Activistas ecologistas lanzan sopa de tomate sobre 'Los girasoles' de Van Gogh en Londres
La pintura tiene un valor estimado de 72,5 millones de libras esterlinas
Vincent van Gogh
El revólver con el que Van Gogh se suicidó, vendido por 160.000 euros
El Lefaucheux, de un calibre de 7 milímetros, estaba estimado entre 40.000 y 60.000 euros
Amando a Van Gogh al óleo y en 65 mil fotogramas
Vincent Van Gogh apenas llegó ser consciente de sus 37 años antes de dispararse en el pecho y morir a los pocos días, aunque hay quienes creen que el pintor no se suicidó sino que fue asesinado. Durante su última década de vida logró reunir más de 900 pinturas para un portafolio profesional que demoraría en ser considerado como tal.
La tristeza también tiene su lado bueno
Cada vez más vemos cómo las empresas intentan fomentar entre sus empleados la positividad y la felicidad. En algunas agencias de publicidad, por ejemplo, los creativos cuentan con lo que llaman “sala de pensar”, un espacio diferente y divertido para fomentar la creatividad. Y no solo pasa esto en las empresas: anuncios a todas horas nos recuerdan que debemos evitar la tristeza, buscar motivos para ser felices, para estar alegres.
Sin embargo, varios estudios científicos han demostrado que las emociones negativas despiertan mucho más la creatividad. Si no, que se lo digan a cantantes y poetas del mundo entero, que nos ofrecen constantemente sus letras más profundas sobre sus amores, o más bien sus desamores. Vamos, que si necesitas buenas ideas, mejor estar triste.
¿A quién le dio Van Gogh la oreja que se cortó?
Casi todo el mundo conoce la famosa anécdota sobre el pintor Vincent Van Gogh, quien, tal y como reportó su compañero y también artista Paul Gauguin, se cortó su propia oreja allá por 1888. Sin embargo, hasta ahora nadie conocía la identidad de la joven que fue la primera propietaria de la oreja más famosa en el mundo del arte. Para dar con el hallazgo, The Art Newspaper ha dado seguimiento a los detalles proporcionados por la escritora e historiadora irlandesa Bernadette Murphy en su libro La Oreja de Van Gogh: La historia verdadera. Después de un profundo estudio de archivos y del propio libro, los periodistas han descubierto el nombre de la joven en los registros del Instituto Pasteur de París, donde Gabrielle fue curada de rabia. Según la investigación, tras cortarse la oreja, el autor de La Noche Estrellada o Los Girasoles se la entregó a la joven Gabrielle, quien decidió no contárselo a nadie.
