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Las fotos de Bradley Cooper e Irina Shayk que apuntan hacia una reconciliación

Mientras tanto, el actor ha aclarado los rumores que le relacionaron con Lady Gaga

Las fotos de Bradley Cooper e Irina Shayk que apuntan hacia una reconciliación

Gtres

Mientras medio mundo sigue suspirando por Bradley Cooper, unas imágenes en las que aparece paseando con Irina Shayk del brazo han hecho saltar todas las alarmas. ¿Han retomado su relación dos años después de su separación? Eso es lo que se preguntan los medios nacionales e internacionales.

No es la primera vez que se les ve juntos demostrando la buena sintonía que hay entre ellos. Han sido numerosos los paseos y las tardes de diversión, eso sí, siempre acompañados de su hija y ejerciendo de entregados papás. Pero en esta ocasión la ausencia de la pequeña ha sido lo que ha despertado la rumorología.

Las fotografías, que han corrido como la pólvora por el ciberespacio, fueron tomadas el pasado martes por el West Village, una de las zonas de moda de la ciudad de Nueva York donde ambos residen. En ellas se ve a la modelo rusa camina agarrando del brazo al atractivo protagonista de Resacón en Las Vegas que deja ver una gran sonrisa gracias a que prefirió ir sin mascarilla. La prensa norteamericana asegura que en las últimas semanas las imágenes de la pareja disfrutando de su tiempo libre en común, están siendo frecuentes. 

Siempre discretos y celosos de su vida privada, lo cierto es que durante su relación formaron parte de este ‘club selecto’ de parejas triunfadoras: guapos, atractivos, exitosos en sus respectivas carreras y enamorados. ¿Qué más se puede pedir? Y eso que a veces tanta ‘perfección’ no es como parece de puertas para afuera y, más de una de estas relaciones, termina entonando el «se nos rompió el amor de tanto usarlo», aunque también las hay que apuestan por una segunda parte. ¿Será este el caso de Bradley Cooper e Irina Shayk? 

Las imágenes de ambos dando un paseo agarrados del brazo, ha despertado los rumores de reconciliación

Así fue su relación 

Fue durante la primavera del 2015 cuando se dejaron ver en público por primera vez. Acudieron a uno de los numerosos musicales de Broadway. Dos semanas después hicieron acto de presencia en la gala del MET, pero lo hicieron por separado siguiendo con el carácter reservado de ambos. El New York Post aseguró en ese momento que lo suyo era una historia de amor en ciernes. En medio de estos rumores volvieron a coincidir en otro evento de alto copete como es la cena de corresponsales de la Casa Blanca. En esta recepción ya se dejaron ver juntos, lo suyo iba avanzando y el periódico antes mencionado explicaba cómo fue su comportamiento, lejos de objetivos indiscretos, en una fiesta privada organizada por la mismísima Rihanna en el Up and Down, uno de los locales más top de la ciudad de los rascacielos. Allí, y siempre según la información publicada por el Post, la pareja estuvo charlando con otras estrellas de Hollywood entre los que estaban Leonardo DiCaprio y Kerry Washington. A pesar de estar rodeados de rostros conocidos, buscaron su momento de intimidad en la zona del karaoke donde «se estuvieron besando».

Su historia de amor duró cuatro años y de ella nació su hija

El 10 de abril de 2017 se conoció la noticia del nacimiento de la hija que tienen en común y solo un día después la revista People anunciaba que el nombre elegido para la pequeña era Lea de Seine. A pesar de la discreción que siempre ha rodeado a la pareja, en aquel momento fuentes cercanas a la familia explicaron a varios medios de comunicación que la llegada de la niña había colmado de felicidad tanto a sus conocidos papás, como al resto de sus allegados.  

Pero todo cambió con el rodaje de A star is born donde Cooper comparte protagonismo con Lady Gaga, con quien se le llegó a relacionar. A principios de junio de 2019 se comenzó a hablar de una fuerte crisis entre Bradley e Irina que terminó en ruptura y no precisamente amistosa, pero por el bien de su hija aceptaron vivir en Manhattan y disfrutar de la custodia compartida. 

Zanja los rumores 

Aunque Lady Gaga ya era toda una celebrity en el mundo de la música, su interpretación en A star is born le valió el aplauso de la crítica especializada y también el hecho de estar en el ojo del huracán como supuesta culpable de la separación de Bradley Cooper e Irina Shayk. La película los llevó directos a los Oscar con ocho nominaciones, ganando el de Mejor Canción Original por Shallow. La actuación de los dos intérpretes cantándola en directo en la gala más importante del séptimo arte, no hizo más que avivar los rumores que ya estaban en la calle. La complicidad entre ellos traspasó la pantalla, pero ninguno quiso pronunciarse al respecto en ese momento. Ahora el actor, director y productor del filme ha zanjado las especulaciones en The Hollywood Reporter: «Estábamos actuando, yo había visualizado la performance como si fuera una escena de la película. Hubiera sido muy raro si hubiéramos cantado mirando al público».

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