La operación editorial de Roures en Cataluña avanza y se coloca por detrás de Planeta

La operación de Jaume Roures para sacudir el sistema editorial catalán, donde Ediciones 62, de Planeta, goza de una posición privilegiada, va viento en popa. El grupo del fundador de Mediapro y el grupo Abacus, del empresario de la órbita de ERC, Oriol Soler, investigado por ser uno de los presuntos cerebros de Tsunami Democràtic, han adquirido Grup Enciclopèdia, uno de los tres gigantes del sector de libros en catalán. En el concurso de esta adquisición han superado a Penguin Random House, que también pujaba por hacerse con los sellos, el fondo y los contratos del histórico grupo que editaba la Gran Enciclopedia Catalana y que, desde la irrupción de internet, acarreaba enormes dificultades económicas.

El acuerdo alcanzado supone que el nuevo gran grupo editorial represente «cerca del 8% de cuota de mercado en catalán en Cataluña» y se convierta «en el segundo grupo editorial en catalán del país, según datos de GFK», explican en su comunicado. Es decir, por delante de Penguin Random House, que ostenta el 5% de mercado, y solo por detrás de Planeta, que tiene el 16% del mercado. La adquisición también establece que los proyectos editoriales de Grup Enciclopèdia se integrarán en un nuevo entorno empresarial junto con los sellos de Abacus, donde también se incluirán los intereses editoriales de Jaume Roures.

Como informó THE OBJECTIVE, después de la compra de la editorial Navona por parte de Roures y su socio Taxto Benet, en 2021, su grupo editorial se postuló como contrapoder de la casa editorial fundada por José Manuel Lara, con una apuesta más explícita a favor de vincular la lengua catalana con el soberanismo político. El anterior propietario, Pere Sureda, trató de mantener su sello al margen de los vientos políticos del momento y no entró nunca a formar parte de la Asociación de Editores en Lengua Catalana, una entidad que recibe el apoyo institucional de la Generalitat por su labor de normalización lingüística, y que pugna con el Gremio de Editores de Cataluña, organización empresarial más transversal que actúa como representación del colectivo editorial.

Subvenciones públicas

En esta ocasión, no obstante, no han asumido la deuda del histórico grupo. El director general de Abacus ha valorado la adquisición como «una muestra más del compromiso de Abacus con la lengua y la cultura catalanas y con la necesidad de fortalecer las industrias culturales del país. Nuestro objetivo es mantener vivos los valores que siempre ha representado Enciclopèdia Catalana». Por su parte, Roures ha enmarcado su participación a la voluntad de «garantizar la continuidad de proyectos editoriales históricos y de gran importancia para el país».

En una entrevista en La Vanguardia, Soler admitía que no habían «definido todavía» el reparto de esta nueva sociedad con Roures, pero que muy probablemente Abacus tendrá un poco más del 50%.

La cooperativa Abacus es líder en la distribución de libros, bienes educativos, culturales y de ocio en Cataluña. Cuenta con 49 establecimientos repartidos entre Cataluña, la Comunidad Valenciana y las Islas Baleares, y una tienda en línea. En 2018 recibió la Cruz de Sant Jordi por parte del Gobierno de la Generalitat. Es también el principal cliente de Grup Enciclopèdia y esto ha contribuido a hacerse con los sellos del grupo editorial frente a Random House.

Soler y el ‘procés’ independentista

Las empresas de Soler han recibido 5.632.081,39 de euros en subvenciones desde 2017, según los datos extraídos por este diario de la web del Registro de Ayudas y Subvenciones de Cataluña (RAISC). Aunque ahora potencia su faceta de hombre de negocios, el director general de Abacus fue, en los meses previos al referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017, el enlace del Govern con Julian Assange. Fue a visitarle en la embajada de Ecuador en Londres y, posteriormente, el fundador de WikiLeaks se pronunció a favor del procés.

Soler también es considerado el máximo responsable del denominado ‘Estado Mayor’, el grupo de hombres de confianza sin cargos públicos que contribuía de forma oculta a preparar el terreno para la eventual implantación de la nueva ‘república catalana’.

El catalán, un negocio

Una parte importante del sector del editorial catalán nunca ha visto con buenos ojos que el grupo Planeta sea la principal vía de supervivencia del catalán en este ámbito. En especial, después de que el grupo decidiera mover su sede fuera de Cataluña en 2017, en pleno desafío independentista. 

En la misma línea, la salud del catalán en el mundo editorial viene muy marcada por la venta de los libros de texto para las escuelas. Un subsector dominado por Santillana, del grupo Prisa, y que tienen un valor de más de 1.500 millones en el mercado. Aunque la lengua castellana sigue copando alrededor del 54% de las ventas en Cataluña, Planeta y Santillana son dos de los actores más importantes para que el catalán goce de una gran presencia en la oferta editorial.

Además, las editoriales exclusivamente en catalán, como ARA Llibres o Grup 9 Editors, así como la galaxia de grupos pequeños que publican en catalán, no pueden competir con los gigantes como Random House o Planeta. En estos casos, es mediante las subvenciones directas o la adquisición de obras para la red de bibliotecas públicas de la Generalitat o de entes como las diputaciones que pueden subsistir sin dificultades.

Si con la operación de Navona pusieron la primera piedra para cambiar los equilibrios en el mundo editorial en catalán, la adquisición de Enciclopèdia es un paso más en esta dirección. También un nuevo filón de negocio para el magnate del audiovisual.