THE OBJECTIVE
Actualidad

Vuelta al cole 2022: los trucos para gastar lo mínimo, incluso las familias numerosas

Las familias deberán pagar un 4,71% más que el curso anterior por cada alumno, lo que supone el mayor aumento registrado en los últimos cinco años

Vuelta al cole 2022: los trucos para gastar lo mínimo, incluso las familias numerosas

La vuelta al cole supone uno de los mayores desembolsos para las familias. | Eduardo Sanz (Europa Press)

Con el verano llegando a su fin y la vuelta al cole cada vez más cerca, son muchas las familias que empiezan a preocuparse. No solo por el estrés que puede generar el querer tenerlo todo listo a tiempo, sino también por el gran desembolso económico que supone para los hogares.

Este año, además, cuentan con un problema añadido: una subida de precios marcada por la inflación desbocada (la tasa en julio era del 10,8%). Tanto es así que las familias deberán pagar por alumno una media de 405 euros, un 4,71% más que hace un año; esto supone el mayor aumento registrado en los últimos años, según datos del comparador financiero Banqmi.

A pesar de todos estos cambios, y los posibles imprevistos que suelen surgir, María, madre de siete hijos (seis de los cuales aún están en edad escolar) ya tiene controlada la vuelta al cole: «Al principio era un caos, pero ya tengo años de experiencia con mis hijos y ya no me pilla el toro». Es precisamente esa experiencia la que le ha enseñado que es mejor no esperar a septiembre: empieza a planearla desde el mes de junio, justo una semana antes de que acabe el curso, cuando evalúa todo el material escolar y los uniformes para ver qué se puede reutilizar.

«Esperar a septiembre me da mucha más pereza, prefiero dejarlo todo preparado antes porque además, está todo mucho más a mano. Me encuentro con polos descosidos, faldas que les han quedado ya algo cortas, babys de mil colores por manchas de rotulador, estuches con agujeros… Hay que darle a todo una segunda oportunidad por lo que coso toda la ropa que puedo. También aprovecho el mercadillo del colegio y en vez de gastarme 20 euros en un polo, me gasto 5 euros», señala María al diario ABC.

Reutilizar y comprar productos de calidad en la vuelta al cole

El material escolar también es importante revisarlo y reutilizar todo el que sea posible: «Los estuches o mochilas, que a final de curso parecen que están para tirar a la basura, los meto en la lavadora y quedan casi como nuevos porque lo sucio no está estropeado. Mis hijos siempre quieren el último modelo, pero no hace falta comprar todo nuevo cada curso. Eso sí cuando hay que comprar una mochila prefiero gastarme algo más de dinero en una mejor porque las baratas tengo comprobado que duran tres meses. Es decir, al final, lo barato sale caro».

A parte de esto, recorren la casa buscando bolis, cuadernos, lapiceros, pinturas, etc., que les hayan podido regalar a los niños por su cumpleaños, por ejemplo, y estén en buen estado. María les pide a sus hijos que saquen punta a los lápices y lo dejen todo listo en los estuches. Tras revisarlo todo es cuando hacen un listado con lo que hace falta comprar.

Comprar durante el verano

No esperar a septiembre para comprarlo todo tiene menor impacto en la economía familiar
No esperar a septiembre para comprarlo todo tiene menor impacto en la economía familiar. Foto: Ricardo Rubio (Europa Press)

No hace falta esperar a septiembre para ir a comprarlo todo; María asegura que en el mes de junio suele haber descuentos en los grandes almacenes que, sumados a su descuento por ser familia numerosa, hacen las comparas mucho más rentables en esa fecha.

«¿Que en septiembre se le han quedado pequeños los zapatos?, pues los cambio o me devuelven el dinero. Así es mucho más sencillo todo y me ahorro dinero. Y, lo más importante —añade— me evito dejar este gasto para septiembre; es decir lo hago de manera más escalonada para que no afecte tanto a la economía familiar», asegura la también creadora del Instagram @nuevencasa, donde comparte consejos de organización y orden siendo familia numerosa.

Los seis hijos de María van a un colegio concertado y la mayor empezará este año la Universidad. Justo después de la pandemia tuvo que hacer un gran desembolso al tener que comprar tres Chromebooks (cada ordenador le costó 385 euros) a sus hijos. Y precisamente los libros son también otro de los grandes desembolsos para los padres a la hora de volver al colegio: «Siempre hemos aprovechado las ventajas del programa Accede de la Comunidad de Madrid por el que los libros eran gratuitos si al final de curso los entregábamos en buenas condiciones. Ahora tres de mis hijos utilizan libros online a través de unas licencias que pagamos».

Pero por mucho que se planee, en septiembre siempre suelen salir costes extras a los que hacer frente. Para ello, María asegura que emplean «el dinero de la revolución de la Renta». Además, el año pasado las niñas dejaron de ir a las clases extraescolares por motivos económicos, y no está previsto que este curso vuelvan a ir. El único que sí continúa es su hijo, quien irá a fútbol: «Hay que darle espacio, ya que está en casa con siete chicas, sus seis hermanas y yo».

Cambiar algunos hábitos que ayuden a ahorrar

A pesar de todo, esta madre reconoce que la elevada inflación va a cambiar muchas cosas en su casa. Sobre todo porque lo básico, el carro de la compra, ya ronda los 1.000 euros al mes.

«Tendremos que ajustarnos y cambiar hábitos con comidas más sencillas y renunciar a caprichos, lo que no es fácil con niños pequeños. Es importante, además, que los padres hablemos con los hijos para que se conciencien de la situación y no se lo tomen como un castigo. Mi hija, por ejemplo, sabe que no puede poner el aire acondicionado cuando quiera, o que en vez de encender el horno para tomarse una pizza con una amiga es mejor que caliente una tortilla de patatas, o mi hijo sabe que cada vez que se quita un jersey no lo puede echar a lavar porque es un coste innecesario. Son cambios que hay que asumir porque todo suma, pero para ello todos en casa debemos remar en la misma dirección. Hay que ser cautelosos», asegura.

A pesar de ser una familia tan grande, María no dispone de ayuda en casa. Sí que tiene una reducción de jornada en su trabajo que le permite tener el tiempo justo para llevar y buscar a sus hijos al colegio, ya que los horarios laborales de su marido no son compatibles con ello.

De nuevo, la clave para que el día a día no sea un caos es la organización: «Tenemos toda nuestra planificación diaria cogida con alfileres y no puede fallar nada porque sino se complica todo. Me ayuda que me han concedido un día de teletrabajo que me permite mayor flexibilidad. Aún así, no me extraña que en nuestro país las parejas no quieran tener hijos porque en vez de ayudas por parte de los gobernantes, parece que solo conceden problemas. Es una situación que debería cambiar por el bien de todos».

Publicidad
MyTO

Crea tu cuenta en The Objective

Mostrar contraseña
Mostrar contraseña

Recupera tu contraseña

Ingresa el correo electrónico con el que te registraste en The Objective

L M M J V S D