THE OBJECTIVE
Cultura

Espacio Pedro Aunión: el homenaje necesario al acróbata que murió en un espectáculo del Mad Cool

Todo pasó hace un año. El acróbata Pedro Aunión realizaba unos ejercicios espectaculares a 30 metros de altura cuando cometió un error fatal: se produjo en el instante del cambio de cuerda y le hizo caer a plomo en una lenta agonía que presenciaron miles de personas. Pedro Aunión animaba en el Mad Cool los minutos previos al concierto de Green Day en la Caja Mágica. Una cámara recogió el vuelo y la caída y la posterior atención médica, y esas imágenes se reprodujeron simultáneamente en las pantallas gigantes para el asombro y conmoción de los asistentes: solo en ese momento comenzaron a comprender que nada había sido preparado, que fueron testigos de una muerte.

Espacio Pedro Aunión: el homenaje necesario al acróbata que murió en un espectáculo del Mad Cool

Todo pasó hace un año. El acróbata Pedro Aunión realizaba unos ejercicios espectaculares a 30 metros de altura cuando cometió un error fatal: se produjo en el instante del cambio de cuerda y le hizo caer a plomo en una lenta agonía que presenciaron miles de personas. Pedro Aunión animaba en el Mad Cool los minutos previos al concierto de Green Day en la Caja Mágica. Una cámara recogió el vuelo y la caída y la posterior atención médica, y esas imágenes se reprodujeron simultáneamente en las pantallas gigantes para el asombro y conmoción de los asistentes: solo en ese momento comenzaron a comprender que nada había sido preparado, que fueron testigos de una muerte.

Las asistencias se llevaron a Pedro Aunión tan rápido como pudieron y los organizadores acotaron el área de la caída, a menos de diez metros del escenario principal, sin mayor decoro que un pequeño corro de vallas cubiertas por una tela verde. La noticia comenzó a correr como la pólvora, transmitida de unos a otros, y fue cobrando tal dimensión que el silencio de los organizadores, que no atendían a la prensa, que no informaron a sus trabajadores ni a las bandas —Green Day actuó media hora más tarde—, avivó un océano de dudas respecto a la capacidad del Mad Cool para encajar los contratiempos y, por encima de todo, garantizar las medidas de seguridad necesarias. Muchos asistentes —un porcentaje pequeño, en cualquier caso— decidieron marcharse a sus casas por la gravedad de lo sucedido, incapaces de entregarse a una fiesta musical tras la muerte televisada.

Algunos se preguntaban si este suceso pondría fin al festival Mad Cool, la propuesta musical más ambiciosa de Madrid: ¿cómo sobrevivir a una tragedia como esta? Pero el paso de las semanas enfrió los ánimos; la noticia fue diluyéndose, como las dudas, y los promotores fraguaron una idea construida sobre una certeza: como el nombre de Pedro Aunión jamás dejará de estar ligado al del Mad Cool, planificaron un escenario que llevara su nombre.

La familia del acróbata, que se despidió de Pedro en una ceremonia budista a la que asistieron representantes del festival, celebró la creación de este espacio con agradecimiento. «La idea nos la propuso el Mad Cool a nosotros y desde el principio nos pareció bien, porque todo lo que sea mantener vivo el nombre de mi hermano, y sobre todo su legado artístico, a nosotros es algo que nos va a parecer siempre bien en cualquier de sus formatos», dijo su hermana Mónica en una entrevista con la agencia Efe. “Cuando nos dijeron que querían que su nombre fuera siempre ligado al Mad Cool, nos pareció genial, es lo que a él realmente le habría gustado: le da un sentido a todo lo que ha pasado y a su paso por aquí«.

Espacio Pedro Aunión: el homenaje necesario al acróbata que murió en un espectáculo del Mad Cool

Un verano después, el Mad Cool celebra su tercera edición en Ifema. Aquí, el Espacio Pedro Aunión resalta como un oasis. El lugar reservado es pequeño y tiene un diseño sugerente con sus colores de led naranja: más que una carpa temporal parece un edificio minimalista levantado con esmero. Tiene algunos condicionantes. La música exterior se cuela desde todas las direcciones. Desde la derecha, por los escenarios principales. Desde la izquierda, por los escenarios más pequeños. Los horarios prometidos en la guía oficial no se cumplen, varios espectáculos previstos en la agenda no tienen lugar. Con todo, el lugar conserva una esencia cautivadora que lo convierte en un lugar de peregrinaje.

La amplitud de propuestas que acoge es llamativa. Podemos presenciar la coreografía de una bailarina con un cubo de paredes luminosas. La performance Hakanai, a cargo de Adrien M & Claire B, produce una imagen de redes ilusorias que se mueven a voluntad de sus brazos y piernas. Tiene un efecto arrollador sobre los asistentes, como una fusión de la danza clásica con la tecnología.

Podemos encontrar actuaciones más accesibles. Los músicos de la compañía Toompack utilizan plásticos como instrumentos y bailan a ritmo de batucada. Su actuación coincidió con el concierto de Jack White y, sin embargo, mantuvieron el tipo: si bien el espacio tiene capacidad para acoger a mil personas, el público se podía contar por decenas. Los espectáculos se han repetido cada tarde y este sábado 14 cerrará el círculo.

 

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D