Los rumores sobre Lady Gaga y Bradley Cooper siguen… ¿por qué?

Ha pasado un año desde que se estrenara Ha nacido una estrella y aún se sigue hablando de si estos están juntos… ¿es por machismo? ¿por los tiempos en que vivimos? ¿por evasión? Intentamos descifrarlo.

 

En septiembre hará un año del estreno de Ha nacido una estrella, de todo el fenómeno de crítica y público, de la repetición incesante de Shallow en emisoras de radio y reproductores de sonido y, claro, de los rumores sobre Bradley Cooper y Lady Gaga. Meses después del estreno la película, un éxito definitivo de taquilla, se llevó menos Óscares de los que deseaba, pero siguió generando titulares… y no relacionados con su calidad, su guión o su banda sonora, sino sobre, sí, sus protagonistas.

Repasemos un poco esta historia que, básicamente, ha estado conformada por rumores sin confirmar, separaciones en tiempos desafortunados y mucha necesidad de romanticismo arcaico (y hasta patriarcal, si lo pensamos un poco más): Lady Gaga y Bradley Cooper se conocieron cuando Cooper fue a convencerla de que estuviese en su película, hicieron migas de inmediato (según todas sus declaraciones posteriores) y colaboraron de lleno en la película; tras la película aparecieron en varias ocasiones juntos (él subió al escenario en varios conciertos de ella) y la interacción fue (siendo discreto) de devoción absoluta de Gaga hacia Cooper; Gaga terminó su relación con su prometido; llegó el Óscar y la comentada actuación de ambos en el escenario que alborotó los rumores de romance aún más; Cooper terminó su relación. En esas estamos y, un año después, al parecer los rumores valen más que el trabajo de ambos o que su privacidad. Pero, ¿por qué?

El romance que se hace realidad

A ver, esto no es nuevo. Con Titanic los rumores de chispas entre Leo y Kate rodaron también por un tiempo. Al público le gusta creerse que la historia de amor intenso que ven en pantalla no es actuada sino real, es posible que porque valide de alguna forma la conexión intensa que sintieron con la historia, que le de más “autenticidad”.

La realidad es que hay innumerables películas de amor, convincentes, conmovedoras e intensas, que terminan con sus parejas sencillamente siendo los que habían sido. El deseo de validación de un romance épico en tiempos de Tinder puede ser ampliamente responsable de la insistencia con que se mantiene el rumor tras tantos meses.

La fama de ambos

Obviamente si esto pasase entre dos desconocidos sería diferente, pero son dos personas exitosas y talentosas que, además, estaban con parejas menos famosas que ellos (Irina Shayk es una modelo muy conocida, pero Gaga es la Madonna contemporánea… la comparación es imposible). El momento power couple que además es pareja creativa siempre apela a las emociones del público, es una fantasía idealizada que funciona muy bien.

No siempre pasa, eso sí. Con Brad Pitt y Angelina Jolie la respuesta fue otra (además de que en este caso era real y no un rumor), pero claro Jennifer Aniston no era Irina Shayk. Era la chica común, la amiga de todos, alguien con quien conectar, a diferencia de la “distante” y escultórica Jolie. Puede que Gaga, de hecho, tenga más en común con Aniston y por ello este rumor funcione de la manera contraria a la historia de Brangelina. Gaga es una mujer hecha a sí misma, cercana cuando habla, comprometida… Shayk es una silenciosa modelo.

El machismo general

Sí, porque aunque Gaga sea una mujer empoderada estas historias de amor siempre van de que la chica consiguió a su príncipe azul y no al revés, y en este caso no ha sido diferente.

Para ser justos Gaga no ha ayudado en este sentido: la devoción desmesurada que ha demostrado por Cooper (a ver, sí, hizo la película pero no es dios ni un genio), véase el vídeo de uno de sus conciertos en Las Vegas en que se arrodilla a sus pies, por ejemplo, o cualquiera de sus declaraciones durante la promoción de la película; ha alimentado esa idea antigua de la chica “fea” (no lo decimos nosotros, lo ha dicho ella y lo dice la película… ¿por qué? Realmente no lo sabemos, porque está muy lejos de la realidad y además es un estereotipo pasado sobre lo que es la belleza) que el chico guapo conoce y luego elige.

Obviamente todo este cuento obvia el hecho de que Gaga es una música superdotada, una empresaria exitosa y una millonaria en su propio derecho, además de un símbolo sexual y un icono cultural, además de ser una mujer independiente capaz de encontrar a la pareja que quiera o no tenerla si no le place… en fin.

Los hechos

Vale, sí, es un rumor. Pero hay dos hechos indiscutibles que lo han alimentado como leña al fuego: la separación de ambos de sus parejas de años. Ambos, Gaga antes y luego Cooper, han terminado sus relaciones con, en el caso de ella, su prometido, y, en el de él, la madre de su hija. Puede que solo sea coincidencia o muy bad timming, pero lo que es cierto es que estas dos rupturas han mantenido vivo el rumor… incluso a pesar de que no se les ve juntos desde hace meses.

Evasión

El cambio climático, una isla de plástico que invade el océano, Trump, Boris Johnson y en general el renacimiento del fascismo y el populismo autocrático, las amenazas abiertas a los derechos de las mujeres, los homosexuales y los inmigrantes, el aumento en la depresión y la ansiedad, los bajos salarios, la inexistente seguridad laboral, los alquileres impagables… la lista podría seguir por un largo tiempo pero queda claro, ¿no? Concentrarse en un rumor sobre una historia de amor entre dos famosos es una buena forma de evitar pensar en todo el horror que rodea estos tiempos.

 

La conclusión es obvia: nada es un hecho hasta que no lo es. Los rumores son libres de crecer, reproducirse sin ningún control de natalidad y transformarse y este lo ha hecho. Ya sea por haber sucedido en un tiempo desprovisto de romanticismo lleno de personas anhelantes de algo real y menos apps que quieren que una historia de hadas contemporánea se haga real, ya sea porque ambos son famosos, ya sea por la arcaica idea de la chica fea conquista tío guapo, ya sea por otros factores… el rumor sobre este par ha seguido vivo y no parece que vaya a morir pronto.