN.
Inversión en armas
El pasado abril, el Consejo de Ministros aprobó un acuerdo por el que se destinarán 742,9 millones de euros para comprar armamento, 16,5 millones para material de la Unidad Militar de Emergencias (UME) y 76 millones para construir infraestructuras de Defensa. Para ello, el Ejecutivo acordó modificar los límites establecidos en el artículo 47 de la Ley General Presupuestaria, para adquirir compromisos de gasto con cargo a los ejercicios 2024-2033.
Así, el Ministerio de Defensa podrá atender necesidades relativas a la modernización y adquisición de nuevos programas de armamento y material, adquisición de nuevo material para la Unidad Militar de Emergencias (UME), así como para la realización de obras de infraestructura. En relación con la modernización y adquisición de nuevos programas los compromisos futuros ascienden a 742.949.297 euros. Esta cantidad se destinará a seis programas de defensa.
