Podemos prevé una lista europea de Sumar repleta de «traidores» del partido morado

Podemos no tiene dudas. Sumar está preparando una lista electoral para las elecciones europeas repleta de exdirigentes del partido morado. Perfiles que han logrado la notoriedad gracias a la trayectoria de Pablo Iglesias, y que en la escisión de Sumar se han decantado por Yolanda Díaz. Los Comunes de Ada Colau ya han formalizado su propuesta de que Jaume Asens sea el candidato de su grupo en la coalición. ¿Puede ser el candidato nacional? Formalmente sí, aunque fuentes de Sumar dudan que Díaz se decante por un perfil tan cercano al independentismo catalán. El nombre de María Eugenia Rodríguez Palop, quien ya ejerció de candidata de Unidas Podemos en 2019, también se ha pasado al bando de la gallega y su opción sigue sobre la mesa.

La propuesta de Asens, formalizada por las tres coordinadoras de los Comunes el pasado martes, amenaza con sacudir internamente a Sumar. Yolanda Díaz necesita entregar la candidatura europea a una persona de su confianza y que al mismo tiempo tenga la solvencia y el tirón necesario para afrontar una pugna a cara de perro con Irene Montero, número uno de Podemos. Los morados siguen interesados en una confluencia con otras formaciones independentistas, como ERC, Bildu y el BNG, pero están también dispuestos a ir en solitario a los comicios de junio. Saben que se juegan su futuro, pero dan por casi seguro el escaño de Montero y quieren demostrar que el proyecto de Yolanda Díaz es más débil de lo que se piensa.

Asens fue uno de los cofundadores de Podemos en 2014. Amigo íntimo de Pablo Iglesias y también de Íñigo Errejón. Es un abogado muy cercano a los movimientos activistas de los que proceden tanto Iglesias como Errejón. El ex número dos de Podemos, y ahora portavoz parlamentario de Sumar, recordó hace tiempo que durante las manifestaciones escribía el número de móvil de Asens en la mano por si acababa detenido. Con los años, Asens tomó partido por Iglesias. Ejerció de su hombre de confianza en Cataluña, hasta las últimas elecciones generales, cuando el abogado catalán empezó un acercamiento a Díaz.

Interlocutor con Puigdemont

Asens tiene contactos privilegiados con el entorno de Carles Puigdemont. Fue él quien aconsejó a Toni Comín fugarse a Bruselas en los días calientes del procés. Comín siguió su consejo y después lo hizo Puigdemont. En las últimas elecciones generales, parecía que Asens había quedado apartado. Yolanda Díaz eligió a Aina Vidal de cabeza de lista de Sumar por Barcelona, dejando a Asens en la estacada. Pero el resultado de las urnas otorgó a Asens otra oportunidad. La necesidad de acercamiento a Puigdemont y su entorno le devolvió protagonismo. Él organizó la reunión entre Puigdemont y Yolanda Díaz después del pasado verano, y sigue ejerciendo como consultor e intermediario en las relaciones entre el equipo de la gallega y el expresident de la Generalitat.

El pasado 30 de enero, Asens anunció su salida oficial de Podemos. Habló de un partido «cerrado» y «sectario», términos éstos que suelen emplear casi todos aquellos que han decidido darse de baja de la formación que en su día ayudaron a construir (y de las que han vivido en los últimos diez años). Una «traición» en plena regla, según afirman en Podemos, que ahora sirve para «cambiar de chaqueta». «Sumar es el nido de las víboras traidoras», comentan incluso miembros de algunos de los partidos adscritos a Sumar, que reconocen la intención de Díaz de hacerse con todos aquellos cargos medios e intermedios que pueden debilitar a Irene Montero. «Asens cambió de chaqueta en cuanto llegaron nuevos aires», agregan.

El nombramiento de Asens como candidato de los Comunes catalanes para las listas de Sumar no deja de sorprender por su marcado perfil filoindependentista. Los Comunes son una agrupación de corrientes y sensibilidades que mantienen un núcleo de izquierdista muy crítico con el nacionalismo, y concretamente con Junts per Catalunya. De ahí que promover a un perfil que hasta ahora se ha diferenciado por su cercanía ideológica y personal a Junts chirría a unas cuentas fuentes consultadas. Estos sectores ya dejan claro que exigirán que se celebren primarias sobre su nombre. En los Comunes prevé que este proceso se celebre después del Consejo nacional de finales de febrero.

Asens y Palop

Los Comunes cedieron a Errejón la portavocía en el Congreso después de la salida de Marta Lois. Así que resulta lógico que pidan a Díaz un puesto de salida en las listas europeas. Otra cosa es que Asens sea el candidato en todo el territorio nacional. Una opción que muchos en Sumar ven difícil de ejecutar. «¿Quién le va a votar en Andalucía y Madrid?», se preguntan. Según estas fuentes la lideresa de Sumar debe buscar un perfil más transversal y menos polémico (Asens es conocido internamente también por algunas meteduras de pata que podrían convertir la campaña de las europeas en un vía crucis para Díaz). Y entre los nombres que se barajan se halla también el de María Eugenia Rodríguez Palop, excandidata de Unidas Podemos en las últimas europeas de 2019.

Rodríguez Palop es otra rebotada de Podemos. Aunque a diferencia de Asens, la todavía eurodiputada se alejó de los morados cuando Díaz arrancó el proceso de escucha para la creación de Sumar. Rodríguez Palop aspiró en su momento a ser ministra de Igualdad, y algunos en Podemos sostienen que se sintió traicionada cuando Iglesias se decantó por Irene Montero. De ahí que su salto a Sumar fue tal vez menos doloroso que el de Asens, pero se produjo en los primeros momentos del choque entre Díaz y la cúpula morada, lo que le valdría también el apodo de «traidora».

Algunas fuentes en Sumar insisten en que el partido necesita a una candidata para los comicios europeos. Y aunque Rodrígurez Palop «no es muy conocida», aseguraría preparación y solvencia. Colaboró en la redacción del programa electoral de Sumar, es conocedora de las políticas feministas y ya ha trabajado en el Parlamento Europeo. Es la vicepresidenta de la Comisión de Derechos de la Mujer e Igualdad de Género de la Eurocámara. Y, sobre todo, ejercería como candidata de confianza de Yolanda Díaz, es decir, en cuota Sumar, para entregar a las otras formaciones (Comunes, IU y Compromís) los demás puestos en las listas.

Las fuentes de los Comunes recuerdan que las listas europeas serán «segregadas» en Cataluña. Es decir, que Sumar presentará una candidatura nacional (se vota en circunscripción única), pero con un orden y un listado diferente en Cataluña, moldeado a lo que quieran los Comunes. El resultado será que aunque Asens no sea el candidato nacional de Sumar, en Cataluña sí será su referente. «Asens de dos, pero su cara en los carteles y la papeleta en Cataluña», deslizan desde este frente.

Todos estos movimientos tienen una conexión clara según el punto de vista de los morados. Se trataría de pagar la traición a muchos cargos de Podemos que abandonaron el partido de Irene Montero y Ione Belarra. Así lo sugirió, por ejemplo, la actual coordinadora catalana Conchi Abellán, quien comentó sobre el posible nombramiento de Asens que «todo tiene un precio, es el mercado, amigo». Como ella, otras fuentes del partido morado aseguran que Díaz está devolviendo a todos aquellos que abandonaron el barco morado una salida como contrapartida por denunciar la presunta deriva sectaria de la formación de Montero.